Los representantes de Irán y Estados Unidos mantendrán conversaciones la próxima semana, según anunció el presidente Donald Trump el 25 de junio, tras la conclusión de un conflicto armado de 12 días en el que participaron fuerzas iraníes, israelíes y estadounidenses.
“Vamos a hablar con ellos la próxima semana, con Irán. Puede que firmemos un acuerdo, no lo sé”, declaró Trump en una rueda de prensa durante la cumbre de la OTAN en los Países Bajos.
La Administración Trump había mantenido varias rondas de conversaciones con Irán durante la primavera, en busca de un acuerdo para frenar las ambiciones nucleares de Teherán.
El acuerdo entre Estados Unidos e Irán había resultado difícil de alcanzar. El 13 de junio, las fuerzas israelíes lanzaron ataques sorpresa en todo Irán con el objetivo de paralizar sus programas nucleares y su capacidad militar ofensiva.
Tras el ataque israelí, los representantes iraníes cancelaron una serie de conversaciones previstas para el 14 de junio con los representantes estadounidenses, e Irán comenzó a lanzar misiles y drones en represalia contra Israel.
Trump acabó ordenando al ejército estadounidense que interviniera, ordenando un ataque con bombarderos desde todo el mundo contra tres instalaciones iraníes, incluida la planta subterránea de enriquecimiento de uranio de Fordow, que había sido difícil de dañar con las armas de las fuerzas israelíes.
Trump calificó la misión de bombardeo del 21 de junio como un éxito rotundo que ha dañado gravemente el programa nuclear de Irán.
Después de lo que describió como un ataque con misiles iraní "débil" y coreografiado contra una base militar estadounidense en Catar, Trump pidió que se pusiera fin al conflicto en Medio Oriente.
Incluso al anunciar las próximas conversaciones entre Estados Unidos e Irán, Trump cuestionó si serían necesarias.
“No me importa si hay un acuerdo o no. Lo único que pediremos es lo que pedíamos antes. No queremos armas nucleares, pero hemos destruido las armas nucleares”, afirmó el presidente.
En las horas posteriores al ataque estadounidense del 21 de junio contra las instalaciones nucleares de Irán, Trump afirmó que las fuerzas estadounidenses habían "destruido completa y totalmente" sus objetivos.
En una rueda de prensa celebrada el 22 de junio, el general Dan Caine, jefe del Estado Mayor Conjunto, afirmó que el ejército estadounidense seguía evaluando los daños causados por el ataque.
El presidente siguió defendiendo la eficacia del ataque estadounidense el miércoles, leyendo una declaración de la Comisión de Energía Atómica de Israel en la que se afirmaba que el ataque estadounidense contra Fordow había dejado la instalación de enriquecimiento de uranio "totalmente inoperativa".
La Casa Blanca también compartió el miércoles una declaración con The Epoch Times en la que se citaba al portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores iraní, Esmail Baghaei, diciendo que "nuestras instalaciones nucleares han sufrido graves daños, eso es seguro".
En declaraciones a Fox News el 24 de junio, el director general de la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA), Rafael Mariano Grossi, reconoció que la agencia no está del todo segura del paradero de las reservas de uranio enriquecido de Irán.
"No tenemos información sobre el paradero de este material", dijo Grossi.
Con información de Jack Phillips
Únase a nuestro canal de Telegram para recibir las últimas noticias al instante haciendo click aquí