El ministro de Defensa de Israel profirió el jueves una amenaza directa al líder iraní Alí Jamenei tras un ataque con misiles iraníes que alcanzó un hospital israelí.
El ministro de Defensa israelí, Israel Katz, les dijo a los periodistas en referencia al líder iraní que las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) han recibido instrucciones y saben «que para alcanzar todos sus objetivos, este hombre no debe seguir existiendo bajo ningún concepto», según una traducción del hebreo al inglés realizada por The Associated Press.
En una publicación en X, describió a Jamenei como un «cobarde» y «dictador» que, según él, se encuentra actualmente «en las profundidades de un búnker fortificado y dispara contra hospitales y edificios residenciales en Israel», según una traducción al inglés.
«Se trata de crímenes de guerra de la mayor gravedad, y Jamenei rendirá cuentas por sus crímenes», afirmó. «El primer ministro y yo hemos ordenado a las Fuerzas de Defensa de Israel que aumenten la intensidad de los ataques contra objetivos estratégicos en Irán y contra objetivos gubernamentales en Teherán con el fin de eliminar las amenazas al Estado de Israel y socavar el régimen de los ayatolás».
El ataque iraní contra el Centro Médico Soroka en Beersheba el jueves por la mañana se produjo en medio de una guerra aérea entre los dos países. Israel abatió a muchos altos mandos militares iraníes en ataques aéreos y también lanzó ataques aéreos para degradar los programas nucleares y de misiles balísticos del país, alegando que Irán ha estado enriqueciendo uranio para fabricar múltiples armas nucleares.
Al menos 240 personas resultaron heridas por los misiles iraníes, cuatro de ellas de gravedad, según el Ministerio de Salud de Israel. Más de 70 personas que se encontraban dentro del hospital Soroka resultaron heridas, según las autoridades.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, condenó el ataque y prometió una respuesta, diciendo: «Haremos pagar el precio completo a los tiranos de Teherán».
A principios de semana, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, advirtió a Jamenei que los servicios de inteligencia saben dónde se encuentra y que tanto Israel como Estados Unidos podrían matarlo en un ataque aéreo. Trump exigió la «rendición incondicional» de Irán, lo que Irán y Jamenei han rechazado a través de los medios de comunicación estatales y las redes sociales.
Israel llevó a cabo el jueves ataques contra el reactor de agua pesada de Arak, en Irán, en su último ataque contra el extenso programa nuclear del país. Según el ejército, aviones de combate atacaron las instalaciones de Arak y el sello del núcleo del reactor para impedir que se utilizara para producir plutonio.
El reactor no estaba en funcionamiento, no tenía combustible de uranio y no se produjo ninguna fuga nuclear tras el ataque.
«El ataque se dirigió contra el componente destinado a la producción de plutonio, con el fin de impedir que el reactor fuera restaurado y utilizado para el desarrollo de armas nucleares», afirmó el ejército.
Israel afirmó por otra parte haber atacado otro emplazamiento en los alrededores de Natanz que, según describió, estaba relacionado con el programa nuclear iraní.
Desde finales de la semana pasada, Irán lanzó cientos de misiles y drones contra Israel, aunque la mayoría fueron derribados por las defensas aéreas de varios niveles de Israel, que detectan los disparos entrantes y derriban los misiles que se dirigen hacia centros de población e infraestructuras críticas.
En declaraciones a los periodistas el miércoles, Trump afirmó que aún no ha decidido si Estados Unidos podría involucrarse en el conflicto y lanzar un ataque directo contra Irán. También dijo que Irán debería haber empezado a negociar hace semanas.
«Quieren negociar. Yo pregunto: ¿por qué no negociaron hace dos semanas? Podrían haberlo hecho bien. Es muy triste ver esto. Les dije que negociaran y, en el último momento, dijeron que no y recibieron un golpe», declaró Trump a los periodistas.
Sin embargo, subrayó que, en lo que respecta a un acuerdo, «nunca es demasiado tarde» en materia de diplomacia con Irán.
«Incluso sugirieron que vendrían a la Casa Blanca. Eso es valiente y no es fácil para ellos», añadió.
Con información de The Associated Press.
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