Un juez federal dictaminó el 16 de junio que las directivas de la administración Trump para rescindir determinadas subvenciones federales para la investigación eran nulas, e instó al gobierno a restablecer inmediatamente la financiación.
La sentencia se produjo en respuesta a una demanda judicial presentada por investigadores y asociaciones de salud pública, que alegaban que las directivas de los Institutos Nacionales de Salud (NIH) para rescindir las subvenciones para la investigación relacionadas con iniciativas de diversidad, equidad e inclusión (DEI) eran arbitrarias e inconstitucionales.
El juez William Young, de la corte de distrito de los Estados Unidos para el distrito de Massachusetts, declaró que las directivas de los NIH eran ilegales, ya que determinó que representan «discriminación racial y discriminación contra la comunidad LGBTQ de Estados Unidos».
«Cualquier discriminación por parte de nuestro gobierno es tan grave que requiere que la corte la prohíba y, en el momento oportuno, voy a hacerlo», declaró Young durante un juicio sin jurado celebrado el 16 de junio.
El juez también ordenó a la agencia que libere inmediatamente los fondos a los beneficiarios de las subvenciones, según un comunicado publicado por los demandantes en el que anunciaban la sentencia.
El Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS), que supervisa los NIH, declaró que tiene intención de recurrir la decisión. Afirma que seguirá garantizando que el dinero de los contribuyentes no se utilice para financiar investigaciones que «den prioridad a agendas ideológicas».
«Bajo el liderazgo del [secretario del HHS, Robert F. Kennedy Jr.] y la administración Trump, el HHS se compromete a garantizar que el dinero de los contribuyentes se destine a programas basados en prácticas empíricas y en la ciencia más rigurosa y no a mandatos divisivos de DEI o a la ideología de género», afirmó el portavoz del HHS, Andrew Nixon, en un comunicado.
En consonancia con una serie de órdenes ejecutivas emitidas por el presidente Donald Trump, se ordenó a las agencias federales que dejaran de financiar programas que promuevan la «ideología de género» y que retiraran el apoyo a las iniciativas de DEI que la administración considera discriminatorias. Siguiendo esas directrices, el NIH comenzó a aconsejar a su personal que cancelara las subvenciones relacionadas con DEI, la investigación sobre cuestiones transgénero o los proyectos con posibles vínculos con instituciones chinas.
La Unión Americana de Libertades Civiles, una de los demandantes en el juicio, dijo que la orden de la corte suponía una «gran victoria» para la salud pública.
«La sentencia de hoy confirma que la ciencia debe guiarse por la evidencia, no por la ideología», dijo Olga Akselrod, asesora principal del Programa de Justicia Racial de la Unión Americana de Libertades Civiles, en el comunicado.
«Al bloquear la directiva ilegal de los NIH, la corte protegió la integridad de la investigación científica y garantizó que los estudios críticos, especialmente los centrados en comunidades desfavorecidas y marginadas, puedan continuar sin interferencias políticas».
Más de 100 empleados de los NIH firmaron una carta el 9 de junio en la que pedían a la agencia que revocara la cancelación de las subvenciones para investigación y los despidos de personal. Según los empleados, el NIH canceló 2100 subvenciones por un total de unos USD 9.5 mil millones, y otros USD 2.6 mil millones en contratos.
En la declaración, afirman que el NIH actuó de forma indebida contra las universidades con medidas como la cancelación de subvenciones, el fin de la financiación de investigaciones centradas en iniciativas de DEI y el despido de trabajadores del NIH «sin tener en cuenta su propósito o necesidad».
Un portavoz del HHS declaró a The Epoch Times en un correo electrónico que la administración tiene la intención de garantizar que los fondos federales se gasten adecuadamente y que se suspenderán las subvenciones si implican «narrativas ideológicas» en lugar de «hipótesis demostrables y comprobables».
Con información de Zachary Stieber y Reuters.
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