Tropas de la Guardia Nacional se desplegarán próximamente en Nueva Orleans para ayudar a las autoridades locales, a petición del gobernador de Luisiana, Jeff Landry, según un anunció del presidente Donald Trump del 2 de diciembre.
"El gobernador Landry —un gran tipo, un gran gobernador— pidió ayuda en Nueva Orleans. Y vamos a ir allí en un par de semanas", dijo Trump durante su última reunión del gabinete del año en la Casa Blanca.
Trump no especificó cuántos soldados se enviarían ni la fecha exacta de su llegada. Landry, que solicitó en septiembre al gobierno el despliegue de hasta 1000 miembros de la Guardia para ayudar a combatir la delincuencia, dijo a los periodistas el 1 de diciembre que espera que lleguen antes de Navidad.
Durante su intervención en un evento público en conmemoración a las víctimas del atentado terrorista del 1 de enero en Bourbon Street, Landry dijo que habló recientemente con el presidente, quien le había reafirmado personalmente su compromiso.
"Me dijo: 'No se preocupe, Jeff, los tendremos allí en dos semanas'", recordó Landry.
En septiembre, Landry solicitó formalmente la financiación federal de una misión de la Guardia Nacional hasta el final del año fiscal 2026. En una carta dirigida al secretario de Guerra, Pete Hegseth, dijo que se había registrado un "aumento de los índices de delitos violentos" en Nueva Orleans, Baton Rouge y Shreveport, y habían surgido "críticas" de escasez de personal en las fuerzas del orden locales. Añadió que la vulnerabilidad de Luisiana a los desastres naturales, en particular a los huracanes, ha agotado aún más los recursos disponibles.
El apoyo adicional sería especialmente útil durante los grandes eventos, dijo Landry, incluidos los partidos de fútbol americano universitario y el Mardi Gras, el carnaval emblemático de Nueva Orleans. El Mardi Gras se realizará el 17 de febrero de 2026, aunque las festividades comienzan el 6 de enero.
La solicitud de Landry se realizó pocas semanas después de que Trump sugiriera que Nueva Orleans podría ser una de las próximas ciudades en recibir ayuda federal en materia de seguridad. En los últimos meses, ya se han desplegado unidades federales de la Guardia Nacional en Los Ángeles, Memphis, Baltimore, Washington y Portland, Oregón.
El despliegue previsto ha recibido diferentes reacciones por parte de los funcionarios municipales de Nueva Orleans. Varios concejales han expresado su oposición individual, pero la alcaldesa saliente, LaToya Cantrell, y el Departamento de Policía de Nueva Orleans han mantenido que la ciudad está abierta a cooperar con las autoridades federales para mejorar la seguridad pública.
"Nuestras alianzas federales y estatales han desempeñado un papel importante al garantizar la seguridad pública, especialmente durante eventos especiales para una ciudad de clase mundial", dice en una declaración conjunta de la oficina del alcalde y el departamento de policía.
"La ciudad de Nueva Orleans y el NOPD siguen comprometidos a mantener este impulso, asegurando que todos los vecindarios sigan sintiendo el impacto de estos esfuerzos combinados".
La alcaldesa electa Helena Moreno, demócrata que asumirá el cargo en enero de 2026, ha rechazado la idea de desplegar la Guardia Nacional en la ciudad. Acusó a la administración Trump de "politizar la seguridad pública" al enfocarse en las ciudades gobernadas por los demócratas y pasar por alto otras con lo que ella calificó de "graves" problemas de delincuencia.
"En última instancia, [esto] conduce al uso indebido de fondos y recursos públicos para obtener beneficios políticos", dijo Moreno en un comunicado.
Por otra parte, Nueva Orleans está recibiendo un aumento de las medidas federales de control de la inmigración. Se espera que una operación de la Patrulla Fronteriza sea supervisada por el comandante general de Aduanas y Protección Fronteriza, Gregory Bovino, quien anteriormente dirigió operaciones similares en Chicago, Los Ángeles y Charlotte, Carolina del Norte.
