El presidente Donald Trump presentó planes para una nueva flota de grandes buques de guerra, que se llamará acorazados "clase Trump", como parte de su visión para construir una "Flota Dorada", en Palm Beach, Florida, el lunes.
La nueva iniciativa surge cuando la Armada ha sufrido retrocesos en sus esfuerzos de construcción naval en las últimas décadas, incluida la cancelación del programa de fragatas clase Constellation el mes pasado.
Al hablar con periodistas en Mar-a-Lago junto al secretario de Guerra Pete Hegseth, el secretario de la Armada John Phelan y el secretario de Estado Marco Rubio, el presidente hizo referencia a los acorazados clase Iowa de la era de la Segunda Guerra Mundial, y dijo que la nueva clase de acorazados representará "100 veces la fuerza, el poder".
"He aprobado un plan para que la Armada comience la construcción de dos acorazados completamente nuevos, muy grandes —los más grandes que hemos construido—", dijo Trump. "Nunca ha habido nada como estos barcos. Estos han estado bajo consideración de diseño durante mucho tiempo, y comenzó conmigo en mi primer mandato".
Trump afirmó que el plan es comenzar con 2 barcos, expandirse a 10 y, eventualmente, aumentar el total a entre 20 y 25. Dijo que los primeros 2 barcos de la clase se construirán en 2.5 años.
El presidente también dijo que planea reunirse con contratistas de defensa en los próximos días para discutir la limitación de salarios ejecutivos, dividendos y recompras de acciones, y para alentarlos a invertir más en sus empresas.
Al hablar en el evento, Phelan se refirió a los nuevos buques de guerra como el "acorazado clase Trump", y afirmó que serán los "más grandes, más letales, más versátiles y de mejor apariencia en cualquier océano del mundo".
Uno de los primeros barcos de la nueva clase se llamará USS Defiant. La nueva clase de acorazados no es la primera vez que las fuerzas armadas designan una nueva plataforma de armas como tributo al 47.º presidente. A principios de este año, la Fuerza Aérea de EE. UU. designó su nuevo caza furtivo como el F-47.
Durante sus declaraciones del lunes, Trump indicó que tendrá un papel en el diseño del nuevo acorazado clase Trump. Dijo que el nuevo acorazado estará equipado con lanzadores de misiles hipersónicos, cañones electromagnéticos tipo railgun y láseres de alta potencia.
La semana pasada, Phelan anunció por primera vez planes para una clase separada de nuevas fragatas, cuya producción comenzará bajo la nueva iniciativa "Flota Dorada".
"He ordenado una nueva clase de Fragata como parte de la Flota Dorada de @POTUS", afirmó Phelan en X el 19 de diciembre. "Construida sobre un diseño estadounidense probado, en astilleros estadounidenses, con una cadena de suministro estadounidense, este esfuerzo se centra en un solo resultado: entregar poder de combate a la Flota con rapidez".
Esta clase de fragatas, aún sin nombre, retoma el punto donde terminó el programa clase Constellation. El nuevo buque se basará en el mismo diseño central que Huntington Ingalls Industry ha utilizado para los guardacostas de seguridad nacional clase Legend de la Guardia Costera de EE. UU.
Las fragatas son una categoría más pequeña de buques de guerra en comparación con destructores, cruceros y acorazados.
En el anuncio de fragatas de la semana pasada, el jefe de Operaciones Navales, almirante Daryl Caudle, dijo que las recientes operaciones militares de EE. UU. en los mares Rojo y Caribe habían demostrado el valor de poder desplegar buques de guerra más pequeños para operaciones distribuidas.
"Necesitamos más combatientes pequeños de aguas azules capaces para cerrar la brecha y mantener a nuestros destructores enfocados en el combate de alto nivel", dijo Caudle.
El anuncio de Trump del lunes ocurre días después de que firmó la Ley de Autorización de la Defensa Nacional (NDAA), que autoriza 901 mil millones de dólares en programas militares y de seguridad nacional para el año fiscal 2026.
