La presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum, declaró el 4 de julio que espera que el boxeador Julio César Chávez Jr. sea deportado a México para cumplir una condena de prisión tras su arresto en Los Ángeles por las autoridades migratorias estadounidenses.
"Esperamos que sea deportado y cumpla su condena en México", declaró Sheinbaum durante una rueda de prensa el viernes, refiriéndose a los cargos que enfrenta el boxeador en México relacionados con el tráfico de armas y drogas. Añadió que México no arrestó previamente a Chávez, ya que residía principalmente en Estados Unidos.
Chávez, de 39 años, fue arrestado el 2 de julio por agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) de Estados Unidos en Studio City, Los Ángeles, pocos días después de perder un combate de boxeo contra el influencer de redes sociales Jake Paul en Anaheim, California. Su abogado, Michael Goldstein, afirmó que agentes federales detuvieron al boxeador mientras conducía una motoneta frente a su residencia en el exclusivo barrio cerca de Hollywood.
El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) afirmó que Chávez se quedó en el país más tiempo del permitido por su visa de turista al ingresar a Estados Unidos en agosto de 2023. La agencia también acusó a Chávez de realizar múltiples declaraciones fraudulentas en una solicitud de residencia permanente legal, basándose en su matrimonio con la ciudadana estadounidense Frida Muñoz, quien está vinculada al cártel de Sinaloa a través de una relación previa con el hijo del capo Joaquín "El Chapo" Guzmán.
Chávez tiene una orden de arresto vigente emitida en 2023 por presunta participación en el cártel de Sinaloa y tráfico de armas de fuego, municiones y explosivos.
Funcionarios de inmigración estadounidenses afirman que tiene vínculos con el crimen organizado y lo calificaron de "grave amenaza para la seguridad pública", pero su incorporación al sistema de seguridad pública del DHS durante la era Biden indicó que no era una prioridad para las autoridades migratorias. "Es impactante que la administración anterior señalara a este inmigrante ilegal delincuente como una amenaza para la seguridad pública, pero optara por no priorizar su deportación y le permitiera regresar a nuestro país", declaró Tricia McLaughlin, subsecretaria del DHS. "Con el presidente Trump, nadie está por encima de la ley, ni siquiera los atletas de fama mundial. Nuestro mensaje a cualquier grupo afiliado a un cártel en Estados Unidos es claro: los encontraremos y enfrentarán las consecuencias. Se acabaron los días de violencia desenfrenada de los cárteles".
El abogado de Chávez negó las acusaciones, calificándolas de "indignantes" y sugiriendo que son simplemente "otro titular para aterrorizar a la comunidad".
Chávez, hijo del legendario campeón de boxeo Julio César Chávez Sr., ha tenido varios problemas con la ley en Estados Unidos, incluyendo una condena por conducir bajo los efectos del alcohol en 2012, conducir sin licencia y cargos por posesión ilegal de armas en 2024.
Su carrera boxística también ha sufrido reveses debido a pruebas de drogas fallidas, suspensiones y pesos no alcanzados para las peleas programadas.
Con información de The Associated Press.
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