El Departamento de Estado podría decir adiós pronto a su Oficina de Diversidad e Inclusión y a su Oficina de Asuntos Globales de la Mujer.
El secretario de Estado, Marco Rubio, anunció el 29 de mayo que envió al Congreso un plan para reorganizar el departamento como parte de un esfuerzo por reducir la burocracia y el gasto superfluo.
La reorganización supondría la eliminación o la fusión de más de 300 oficinas.
«Durante el último cuarto de siglo, las operaciones internas del Departamento de Estado crecieron exponencialmente, lo que dio lugar a más burocracia, mayores costes y menos resultados para el pueblo estadounidense», afirmó Rubio en una publicación en X.
Continuó diciendo que el departamento «debe avanzar al ritmo de la relevancia» y anunció en abril una amplia reorganización al departamento para alcanzar mejor ese objetivo.
«Hoy hemos dado el siguiente paso en ese proceso al notificar al Congreso cómo pensamos hacerlo», dijo Rubio. «El plan presentado al Congreso es el resultado de un trabajo reflexivo y deliberado de los altos cargos del departamento. Hemos tenido en cuenta las opiniones de los legisladores, las oficinas y los empleados con más antigüedad».
Parece que la reorganización estará terminada para el 1 de julio. No se necesitaría la aprobación del Congreso para la reestructuración.
Rubio también afirmó que «el plan de reorganización dará lugar a un departamento más ágil y mejor equipado para promover los intereses de Estados Unidos y garantizar la seguridad de los estadounidenses en todo el mundo».
El plan incluye la eliminación de la Oficina de Justicia Penal Global, que «asesora al secretario de Estado y al subsecretario de Estado para la Seguridad Civil, la Democracia y los Derechos Humanos sobre cuestiones relacionadas con los crímenes de guerra, los crímenes contra la humanidad y el genocidio» y «ayuda a formular la política estadounidense en materia de prevención, respuesta y rendición de cuentas por atrocidades masivas», según el Departamento de Estado.
También incluiría el cierre de la Oficina de Estrategia y Soluciones de Gestión y la Oficina de Gestión del Talento Global.
La primera «cataliza ideas y soluciones estratégicas para ayudar a mejorar la plataforma de gestión y promover los objetivos de política exterior», mientras que la segunda «se esfuerza por reclutar, retener y mantener una plantilla diversa, talentosa e inclusiva que esté plenamente preparada para promover los intereses de seguridad nacional de Estados Unidos y los valores estadounidenses en todos los rincones del mundo», según el departamento.
Los cambios se producen después de que el Departamento de Estado haya tomado otras medidas importantes, como el anuncio de Rubio el 28 de mayo que dice que «comenzará a revocar los visados de los estudiantes chinos, incluidos aquellos con conexiones con el Partido Comunista Chino o que estudian en campos críticos».
El departamento también suspendió las citas para visados de estudiantes como parte de un esfuerzo por identificar a los estudiantes extranjeros que, según afirma, han participado en actividades contra Israel.
«Estamos utilizando y seguiremos utilizando todas las herramientas a nuestro alcance para asegurarnos de que sabemos quiénes son los que quieren entrar en este país y si se les debe permitir hacerlo», declaró el 29 de mayo la portavoz del Departamento de Estado, Tammy Bruce. «Todas las naciones soberanas tienen derecho a proteger sus fronteras y a asegurarse de que saben quiénes se encuentran en su territorio y si es seguro que estén aquí».
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