Ford Motor está retirando 850,318 vehículos en Estados Unidos debido a un posible fallo en la bomba de combustible de baja presión, que podría provocar que el motor se apague, según informó el jueves la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en Carreteras de Estados Unidos (NHTSA).
Una bomba de combustible defectuosa puede reducir el flujo de combustible del depósito al motor, provocando que este se apague y aumentando el riesgo de accidente, según la NHTSA.
La autoridad de seguridad automovilística recibió seis quejas de consumidores que alegaban pérdida de potencia debido a un fallo de la bomba.
Antes de que falle la bomba de combustible, los conductores pueden notar un rendimiento deficiente del motor, incluyendo fallos de encendido, funcionamiento irregular, reducción de la potencia o la luz de advertencia en el tablero, según informó la NHTSA en un aviso a los concesionarios.
Los fallos son más probables cuando los niveles de combustible son bajos o en climas cálidos, añadió.
La retirada afecta a determinados modelos de Lincoln Aviator, camionetas F-150 y vehículos Mustang, entre otros. La NHTSA estima que el 10 % de los vehículos potencialmente afectados tienen el defecto.
Ford sigue desarrollando una solución.
Por Nilutpal Timsina y Aishwarya Jain
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