La corte más alta del estado de Nueva York concluyó el 18 de febrero, en un fallo dividido, que el panel de ética que ha estado investigando al exgobernador Andrew Cuomo es constitucional.
La Ley de Reforma de la Comisión de Ética de 2022 estableció la Comisión de Ética y Cabildeo en el Gobierno, que posteriormente asumió una investigación sobre si Cuomo abusó de su cargo para beneficio personal en relación con su libro.
Cuomo presentó una demanda argumentando que la ley de ética viola la Constitución de Nueva York, ya que otorga poder a una entidad que ahora actúa sin la supervisión adecuada del gobernador y puede sancionarlo por violaciones legales.
La Corte de Apelaciones del Estado de Nueva York falló el 18 de febrero en contra de Cuomo por un estrecho margen, basándose en tres factores.
"En primer lugar, nuestra doctrina de separación de poderes es flexible y se basa en una visión de sentido común del funcionamiento del gobierno, lo que permite cierta superposición entre los poderes coordinados", escribió la jueza de apelación Jenny Rivera en nombre de la mayoría. "En segundo lugar, el gobernador de Nueva York no tiene poderes exclusivos e ilimitados para nombrar o destituir a funcionarios estatales, porque nuestra Constitución estatal distribuye esos poderes entre la Legislatura y el Gobernador. En tercer lugar, la integridad de nuestro diseño constitucional depende de la confianza del público en el gobierno, y la Ley proporciona un mecanismo adicional de aplicación ética dirigido específicamente a los problemas inherentes a la autorregulación del Poder Ejecutivo".
Rivera calificó la decisión como muy ajustada y describió la ley como algo que "se acerca mucho a la línea de lo constitucionalmente permisible sin cruzarla".
El tribunal superior revocó una decisión de un tribunal inferior que se había puesto del lado de Cuomo, un demócrata.
La comisión asumió una investigación iniciada por un organismo diferente, que los legisladores y la gobernadora Kathy Hochul consideraron inadecuada, sobre si Cuomo utilizó indebidamente su cargo para escribir y promocionar su libro.
El juez de apelaciones Michael García expresó en su disidencia que la ley invadía claramente el poder del ejecutivo.
"La mayoría no reconoce el desarrollo de un poder ejecutivo sólido en Nueva York y malinterpreta las implicaciones de la separación de poderes de un ejecutivo no unitario", afirmó.
La fiscal general de Nueva York, Letitia James, demócrata, elogió el fallo.
"El público merece tener fe en sus funcionarios electos, y eso requiere un organismo de control ético fuerte e independiente. En Nueva York valoramos el estado de derecho, y mi oficina siempre trabajará para garantizar que nuestras leyes sean defendidas, sin importar quién intente eludirlas o ignorarlas", declaró en un comunicado.
Rich Azzopardi, portavoz de Cuomo, comunicó a los medios en un comunicado que Cuomo solicitará la reconsideración de la decisión.
"Este fallo dividido representa un completo revés de la opinión unánime de seis jueces que se sientan en dos niveles de nuestro sistema judicial", dijo Azzopardi. "Pero resulta inquietante que cualquier juez del tribunal más alto de Nueva York apruebe violaciones flagrantes de la constitución cuando estas entran en conflicto con lo que resulta más conveniente para la clase política".
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