El gobernador de Florida, Ron DeSantis, anunció el 14 de agosto que el estado abriría un segundo centro de deportación, llamado "Depósito de deportación", para aumentar aún más la capacidad de Florida de ayudar a la Administración Trump en su campaña para detener, procesar y deportar a los inmigrantes ilegales.
Según dijo, las instalaciones serían algo más pequeñas que las del centro recientemente inaugurado, Alligator Alcatraz.
La Institución Correccional Baker en Sanderson, Florida, una comunidad no incorporada en el condado de Baker, junto a la I-10, a menos de una hora en coche al oeste de Jacksonville, fue seleccionada para albergar el nuevo centro. Al igual que Alligator Alcatraz, será desarrollado por la División de Gestión de Emergencias de Florida con reembolsos posteriores del Departamento de Seguridad Nacional, y será un lugar desde el que los inmigrantes ilegales detenidos serán puestos en vuelos de deportación, dijo DeSantis.
“Ahora, Alligator Alcatraz tiene la pista de aterrizaje justo ahí. Es un servicio integral. No creo que haya nada más conveniente que simplemente transportar a las personas a 2000 pies de distancia, subirlos a un avión y listo”, dijo DeSantis en una conferencia de prensa celebrada fuera de la prisión. "Pero aquí, en la prisión Baker Correctional, estamos muy cerca del aeropuerto de Lake City, y eso es algo bueno, algo que va a marcar la diferencia".
El aeropuerto de Lake City está a solo 15 minutos de la prisión, y se espera que el nuevo centro albergue temporalmente a más de 1300 inmigrantes ilegales detenidos en espera de su deportación.
“Queremos procesar, organizar y luego devolver a los extranjeros ilegales a su país de origen”, dijo el gobernador. “Esa es la regla del juego, y eso es lo que hacemos en Florida. Sabemos que esta es una prioridad nacional importante, no solo del presidente Trump, sino del pueblo estadounidense”.
El gobernador elogió el Centro de Deportación como la última medida tomada por el Estado del Sol para ayudar a los planes de deportación de la administración Trump. Esta medida sigue no solo a la creación de Aligator Alcatraz, sino también a la primera legislación estatal aprobada en el país para garantizar que todos los niveles de las fuerzas del orden estén facultados y obligados a cooperar con el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE).
"Hemos hecho más en este tema que cualquier otro estado por un amplio margen", afirmó el gobernador.
"Somos el único estado del país que exige a todos los organismos estatales y locales encargados de hacer cumplir la ley que participen en las operaciones del ICE. Es un requisito de nuestra legislación estatal".
El gobernador no reveló la fecha exacta de apertura de las nuevas instalaciones, que se producen tras la orden de un juez federal de bloquear cualquier desarrollo adicional en Alligator Alcatraz, aunque permite que continúen las operaciones en curso.
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