Análisis de noticias
El amplio repunte de las acciones estadounidenses, impulsado por la disminución de las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China y la disminución de los temores inflacionarios, continuó durante la mayor parte de la semana, pero cesó abruptamente hacia el final debido a la creciente incertidumbre geopolítica en Oriente Medio.
El índice S&P 500 cerró en 5976 puntos el 13 de junio, con una caída del 0.39 por ciento en la semana. El Dow Jones Industrial Average cayó un 1.32 por ciento, cerrando en 42.197 puntos. El índice Nasdaq Composite bajó un 0.63 por ciento, hasta los 19,406 puntos, mientras que el Russell 2000 cayó un 1.49 por ciento.
Wall Street abrió la nueva semana bursátil del 9 de junio al alza, consolidando las amplias ganancias de la semana anterior, que impulsaron al S&P 500 por encima de los 6000 puntos por primera vez desde que alcanzó un máximo histórico en febrero.
Los alcistas del mercado de valores contaban con varios factores a su favor. Uno de ellos fue la reanudación de las conversaciones entre Estados Unidos y China en Londres, que generó esperanzas de una disminución de las tensiones comerciales entre las dos economías más grandes del mundo. Esto impulsó las acciones de los gigantes tecnológicos con una exposición significativa al mercado chino.
Otro factor positivo fue el inicio del evento WWDC 2025 de Apple en Cupertino, California, que impulsó el repunte tecnológico.
Mientras tanto, las expectativas de inflación al consumidor en EE. UU. para el próximo año cayeron al 3.2 por ciento en mayo desde el 3.6 por ciento de abril, marcando su mínimo en tres meses. Wall Street hace seguimiento de cerca a este indicador de inflación ante la ansiedad de los consumidores por el impacto de los aranceles en el costo de la vida.
El repunte continuó hasta mediados de semana, con el resultado positivo de las conversaciones entre EE. UU. y China y la publicación de un par de cifras de inflación mejores de lo esperado.
La inflación al consumidor, medida según la variación anual del Índice de Precios al Consumidor (IPC), fue del 2.4 por ciento en mayo, inferior al 2.5 por ciento previsto, debido a la reducción de los precios de la gasolina y los combustibles.
Los precios al productor, o inflación mayorista, subieron ligeramente hasta una tasa anual del 2.6 por ciento en mayo, desde el 2.5 por ciento de abril, en línea con las expectativas del mercado. Sin embargo, la inflación subyacente al productor, muy vigilada, se situó por debajo de las expectativas.
Estas cifras de inflación, mejores de lo previsto, disiparon aún más los temores de que los aranceles impulsaran los precios.
"Seguimos esperando", declaró Steve Wyett, estratega jefe de inversiones de BOK Financial, a The Epoch Times.
Al menos hasta el momento, las presiones alcistas sobre la inflación derivadas de los aranceles aún no se manifiestan. Esperábamos que los datos del IPC de mayo reflejaran el impacto de los aranceles; sin embargo, tanto la cifra general como la subyacente se situaron en el 0.1 por ciento, por debajo de lo previsto, y mantuvieron las cifras interanuales contenidas.
"En cualquier caso, los temores de una inflación significativamente mayor parecen infundados por el momento", afirmó.
Mientras tanto, la moderación de la inflación reforzó la perspectiva de que la Reserva Federal recorte los tipos de interés más pronto que tarde, según un analista.
"El IPC del jueves, más débil de lo esperado, muestra que seguimos avanzando hacia una inflación cercana al objetivo del 2 por ciento de la Reserva Federal, incluso ante la continua incertidumbre sobre los aranceles", declaró Rick Gardner, director de inversiones de RGA Investments, con sede en Raleigh, Carolina del Norte, a The Epoch Times.
Afirmó que los datos más moderados de inflación al consumidor y al por mayor sugieren que la inflación podría estar normalizándose, una señal alentadora tanto para los consumidores como para la Reserva Federal.
"Si seguimos viendo datos de inflación moderados, esto podría mantener la posibilidad de recortes de tasas por parte de la Reserva Federal sobre la mesa para el segundo semestre de 2025", afirmó.
La perspectiva de un recorte de tasas de la Fed es un buen augurio para dos subastas de bonos del Tesoro durante la semana, lo que hizo bajar los rendimientos de los bonos. El rendimiento de los bonos del Tesoro a 10 años de referencia alcanzó el 4.20 por ciento en la tarde del 12 de junio, por debajo del 4.50 por ciento a principios de la semana.
A mediados de la semana, se sumaron los sólidos resultados de Oracle Corporation. El gigante tecnológico espera que la tasa de crecimiento de la infraestructura en la nube se acelere del 50 por ciento en el año fiscal 2025 a más del 70 por ciento en el año fiscal 2026, lo que impulsará aún más el repunte del sector tecnológico.
La situación se complicó para los alcistas del mercado de valores el 13 de junio tras la escalada del conflicto entre Irán e Israel en Oriente Medio, que provocó un alza en los precios del petróleo y una caída en las acciones.
Gardner mantiene una visión positiva de la economía y la renta variable estadounidense.
"La economía podría haber sido más resiliente de lo que muchos esperaban, con una inflación más moderada, un mercado laboral sólido y su capacidad de adaptación a la incertidumbre arancelaria", afirmó.
"La capacidad de adaptación de nuestra economía podría ser una de las razones por las que el mercado de valores pudo recuperarse en un plazo relativamente corto desde sus mínimos de abril".
Gardner afirmó que, si bien las acciones se acercan a los niveles récord de febrero, los inversionistas podrían buscar pronto el próximo impulsor de las ganancias del mercado.
"El próximo catalizador para los mercados podría ser un acuerdo comercial con China, la extensión de los recortes de impuestos de 2017 y la posibilidad de recortes de tipos por parte de la Fed a medida que la inflación continúa moderándose", afirmó.
Kenwell, analista de inversiones estadounidense de eToro, sigue de cerca la decisión de la Reserva Federal sobre los tipos de interés de la próxima semana.
"Hasta ahora, el presidente Powell mantiene una postura cautelosa en materia de política monetaria", declaró a The Epoch Times.
Prevé que el presidente de la Fed se enfrente a preguntas más urgentes sobre qué necesita el banco central antes de recortar los tipos.
"Si bien Powell no da muchas pistas sobre las futuras decisiones de la Fed y se esfuerza por no revelar sus intenciones, los inversores anhelan certezas y buscarán respuestas durante la conferencia de prensa de la Fed de la próxima semana", concluyó.
Únase a nuestro canal de Telegram para recibir las últimas noticias al instante haciendo clic aquí
