WASHINGTON— La Policía del Capitolio de los Estados Unidos informó a The Epoch Times el 20 de junio que está investigando misteriosas y «preocupantes» entregas de pizza a legisladores.
«La Policía del Capitolio de los Estados Unidos está al tanto de las entregas de pizza no solicitadas a funcionarios electos y a los líderes del Capitolio de los Estados Unidos», dijo la Policía del Capitolio en un comunicado.
«Estas recientes entregas de pizza son preocupantes y una vez más, ponen de manifiesto el panorama de amenaza cada vez mayor en el que vivimos. No se tolerará ningún tipo de violencia o amenaza dirigida a funcionarios electos».
La Policía del Capitolio dijo que no podía proporcionar más detalles en este momento para proteger las investigaciones en curso y «minimizar el riesgo de imitadores».
«Estamos trabajando con nuestros socios federales, estatales y locales para abordar el asunto», dijo la Policía del Capitolio.
Taylor Haulsee, portavoz del presidente de la Cámara de Representantes, Mike Johnson (R-La.), dijo que no tiene conocimiento de que se haya realizado ninguna entrega al legislador.
Las amenazas contra los legisladores fueron un problema durante los últimos años.
La semana pasada, un hombre disparó a dos legisladores del estado de Minnesota y a sus cónyuges.
La representante estatal Melissa Hortman y su marido, Mark, murieron en el tiroteo.
Un sospechoso fue detenido tras una persecución de varios días. El otro legislador, el senador estatal John Hoffman y su esposa, Yvette, sobrevivieron y se recuperan en un hospital.
«Es solo el ejemplo más reciente del extremismo político violento en este país y es una tendencia que fue en aumento en los últimos años», declaró el fiscal federal interino de Minnesota, Joe Thompson, al anunciar los cargos federales contra el sospechoso.
En 2021, la entonces senadora Kyrsten Sinema (D-Ariz.), que se convirtió en independiente en diciembre de 2022, fue acosada en numerosas ocasiones por activistas progresistas fuera del Capitolio por su oposición a la abolición del filibusterismo y por lo tanto, a su mantenimiento en lo que era un Senado dividido a partes iguales, con la entonces vicepresidenta Kamala Harris, demócrata, como voto de desempate, lo que daba a su partido el control del Senado.
En 2020, el hijo de la jueza federal Esther Salas fue asesinado a tiros por un sospechoso que supuestamente guardaba rencor a su madre.
Salas dijo recientemente a ABC News que «se están entregando cientos de pizzas en los domicilios particulares de jueces de todo el país».
«Habíamos oído hablar de las pizzas que se entregaban en las casas de los jueces y eso qué significa? «Sé dónde vives», dijo.
En 2017, el líder de la mayoría en la Cámara de Representantes, Steve Scalise (R-La.) fue baleado por un hombre armado durante un entrenamiento de béisbol en las afueras de Washington, un día antes del partido benéfico anual de béisbol del Congreso. La policía del Capitolio, que se encontraba en el lugar porque Scalise era miembro de la dirección del Congreso, disparó al sospechoso.
Mientras que los miembros de la dirección del Congreso reciben protección de seguridad, los legisladores de base no suelen recibirla a menos que la soliciten.
«La violencia y las amenazas contra los funcionarios electos, incluidas las personas del Senado, aumentaron drásticamente», dijo el líder de la minoría del Senado, Chuck Schumer (D-N.Y.), tras una reunión informativa celebrada el 17 de junio con la sargento de armas del Senado, Jennifer Hemingway. «Eso significa que necesitamos más protección. Necesitamos más dinero».
La Policía del Capitolio solicitó 967.8 millones de dólares para el año fiscal 2026, lo que supone un aumento del 22 % con respecto al año fiscal actual, dijo el representante Adriano Espaillat (D-N.Y.) durante una audiencia presupuestaria en abril.
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