El presidente Donald Trump anunció el 18 de abril que planea implementar una orden ejecutiva de un día destinada a aumentar la responsabilidad entre la fuerza de trabajo federal de la nación.
Trump dijo en la red social Truth Social que, de acuerdo con su orden, la Oficina de Administración de Personal (OPM) emitirá nuevas regulaciones de servicio civil para los empleados gubernamentales de carrera.
«De ahora en adelante, los empleados de carrera del gobierno, que trabajan en asuntos de política, serán clasificados como 'Empleados de carrera política' (Schedule Policy/Career), y se les exigirán los más altos estándares de conducta y desempeño», dijo.
Si estos funcionarios se niegan a promover los intereses políticos del Presidente, o tienen un comportamiento corrupto, ya no deberían tener trabajo».
«Esto es de sentido común, y permitirá que el gobierno federal sea finalmente 'dirigido como un negocio'. Debemos erradicar la corrupción e implantar la rendición de cuentas en nuestra fuerza de trabajo federal».
El mismo día, la OPM anunció la norma propuesta que permite reclasificar ciertos puestos federales que influyen en la política como "Empleados de carrera política".
«Esta regla tiene como objetivo fortalecer la rendición de cuentas entre los empleados federales de carrera al tiempo que agiliza las remociones por mala conducta o mal desempeño», dijo.
La regla propuesta implementa una de las órdenes ejecutivas del primer día de Trump, «Restaurar la responsabilidad de las posiciones que influyen en las políticas dentro de la fuerza de trabajo federal». Esto revisará una orden del final de su primer mandato, que entonces se refería a "Empleados de carrera política" como «Programa F». Esa orden anterior fue rescindida por el presidente Joe Biden. Trump prometió a lo largo de su campaña de 2024 traer de vuelta el Programa F.
Los nuevos estándares de desempeño serán establecidos por nuevas regulaciones de servicio civil, que también fueron publicadas por la OPM el 18 de abril.
La oficina afirmó que el nuevo horario y las funciones de carrera política seguirían siendo no partidistas y basadas en el mérito.
Entre el 23 de abril y el 23 de mayo se recibirán los comentarios del público sobre la propuesta.
La Casa Blanca calcula que 50,000 empleados públicos, aproximadamente el dos por ciento de toda la plantilla federal, pasarán a esta nueva categoría una vez que se publique la norma definitiva. Los empleados de menor categoría, como los agentes de la patrulla fronteriza, quedarán en general exentos de esta norma.
Chuck Ezell, Director en funciones de la Oficina de Gestión de Personal, declaró en un comunicado de prensa que «los empleados federales que elaboran las políticas tienen una enorme influencia en nuestras leyes y en nuestras vidas».
«Estos empleados deben cumplir las normas de conducta más estrictas. Los estadounidenses merecen un gobierno eficaz y responsable», añadió.
Según una hoja informativa de la Casa Blanca sobre la norma, un informe de la Oficina de Rendición de Cuentas del Gobierno reveló que se puede tardar entre seis meses y un año en destituir a un empleado de bajo rendimiento.
«Sólo dos quintas partes de los directivos federales confían en poder destituir a empleados que cometieron faltas graves», señala el informe. «Sólo una cuarta parte cree que podría destituir a un empleado por bajo rendimiento en un elemento crítico de su trabajo».
Entre los ejemplos de problemas que se dejaron de complicar debido a las dificultades de despido, se incluyen una auditoría de la Corporación Federal de Seguros de Depósitos que descubrió una mala conducta sexual generalizada entre sus supervisores masculinos hacia las subordinadas femeninas, y abogados de carrera del Departamento de Justicia que se negaron a ayudar en algunos litigios.
«En una encuesta reciente se preguntó a empleados federales de alto nivel en Washington, D.C., qué harían si el Presidente les diera una orden legal que consideraran una mala política», decía la hoja informativa. «Una pluralidad dijo que ignorarían la orden y harían lo que consideraran mejor».
Tales acontecimientos se producen mientras la administración Trump trabajó en los últimos cuatro meses para reducir la fuerza de trabajo del gobierno federal, con decenas de miles de personas tomando medidas legales para conservar sus empleos.
Oposición
La discrepancia contra esta nueva regla ya estaba en marcha entre los legisladores demócratas antes de que Trump asumiera el cargo.El representante Gerry Connolly (D-Va.) anunció un proyecto de ley en enero que buscaba anular la entonces orden del Programa F, alegando que Trump estaba tratando de eliminar a los empleados no partidistas con leales políticos.
La Ley de Servicio Civil prohibiría que cualquier puesto de carrera creado después del 20 de septiembre de 2020 sea reclasificado al margen de los principios del sistema de méritos sin el consentimiento expreso del Congreso. Cuenta con 73 copatrocinadores, tres de los cuales son republicanos registrados: los representantes Brian Fitzpatrick (R-Pa.), Don Bacon (R-Neb.), y Seth Magaziner (R-R.I.).
El 16 de enero, el senador demócrata Tim Kaine presentó una propuesta similar en el Senado. Cuenta con 25 copatrocinadores, ninguno de ellos republicano.
Hasta el 18 de abril no se había votado ninguna de las dos.
Con información de Mark Tapscott.
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