Una mujer se declaró inocente el lunes de haber apuñalado mortalmente a un paramédico de Kansas City, Misuri, mientras la trasladaban al hospital en una ambulancia.
Shanetta Bossell, de 39 años, fue detenida el domingo tras intentar huir en la ambulancia mientras otros atendían la herida en el pecho del paramédico Graham Hoffman. Según los registros judiciales fue encarcelada con una fianza de un millón de dólares por cargos de asesinato en primer grado, delito con arma, agresión y resistencia a la autoridad. No figura ningún abogado en su nombre en los registros judiciales en línea.
El paramédico, de 29 años, llevaba tres años trabajando para el Departamento de Bomberos de Kansas City y era recordado por su dedicación al trabajo.
"Nuestra comunidad lamenta su pérdida a una edad tan temprana, con toda la vida por delante", declaró el fiscal del condado de Clay, Zachary Thompson, en una rueda de prensa celebrada el domingo por la noche.
Según la declaración jurada de causa probable, la policía vio a Bossell caminando por el arcén de una autopista el domingo por la mañana, con un corte en el dedo y sangrando. Había sido puesta en libertad bajo fianza solo dos días antes por un caso de resistencia a la autoridad que, según Thompson, incluía una agresión a un agente de la ley.
Mientras se dirigía al hospital, el conductor oyó a Hoffman pedir ayuda desesperadamente, diciendo que Bossell tenía un cuchillo. El conductor se detuvo y se apresuró a ir hacia la parte trasera. Al abrir la puerta, oyó a Hoffman decir: "Me apuñaló en el corazón", según la declaración jurada.
Según la declaración jurada, un oficial que seguía a la ambulancia vio cómo Bossell se subía a la cabina del vehículo e intentaba ponerlo en marcha. El oficial finalmente logró reducirla y tirarla al suelo. Pero durante el forcejeo, ella le mordió el brazo y él la golpeó en la cabeza con su arma de fuego para que lo soltara, según la declaración jurada.
Llegó una segunda ambulancia y el personal médico trasladó a Hoffman al hospital, donde falleció esa misma tarde.
Thompson dijo que cualquier condena por el cargo de asesinato podría acarrear una pena de cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional, o incluso la pena de muerte. Sin embargo, no dio más detalles sobre los planes de la fiscalía y dijo que la policía sigue investigando lo que calificó como un "horrible" crimen.
"Quiero ser muy claro", dijo. "Nuestra oficina utilizará todos los medios legales, morales y éticos a su alcance para garantizar que se haga justicia a Graham, a su familia y a toda la comunidad".
Por Heather Hollingsworth.
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