Un brote de botulismo infantil, una enfermedad grave causada por la toxina botulínica y vinculada a una marca de fórmula infantil retirada del mercado, se elevó a ocho casos, alcanzando un total de 23 en varios estados, según confirmaron funcionarios federales.
Hasta el momento, se registraron casos sospechosos o confirmados de botulismo infantil en 13 estados, informaron los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) y la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) en comunicados actualizados el 14 de noviembre.
Se reportaron casos en Arizona, California, Illinois, Kentucky, Michigan, Minnesota, Carolina del Norte, Nueva Jersey, Oregón, Pensilvania, Rhode Island, Texas y Washington, indicaron las agencias.
Según la FDA, los casos de botulismo están relacionados con todos los productos de fórmula infantil ByHeart Whole Nutrition, incluyendo lotes de latas que no habían caducado. Los productos se vendían en línea y en las principales tiendas minoristas de Estados Unidos.
En 22 de los 23 casos, la enfermedad comenzó entre el 9 de agosto y el 11 de noviembre, informó la FDA. Los 23 bebés fueron hospitalizados, pero no se reportaron fallecimientos.
"Como parte de esta investigación, funcionarios de varios estados recolectaron restos de fórmula infantil para su análisis", indicó la agencia, que añadió que se detectó la presencia de la bacteria que produce la toxina botulínica en una lata abierta de fórmula ByHeart que se le dio a un niño.
El 11 de noviembre, la empresa retiró del mercado todos sus productos de fórmula infantil ByHeart Whole Nutrition, incluyendo todos los lotes y todos los tamaños de latas y sobres individuales, según informó el CDC.
La agencia advirtió a los padres que no le dieran a sus bebés ningún producto ByHeart y les indicó que, si les sobraba alguno, lo etiquetaran como "NO USAR". Deben guardarlo en un lugar seguro durante un mes o más. Si su bebé presenta síntomas de botulismo, el producto puede enviarse a las autoridades estatales para su análisis.
Los CDC recomiendan a padres y cuidadores lavar con agua caliente y jabón, o en el lavavajillas si es posible, los artículos y superficies que hayan podido entrar en contacto con la fórmula.
La semana pasada, la empresa emitió un comunicado en el que expresó: "Fundamos esta empresa para que los padres tuvieran plena confianza en la alimentación de sus bebés. Por eso, nos duele profundamente saber que los últimos días han causado confusión y temor a muchos de ustedes, y lo lamentamos muchísimo".
ByHeart afirmó que la retirada del mercado fue voluntaria y que "ningún producto ByHeart sin abrir dio positivo en las pruebas de esporas o toxina de Clostridium botulinum". La FDA indicó en su alerta que la detección de la bacteria es difícil y recalcó que un resultado negativo no descarta la presencia del microorganismo.
Los padres de dos bebés que fueron hospitalizados con botulismo infantil demandaron a ByHeart, alegando negligencia en la fabricación, el almacenamiento y la distribución de los productos.
"Los demandantes aún desconocen si habrá efectos a largo plazo, y esa incertidumbre persiste a diario", afirmaron los abogados de una de las familias en su demanda.
Según la Clínica Cleveland, los síntomas del botulismo infantil incluyen estreñimiento, dificultad para alimentarse, succión débil, pérdida del control de la cabeza y los músculos, párpados caídos, letargo, falta de expresión facial y llanto débil. Los síntomas pueden progresar hasta causar dificultad respiratoria, apnea o parálisis.
Una solicitud previa de comentarios de Epoch Times a ByHeart sobre las demandas no obtuvo respuesta.
