El Departamento del Interior (DOI) está adoptando nuevas políticas para acelerar la exploración y el desarrollo de minerales críticos situados en alta mar con el fin de reforzar las cadenas de suministro de Estados Unidos y proteger las necesidades energéticas, de seguridad y tecnológicas del país, según anuncio la agencia en un comunicado del 25 de junio.
Los minerales críticos, según lo determinado por el Secretario del Interior, incluyen minerales como el aluminio, el cromo, el cobalto, el galio, el iridio, el magnesio, el neodimio, el níquel, el paladio, el platino, el vanadio y el zinc.
Según el DOI, la Oficina de Gestión de Energía Oceánica (BOEM) y la Oficina de Seguridad y Cumplimiento Ambiental (BSEE), dos agencias que operan dentro del Departamento del Interior, están actualizando las políticas sobre minerales "en todas las etapas de desarrollo", desde la exploración inicial hasta la producción y las operaciones.
"Estas actualizaciones están diseñadas para reducir los retrasos, mejorar la coordinación y proporcionar una mayor certeza a la industria, al tiempo que se mantienen las salvaguardias medioambientales clave", afirma el comunicado.
La BOEM tiene previsto ampliar la duración de los permisos de prospección de los tres años actuales a cinco, lo que daría a las empresas "más tiempo para completar su trabajo sin interrupciones innecesarias", según el DOI.
Con el fin de acelerar el proceso de concesión de arrendamientos, la BOEM tiene la intención de identificar antes las zonas con potencial de desarrollo, sin perder tiempo en trámites como la creación de un grupo de trabajo conjunto con otras agencias. Se estima que esto supondrá un ahorro de hasta un año en los proyectos. La BOEM también tiene previsto ofrecer condiciones de arrendamiento favorables a las partes interesadas, como la exención de determinados gastos de alquiler.
Cuando se emite un arrendamiento, la BOEM y la BSEE examinan los proyectos con arreglo a los procedimientos de concesión de permisos de emergencia del DOI, que agilizan la revisión y aprobación de los proyectos. Esto reduce el tiempo total de los procedimientos de concesión de permisos de varios años a un máximo de 28 días.
Las aprobaciones para la cartografía, las pruebas y el desarrollo de los emplazamientos se "acelerarán", eliminando los pasos de cumplimiento innecesarios, según el departamento.
Se espera que las actualizaciones de la política garanticen el acceso a recursos esenciales para Estados Unidos, además de apoyar las tecnologías emergentes y reforzar las defensas del país.
“Estamos tomando medidas decisivas para asegurar el liderazgo de Estados Unidos en minerales críticos, recursos que impulsan nuestra economía, protegen nuestra seguridad nacional y sustentan la vida moderna", afirmó el subsecretario en funciones Adam Suess.
"Al eliminar retrasos innecesarios y mantener fuertes protecciones medioambientales, estamos creando un camino claro para un desarrollo responsable que fortalece tanto a nuestras comunidades como a nuestro país".
Las últimas medidas están en línea con el impulso de la administración Trump para agilizar el proceso de aprobación y reducir la burocracia en el sector de los minerales críticos, según el DOI.
El 24 de abril, el presidente Donald Trump firmó una orden ejecutiva titulada "Liberar los minerales y recursos críticos de Estados Unidos en alta mar".
"Estados Unidos se enfrenta a retos económicos y de seguridad nacional sin precedentes para garantizar un suministro fiable de minerales críticos independientes del control de adversarios extranjeros", afirma la orden.
“Las vastas zonas del lecho marino offshore albergan minerales y recursos energéticos críticos. Estos recursos son fundamentales para fortalecer nuestra economía, garantizar nuestro futuro energético y reducir la dependencia de proveedores extranjeros de minerales críticos”.
Riesgo de dependencia de China
El 11 de diciembre, el Comité Selecto sobre el Partido Comunista Chino (CCP) publicó un informe tras evaluar la dependencia de Estados Unidos de China para obtener minerales críticos.El informe advertía de que China suministra más del 50 % de la demanda estadounidense de 24 minerales críticos. Esto incluye el suministro de más del 90 % de la demanda estadounidense de tierras raras.
"La República Popular China manipula deliberadamente el mercado para mantener su dominio y utiliza las cadenas de suministro como arma para obtener ventajas estratégicas. Recurre al control de precios, la integración vertical y barreras sustanciales a la entrada para impedir la competencia de cadenas de suministro resilientes lideradas por Estados Unidos", afirma el informe, utilizando la sigla oficial de China.
"La República Popular China también aprovechó los controles a la exportación —por ejemplo, restringiendo la exportación de galio, germanio, grafito y antimonio— para tomar represalias contra Estados Unidos y afianzar su ventaja estratégica".
China empleó estas tácticas en abril, cuando su Ministerio de Comercio añadió siete minerales de tierras raras a su lista de control de las exportaciones. La medida se produjo en medio de las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China.
Trump anunció posteriormente, el 11 de junio, que Washington llegó a un acuerdo con Beijing, que incluía la garantía por parte de China del suministro de tierras raras e imanes a Estados Unidos.
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