El presidente Donald Trump afirmó el 24 de septiembre que el Servicio Secreto estaba investigando lo que él denunció como un "sabotaje" en la sede de las Naciones Unidas (ONU) en Nueva York, alegando que una serie de fallos en el sistema de sonido, una escalera mecánica y un teleprompter del recinto interfirieron en su discurso del día anterior.
"No fue una coincidencia, fue un triple sabotaje en la ONU. Deberían avergonzarse", escribió Trump en una publicación en Truth Social. "Deben conservarse todas las cintas de seguridad de la escalera mecánica, especialmente las del botón de parada de emergencia".
Trump afirmó que la escalera mecánica en la que viajaban él y la primera dama, Melania Trump, "se detuvo bruscamente" cuando les llevaba a la planta principal, lo que, según él, casi les hace caer de bruces. Afirmó que quienquiera que estuviera involucrado debería ser detenido.
"Luego, mientras me encontraba ante una multitud televisiva de millones de personas en todo el mundo y líderes importantes en la sala, mi teleprompter no funcionó. Estaba completamente a oscuras", dijo Trump.
El presidente añadió que, tras finalizar el discurso, alguien le dijo que "el sonido estaba completamente apagado en el auditorio" donde estaba hablando y que solo los líderes mundiales que utilizaban los auriculares de los intérpretes podían oír sus comentarios.
Trump dijo que remitiría el asunto al secretario general de la ONU y exigió una "investigación inmediata" con la participación del Servicio Secreto.
La ONU no respondió a una solicitud de comentarios antes de esta publicación.
El martes, Stephane Dujarric, portavoz del secretario general de la ONU, emitió un comunicado en el que afirmaba que el camarógrafo de la delegación estadounidense podría haber activado inadvertidamente la función de seguridad de la escalera mecánica mientras subía hacia atrás para filmar la llegada del presidente.
"Una investigación posterior, que incluyó una lectura de la unidad central de procesamiento de la máquina, indicó que la escalera mecánica se había detenido después de que se activara un mecanismo de seguridad incorporado en el peldaño de peine en la parte superior de la escalera", dijo Dujarric, y describió el mecanismo como diseñado para evitar que personas u objetos quedaran atrapados o fueran arrastrados hacia los engranajes.
"El camarógrafo pudo haber activado inadvertidamente la función de seguridad descrita anteriormente", añadió.
La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, antes del discurso de Trump, señaló un informe del periódico británico The Times del 21 de septiembre, en el que se indicaba que los empleados de la ONU habían estado bromeando sobre apagar las escaleras mecánicas y los ascensores para marcar la llegada de Trump, y decirle al presidente que se habían quedado sin dinero para hacerlos funcionar.
"Así que, cuando se junta todo esto, a mí no me parece una coincidencia", declaró a Fox News el 23 de septiembre.
En cuanto al fallo del teleprompter, un funcionario de la ONU declaró el martes a Reuters que la Casa Blanca controlaba su propio teleprompter. El funcionario afirmó que el sistema de sonido estaba configurado para que los asistentes pudieran escuchar los discursos traducidos a seis idiomas diferentes a través de auriculares.
Aldgra Fredly contribuyó a este reportaje.
Con información de Reuters.
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