Dos personas murieron este martes 6 de julio durante los incendios que se presentaron en el noreste de España, ante fuerte la ola de calor en Europa.
Los incendios de sexta generación que se propagaron simultáneamente en Torrefeta y Florejacs, en la provinvia de Lleida, en un área de unas 5000 hectáreas, dejaron dos víctimas mortales, según un comunicado de los bomberos de Cataluña.
Los bomberos encontraron a las dos personas sin vida mientras intentaban extinguir los incendios, que se produjeron por las altas temperaturas que azotan la región.
Las dos personas fallecidas en el incendio son el dueño de una granja de cerdos y un trabajador de la explotación ganadera, a quien el propietario fue a rescatar cuando lo vio afectado por el humo: ambos bajaron del vehículo todo-terreno en el que iban, en un camino de Coscó, en el núcleo agregado de Oliola, y ya no pudieron volver a subir, según informó la agencia española Efe.
Tras largas horas de trabajo durante toda la noche, los bomberos lograron contener parte de los incendios, pero mantendrán los trabajos durante el día a pesar de las altas temperaturas.
"También se ha pedido a los campesinos y ADF (Agrupaciones de Defensa Forestal) de la zona que rompan con tractores y maquinaria agrícola determinados campos de la zona frontal y el último tercio del flanco derecho, ante la inestabilidad prevista para la tarde", dice un comunicado de los bomberos del 2 de julio.
El presidente de la Generalidad de Cataluña, Salvador Illa, señaló en declaraciones a los medios que "lo más importante, y lo sabrán ustedes, dos personas desafortunadamente perdieron la vida. Quiero también dirigir unas palabras de condolencia y fraternidad a sus familiares".
Añadió que "hay dos bomberos heridos leves que, afortunadamente, se están recuperando bien, pero también nos da una idea de qué tan peligrosos son estos incendios".
También felicitó a todas las personas que han participado en las labores de extinción de los incendios, "muy especialmente a los bomberos, a los agentes rurales, a los Mossos d'Esquadra, a las policías locales".
Illa aseguró que se trata de incendios muy peligrosos, que en muchos lugares no se pueden apagar debido a que sobrepasan la capacidad de extinción de los bomberos. En este sentido Illa instó a los ciudadanos a seguir las indicaciones el Servicio de Protección Civil.
El presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, lamentó la muerte de las dos personas y envió un sentido abrazo a sus familiares.
"Mi solidaridad con todos los afectados y mi reconocimiento a los servicios de emergencia que están trabajando en extinguir [los incendios]", declaró Sánchez en un posteo en X.
El Servicio de Protección Civil emitió una alerta este miércoles por alto riesgo de incendio forestal en la Ribera d'Ebre y Terra Alta, y señaló que la ola de calor en la región se mantendrá hasta el 4 de julio.
Las altas temperaturas están afectando a gran parte de Europa, con alertas en Francia, España, Italia, Portugal, Reino Unido, Alemania y Países Bajos.
Con información de EFE.
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