El Senado aprobó el 17 de junio la Ley de Orientación y Establecimiento de la Innovación Nacional para las Monedas Estables de EE. UU., conocida comúnmente como Ley Genius, lo que supone un paso importante en la regulación de las criptomonedas.
En una rara muestra de apoyo bipartidista en la cámara alta, los senadores votaron 68 a 30 a favor del proyecto de ley.
La Ley Genius tiene por objeto regular el mercado de las monedas estables, valorado en 200,000 millones de dólares, y proporcionar al sector bancario y financiero un marco regulador más claro para las monedas digitales.
La semana pasada, el proyecto de ley sobre criptomonedas superó un obstáculo parlamentario al obtener 68 votos en el Senado.
El presidente del Comité de Servicios Financieros de la Cámara de Representantes, French Hill (R-Ark.), defendió el proyecto de ley y se comprometió a trabajar con sus colegas de la cámara baja "para aportar la claridad y las protecciones que tanto necesita el ecosistema de los activos digitales".
"Hace tiempo que se necesitan normas claras para las monedas estables, y hoy estamos un paso más cerca de crear un marco regulatorio funcional", afirmó Hill en un comunicado enviado por correo electrónico a The Epoch Times. "Aplaudo la aprobación de la Ley GENIUS por parte del Senado y el trabajo del presidente Scott, el senador Hagerty y la senadora [Cynthia] Lummis para hacer realidad este día histórico".
Antes de la votación, la senadora Lummis (R-Wy.) declaró a The Epoch Times que estaba "entusiasmada con el impulso" de la aceptación de las criptomonedas por parte de Washington.
"En cuatro años no lo conseguimos, no pudimos generar impulso aquí. Y finalmente lo hemos conseguido. No quiero perderlo", afirmó Lummis.
Las stablecoins son criptomonedas menos volátiles que están vinculadas a otro activo, principalmente al dólar estadounidense. Se pueden utilizar para pagos, comercio de futuros e inversiones refugio cuando los mercados se enfrentan a turbulencias.
Los defensores afirman que la Ley Genius las hará más omnipresentes —Tether (USDT) y USDC de Circle dominan el mercado de 228,000 millones de dólares— ya que podría fomentar la creación de más stablecoins y su adopción por parte de los consumidores.
Los legisladores, entre ellos el senador Bill Hagerty (R-Tenn.), afirman que el marco garantizará que Estados Unidos no se quede atrás en la competitividad mundial y protegerá la hegemonía del dólar.
"Un informe reciente prevé que, con un marco regulatorio estadounidense bien elaborado, los emisores de stablecoins podrían convertirse en uno de los principales tenedores de bonos del Tesoro de Estados Unidos a finales de esta década, si no antes", dijo Hagerty en el Senado el 11 de junio.
"Esto reforzaría nuestra posición fiscal y consolidaría el estatus del dólar como moneda de reserva mundial".
En un posteo en la plataforma de redes sociales X, el secretario del Tesoro, Scott Bessent, señaló que se prevé que las stablecoins se conviertan en un mercado de 3.7 billones de dólares a finales de la década, y esto se hace más plausible con la Ley Genius.
Al mismo tiempo, señaló, también sería un avance positivo para los costes de financiación del gobierno federal, ya que las stablecoins podrían ayudar a reforzar la demanda de valores del Tesoro de EE. UU.
"Esta nueva demanda podría reducir los costes de financiación del gobierno y ayudar a frenar la deuda nacional. También podría incorporar a millones de nuevos usuarios de todo el mundo a la economía de activos digitales basados en el dólar", afirmó Bessent.
Sin embargo, los críticos afirman que el proyecto de ley incentivaría la corrupción, facilitaría las actividades ilícitas y supondría una amenaza para el sistema financiero estadounidense.
"Si la mayoría quiere establecer un marco legal duradero para los activos digitales, en lugar de limitarse a intentar ganar puntos políticos, se tomará en serio estas preocupaciones y acordará mejorar el proyecto de ley", afirmó la senadora Elizabeth Warren (D-Mass.) el mes pasado en el Senado.
Las criptomonedas han sido una faceta destacada de la agenda económica de la administración.
Desde su regreso a la Casa Blanca, el presidente ha establecido una reserva estratégica de bitcoines, ha nombrado a un regulador favorable a las criptomonedas en la Comisión de Bolsa y Valores y ha apoyado una regulación más clara de las criptomonedas.
Un cambio clave fue la flexibilización de la normativa para permitir que los planes de jubilación 401(k) incluyan inversiones en criptomonedas.
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