El Pentágono reveló detalles sobre cómo bombardeó la central nuclear iraní de Fordow, en una rueda de prensa celebrada el 26 de junio.
Fordow, que se encuentra bajo una montaña, fue una de las tres instalaciones nucleares bombardeadas por Estados Unidos el 21 de junio.
"Si quieren saber qué está pasando en Fordow, mejor vayan allí y traigan una pala grande, porque no hay nadie ahí abajo ahora mismo", dijo el secretario de Defensa, Pete Hegseth, en la rueda de prensa.
Los bombarderos B-2 estadounidenses lanzaron seis penetradores de ordenanza masiva (MOP) sobre Fordow. El primero descubrió el pozo principal, mientras que los cuatro siguientes entraron en él, descendieron hasta las instalaciones y provocaron explosiones. El sexto MOP era una bomba flexible, por si alguna de las otras no cumplía su función.
“Las armas se lanzaron a gran velocidad y según los parámetros establecidos”, dijo el presidente del Estado Mayor Conjunto, Dan Caine. “Todas las armas se dirigieron a sus objetivos previstos y a sus puntos de impacto previstos”.
Las bombas, dijo, atravesaron los túneles abiertos de Fordow y destruyeron hardware crítico.
“La mayor parte de los daños que hemos evaluado, basándonos en nuestros exhaustivos modelos, se deben a una capa de explosión combinada con el impulso que se extendió desde la onda”, afirmó Caine.
Caine no especificó cuáles eran los daños, ya que las evaluaciones de los daños no las realiza el Pentágono, sino la comunidad de inteligencia.
La CNN fue la primera en reportar el 24 de junio que los ataques contra Irán no destruyeron el programa nuclear del país "y probablemente solo lo retrasaron unos meses", citando una evaluación de fuentes anónimas de la Agencia de Inteligencia de Defensa (DIA), cuya conclusión era de baja confianza.
El informe también decía que “las reservas de uranio enriquecido de Irán no fueron destruidas” y que “la inteligencia evaluó que el uranio enriquecido fue trasladado fuera de las instalaciones antes de los ataques estadounidenses”.

Durante la rueda de prensa, Hegseth hizo hincapié en que el informe era “preliminar”. Citó numerosas fuentes primarias, como la inteligencia estadounidense e israelí, afirmando que los ataques destruyeron las instalaciones nucleares de Irán en Fordow, Natanz y Esfahan.
El presidente Donald Trump ha criticado el informe de la DIA.
“Acaban de salir declaraciones importantes de la Comisión de Energía Atómica de Israel y de Irán, como saben, de que fue una destrucción completa y total”, dijo Trump el 25 de junio.
“Y la CNN resultó ser una noticia falsa. Como siempre. Juro que no tienen credibilidad. Por eso no tienen espectadores. Pero se lo vamos a leer si no lo han visto”.
La CNN se ha mantenido firme en su información.
"Respaldamos plenamente el periodismo de Natasha Bertrand, y en particular su informe y el de sus colegas sobre la evaluación preliminar de inteligencia del ataque estadounidense a las instalaciones nucleares de Irán. El informe de CNN dejó claro que se trataba de un hallazgo inicial que podría cambiar con información adicional. Hemos cubierto ampliamente el profundo escepticismo del presidente Trump al respecto", dijo la cadena en un comunicado.
"Sin embargo, no creemos razonable criticar a los periodistas de CNN por informar con precisión sobre la existencia de la evaluación y describir con precisión sus hallazgos, que son de interés público".
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