GE Appliances anunció el miércoles que trasladará la producción de frigoríficos, cocinas de gas y calentadores de agua a plantas estadounidenses desde países extranjeros, entre ellos México y China, como parte de una expansión de USD 3 mil millones de su red de fabricación en Estados Unidos.
La empresa con sede en Louisville, propiedad del grupo chino Haier, dijo en un comunicado del 13 de agosto y en una rueda de prensa que la medida añadirá más de 1000 puestos de trabajo en cinco estados del sur, modernizará sus 11 plantas estadounidenses con nueva automatización y ampliará la producción en todas las líneas de productos. El plan sigue a compromisos anteriores de trasladar la producción de lavadoras de China a su sede de Kentucky.
"Hoy anunciamos un plan quinquenal de USD 3 mil millones para fabricar más productos estadounidenses y crear más y mejores puestos de trabajo en Estados Unidos", declaró Kevin Nolan, presidente y director ejecutivo de GE Appliances, durante una rueda de prensa en Louisville.
"La fabricación estadounidense volvió. En GE Appliances estamos mostrando el camino para recuperar la fabricación estadounidense a lo grande".
GE Appliances anunció que el cambio en la producción supondrá el traslado de la fabricación de cocinas de gas, actualmente en México, a su planta de LaFayette, Georgia, mientras que seis modelos de frigoríficos que se fabrican actualmente en China se fabricarán en su planta de Decatur, Alabama. La planta de la empresa en Camden, Carolina del Sur, añadirá a su gama calentadores de agua eléctricos e híbridos con bomba de calor, productos que también se fabrican actualmente en China, duplicando así la producción y el empleo de esa fábrica.
En Selmer, Tennessee, GE Appliances comenzará a producir dos nuevos modelos de aires acondicionados, mientras que en Louisville, Kentucky, una inversión previamente anunciada de USD 490 millones llevará la producción de más de 15 modelos de lavadoras de carga frontal desde China a su extenso campus central, conocido como Appliance Park.
Una vez implementado en su totalidad, el plan elevará la inversión total de la empresa en Estados Unidos desde 2016 a USD 6.5 mil millones.
Los anuncios de relocalización y ampliación de las inversiones se producen en un momento en que el presidente Donald Trump trata de atraer de nuevo a las fábricas a Estados Unidos con un arancel básico del 10 por ciento sobre la mayoría de las importaciones, junto con aranceles más elevados para algunos países, entre ellos China. Funcionarios de la Administración y otras personas describieron esta política como parte de un esfuerzo más amplio para reactivar la industria manufacturera estadounidense y reducir la dependencia de las cadenas de suministro extranjeras.
Una encuesta realizada en mayo por Allianz Trade reveló que nueve de cada diez empresas estadounidenses tienen previsto repatriar parte o la totalidad de su producción o cambiar a proveedores nacionales tras el anuncio de Trump en abril de subir los aranceles. Los ejecutivos citaron la mayor fiabilidad y la reducción del riesgo geopolítico como principales ventajas, aunque la escasez de mano de obra y la complejidad de la cadena de suministro siguen siendo obstáculos.
El gobernador de Kentucky, Andy Beshear, afirmó que la última ampliación de GE Appliance demuestra la capacidad del estado para apoyar a las empresas globales con una mano de obra cualificada y un clima empresarial favorable.
"Hoy, aquí mismo, en Appliance Park, estamos mostrando a Estados Unidos de América cómo se hace", declaró Beshear en la rueda de prensa del miércoles. "No estamos hablando de relocalizar productos, lo estamos haciendo. No estamos hablando de aumentar la fabricación, la estamos aumentando día tras día".
La empresa, que diseña y fabrica productos en Louisville, pero también tiene contratos con fabricantes extranjeros, afirmó que su estrategia principal es basar la producción en Estados Unidos siempre que sea posible.
Bill Good, vicepresidente de la cadena de suministro de GE Appliances, afirmó que la empresa también está invirtiendo en el desarrollo de la mano de obra y en proyectos comunitarios como parte de su plan de expansión.
"El renacimiento de la industria manufacturera estadounidense lo construirán las personas", afirmó Good en un comunicado. "Por eso nos asociamos con universidades, escuelas técnicas y institutos para formar a la próxima generación de líderes del sector manufacturero. No solo estamos recuperando puestos de trabajo, sino que estamos devolviendo el sentido, el orgullo y las posibilidades a la industria estadounidense".
GE Appliances afirmó que su presencia en la fabricación nacional contribuye con más de USD 30 mil millones anuales a la economía estadounidense y da empleo directo e indirecto a más de 113,000 personas.
Con información de Associated Press.
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