La confianza de los consumidores registró un cambio considerable este mes, ya que el público pareció mostrarse más optimista sobre la economía y menos preocupado por la inflación en medio de la mejora de las condiciones comerciales mundiales.
El Índice de Confianza del Consumidor preliminar de la Universidad de Michigan, publicado el 13 de junio, subió a 60.5, un 16 por ciento más que en mayo y por encima de la previsión consensuada de 53.5. Aún así, sigue siendo más de un 11 por ciento inferior al de hace un año.
"Los consumidores parecen haberse recuperado en cierta medida del impacto de los aranceles extremadamente elevados anunciados en abril y de la volatilidad política observada en las semanas siguientes", afirmó Joanne Hsu, directora de encuestas a consumidores, en el informe.
La encuesta mensual registró repuntes generalizados, con un aumento del 8.1 por ciento en los índices de condiciones económicas actuales y de casi el 22 por ciento en las expectativas futuras.
Las expectativas de inflación a corto y largo plazo mejoraron significativamente a principios de junio.
Las perspectivas de inflación para un año se redujeron al 5.1 por ciento, desde el 6.6 por ciento del mes anterior. El pronóstico para cinco años se desaceleró al 4.1 por ciento, desde el 4.2 por ciento.
"Los temores de los consumidores sobre el posible impacto de los aranceles en la inflación futura se suavizaron algo en junio", afirmó Hsu.
La mejora del estado de ánimo se produce tras la estabilización de la situación del comercio internacional, que se vió trastornada luego del anuncio del presidente Donald Trump, el 2 de abril, de la imposición de aranceles generalizados.
Luego de la reunión de dos días celebrada esta semana en Londres, Estados Unidos y China elaboraron un borrador de acuerdo comercial. Según Trump, Beijing seguirá exportando minerales de tierras raras y los estudiantes chinos podrán asistir a universidades estadounidenses. El presidente también confirmó que los aranceles estadounidenses se fijarán en un 55 % y los chinos en un 10 %.
Los observadores del mercado siguen de cerca el calendario, ya que en julio vence el plazo de 90 días de la suspensión de los aranceles recíprocos para los socios comerciales de Estados Unidos.
Trump, en declaraciones a los periodistas en el Centro John F. Kennedy para las Artes Escénicas de Washington el 11 de junio, confirmó que la Administración enviará pronto cartas a otros países.
"En un momento dado, simplemente enviaremos cartas y creo que lo entienden, diciendo que este es el acuerdo, lo toman o lo dejan", afirmó.
En su comparecencia ante el Comité de Medios y Arbitrios de la Cámara de Representantes, el secretario del Tesoro, Scott Bessent, dijo a los legisladores que es "muy probable" que Trump "adelante la fecha" para permitir más negociaciones comerciales.
"Si alguien no negocia, nosotros tampoco lo haremos", afirmó Bessent.
Añadió que la Casa Blanca está inmersa en negociaciones comerciales con 18 socios importantes.
Datos que alimentan el optimismo
Diversas encuestas a los consumidores indicaron un repunte de la confianza en la economía en general.El mes pasado, el Índice de Confianza del Consumidor de The Conference Board avanzó luego de cinco meses consecutivos de descensos. El índice general reveló unas perspectivas más optimistas para la situación empresarial, las perspectivas de empleo y los ingresos futuros.
El secretario del Tesoro de EE. UU., Scott Bessent (derecha), y el representante comercial Jamieson Greer ofrecen una rueda de prensa en Ginebra, el 12 de mayo de 2025. (Fabrice Coffrini/AFP a través de Getty Images)."La recuperación ya era visible antes del acuerdo comercial entre EE. UU. y China del 12 de mayo, pero cobró impulso después", afirmó Stephanie Guichard, economista sénior de indicadores globales de The Conference Board.
Del mismo modo, el índice de optimismo económico de RealClearMarkets/TIPP subió un 2.7 por ciento entre mayo y junio. Los principales indicadores de la encuesta mensual —las perspectivas económicas para los próximos seis meses, las perspectivas financieras personales para los próximos seis meses y la confianza en las políticas económicas federales— repuntaron este mes.
Las expectativas de inflación a un año del Banco de la Reserva Federal de Nueva York también cayeron bruscamente, del 3.6 por ciento en abril al 3.2 por ciento en mayo.
Esta tendencia podría ser la norma en el futuro, según Bill Adams, economista jefe del Comerica Bank.
"Es probable que la confianza de las empresas y los consumidores mejore en la segunda mitad de 2025 si el debate público se aleja de los aranceles y se centra en los recortes fiscales", afirmó Adams en una nota enviada por correo electrónico a The Epoch Times.
"La estabilización de la política comercial también sería útil para animar a las empresas a seguir adelante con sus planes de crecimiento a largo plazo".
Los últimos datos económicos indican que los consumidores podrían tener razón al recortar sus previsiones de inflación.
La tasa de inflación anual general subió hasta un 2.4 por ciento en mayo, por debajo de lo esperado y el índice mensual de precios al consumo aumentó un 0.1 por ciento.
Los precios al por mayor subieron a un ritmo menor de lo esperado, un 0.1 por ciento el mes pasado. Los observadores económicos se han centrado en el índice de precios al productor, ya que puede servir como precursor de la inflación al consumidor, dado que se encuentra en una fase temprana de la cadena de suministro.
Las lecturas básicas de ambos índices, que excluyen los componentes volátiles de los alimentos y la energía, se situaron por debajo de las estimaciones consensuadas.
Estas cifras sugieren que los posibles efectos adversos de los aranceles aún no han renovado las presiones sobre los precios. Según Adams, las empresas podrían estar absorbiendo los costos adicionales.
"Si las empresas consideran que la demanda es demasiado débil como para repercutir el costo de los aranceles, tendrán que absorberlos. Eso reduciría sus ganancias", afirmó. "Cuando las ganancias disminuyen, el gasto de capital y la contratación también tienden a debilitarse, lo que ralentizaría la economía en general".
En cuanto a las perspectivas de crecimiento, el modelo GDPNow de la Reserva Federal de Atlanta, una estimación continua del producto interior bruto, prevé que la economía crecerá un 3.8 por ciento en el segundo trimestre. Si se cumple, supondría un aumento con respecto al 0.2 por ciento registrado a principios de año.
Únase a nuestro canal de Telegram para recibir las últimas noticias al instante haciendo clic aquí
