La directora de Inteligencia Nacional de EE. UU., Tulsi Gabbard, anunció el martes la revocación de las autorizaciones de seguridad de 37 funcionarios actuales y antiguos de la comunidad de inteligencia por supuestamente “politizar y manipular la inteligencia”.
“Que se te confíe una autorización de seguridad es un privilegio, no un derecho. Aquellos miembros de la comunidad de inteligencia que traicionan su juramento a la Constitución y anteponen sus propios intereses a los del pueblo estadounidense han roto la confianza sagrada que prometieron defender”, afirmó Gabbard en una publicación en X.
Gabbard afirmó que la medida se estaba llevando a cabo siguiendo instrucciones del presidente Donald Trump.
Acusó a los 37 funcionarios de “abusar de la confianza pública al politizar y manipular la inteligencia, filtrar información clasificada sin autorización y/o cometer violaciones graves e intencionadas a las normas del oficio”.
Gabbard acusó abiertamente a la comunidad de inteligencia, que ahora supervisa, de ser utilizada como arma política en los últimos años, en particular contra Trump y sus aliados. El Departamento de Justicia formó un grupo de trabajo para investigar estas acusaciones.
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