Cómo se desarrolló el "robo del siglo" en el Louvre

El audaz robo de joyas de valor incalculable del Louvre de París el 19 de octubre fue calificado como "el robo del siglo" por varios periódicos locales, y los comentaristas rápidamente establecieron paralelismos con otros delitos similares que han acaparado los titulares a lo largo de los años.

Tras el robo a plena luz del día, se han planteado preguntas sobre las medidas de seguridad del museo más visitado del mundo, que atrae a cerca de 9 millones de visitantes al año, junto con especulaciones sobre quién podría estar detrás del delito.

Mientras los investigadores especiales se apresuran a capturar a los implicados, esto es lo que hay que saber sobre cómo se llevó a cabo el robo en cuestión de minutos, qué se robó y por qué los expertos temen que las joyas nunca se recuperen.

Cómo ocurrió

Los ladrones actuaron a las 9.30 de la mañana, hora local, apenas media hora después de que el museo abriera sus puertas al público, según declaró la fiscal de París, Laure Beccuau, a la televisión francesa.

Se detuvieron en una carretera junto al río Sena y subieron por una escalera extensible de la plataforma elevadora para romper una ventana del edificio de la Galerie d'Apollon. Aunque los ladrones no llevaban armas convencionales, amenazaron a los guardias del museo con las amoladoras angulares que utilizaron para cortar la ventana del museo, dijo Beccuau.

Le Monde y otros medios de comunicación franceses informaron de que había cuatro ladrones, dos de los cuales llevaban chalecos amarillos reflectantes para parecer trabajadores de la construcción. Dos iban en el camión y dos en scooters.

La banda intentó sin éxito prender fuego a la grúa mientras huía del lugar del crimen en motocicleta.

El museo fue evacuado cuando sonó la alarma tras el robo, y permaneció cerrado durante todo el lunes.

Agentes de la policía francesa junto a una escalera extensible utilizada por los ladrones para entrar en el museo del Louvre de París el 19 de octubre de 2025. (Dimitar Dilkoff/AFP a través de Getty Images)

¿Qué se robó?

El presidente de la casa de subastas Drouot, Alexandre Giquello, declaró a Reuters que la casa de subastas valoraría la corona en "varias decenas de millones de euros", y añadió que, en su opinión, "no era el objeto más importante" del botín.

(En el sentido de las agujas del reloj desde la parte superior izquierda) Una tiara, un collar y un pendiente del conjunto de joyas de zafiro de la reina María Amelia y la reina Hortensia. Un collar de esmeraldas y un par de pendientes de esmeraldas del conjunto de joyas de la emperatriz María Luisa. Un broche conocido como "broche relicario". Un gran broche con forma de nudo de corpiño de la emperatriz Eugenia. Una tiara de la emperatriz Eugenia. La corona de la esposa de Napoleón III, la emperatriz Eugenia. (Stéphane Maréchalle/Musée du Louvre)

¿Quién podría estar detrás?

Dijo que era probable que el robo hubiera sido encargado por un coleccionista, en cuyo caso existía la posibilidad de recuperar las piezas en buen estado, o que hubiera sido perpetrado por ladrones interesados únicamente en el valor monetario de las joyas y los metales preciosos.

"Estamos barajando la hipótesis del crimen organizado", dijo la fiscal, añadiendo que los culpables podrían ser ladrones que trabajan por cuenta propia para un comprador o que buscan joyas que puedan utilizarse para blanquear el producto del delito.

"Hoy en día, cualquier cosa puede estar relacionada con el tráfico de drogas, dadas las importantes sumas de dinero que se obtienen con [este delito]".

La investigación está siendo dirigida por una unidad policial especializada con un alto índice de éxito en la resolución de robos de gran repercusión, según el ministro del Interior francés, Laurent Nuñez.

Un agente forense francés examina la ventana rota del balcón de la escena del crimen en el Louvre de París el 19 de octubre de 2025. (Kiran Ridley/Getty Images)

¿Por qué no se reforzó la seguridad?

A principios de este año, los responsables del Louvre solicitaron urgentemente financiación al Gobierno francés para restaurar y renovar las antiguas salas de exposición del museo y proteger mejor sus innumerables obras de arte.

Macron dijo el X que un nuevo plan gubernamental para el Louvre anunciado en enero "prevé un refuerzo de la seguridad". A pesar de la promesa del presidente francés de una remodelación de 700 millones de euros, el personal del museo se declaró en huelga en junio por lo que consideraban un peligroso hacinamiento.

La ministra de Cultura, Rachida Dati, dijo el lunes durante una visita al lugar del delito que la cuestión de la seguridad de los museos no es nueva.

"Durante 40 años, se prestó poca atención a la seguridad de estos grandes museos y, hace dos años, el presidente del Louvre solicitó una auditoría de seguridad al prefecto de policía. ¿Por qué? Porque los museos deben adaptarse a las nuevas formas de delincuencia", afirmó. "Hoy en día, se trata de delincuencia organizada, de profesionales".

Visitantes en la Galerie d'Apollon del Louvre de París el 14 de octubre de 2020. El famoso museo parisino ha sido objeto de numerosos robos a lo largo de la historia. (Ludovic Marin/AFP vía Getty Images)

El ministro de Justicia, Gérard Darmanin, afirmó que el delito había dejado a Francia en una situación "deplorable". Los políticos de la oposición criticaron al Gobierno por lo que calificaron de humillación nacional en un momento en que el país ya se encuentra sumido en una profunda crisis política.

Christopher Marinello, fundador de Art Recovery International, una organización especializada en la recuperación de obras de arte robadas, afirmó: "El Louvre es uno de los museos mejor financiados del mundo. Y si ellos pueden ser víctimas de un robo, todos los museos son vulnerables".

Francia revisará la protección de los sitios culturales de todo el país y reforzará la seguridad si es necesario, según informaron las autoridades el lunes.

¿Supera este robo a los anteriores?

En uno de los robos de obras de arte más famosos y atrevidos de la historia, la Mona Lisa fue sustraída del museo en 1911 por un antiguo empleado que conocía la distribución y la seguridad del edificio.

El pintor italiano Vincenzo Peruggia se vistió como un trabajador del museo para entrar en él y se escondió en un armario durante la noche, logrando llevarse la obra maestra de Leonardo da Vinci y salir a escondidas. Guardó la obra de arte en su apartamento de París durante dos años, pero fue capturado y arrestado cuando intentó venderla.

Peruggia solo cumplió siete meses de cárcel después de que el tribunal juzgara que su motivación era ideológica y no económica, ya que creía que la pintura pertenecía por derecho a Italia.

La Mona Lisa devuelta tras su robo en 1911, en el Louvre de París, el 4 de enero de 1914. (Dominio público)

El robo del domingo fue el primero conocido en el Louvre desde 1998, cuando fue sustraída una pintura del paisajista y retratista francés Camille Corot. Esa pintura aún no ha sido recuperada.

El mes pasado, unos delincuentes irrumpieron en el Museo de Historia Natural de París y se llevaron muestras de oro por valor de 700,000 dólares. También en septiembre, unos delincuentes robaron un jarrón y dos platos de un museo de la ciudad central de Limoges, con un valor estimado de 7.6 millones de dólares.

El mayor robo de obras de arte de la historia de Estados Unidos fue el robo de 13 obras del Museo Isabella Stewart Gardner de Boston. Ese crimen sigue sin resolverse después de 35 años.

En la madrugada del 18 de marzo de 1990, dos hombres disfrazados de policías entraron en el museo de Boston tras engañar a los guardias de seguridad, atarlos y llevarse en 81 minutos una serie de cuadros, entre los que se encontraban obras maestras de Manet, Rembrandt, Vermeer y Degas.

Vjeran Tomic, el llamado Spiderman francés, robó cinco obras maestras que nunca se recuperaron del Museo de Arte Moderno en 2010, y se refirió a su delito como "un acto de imaginación" en una entrevista con The New Yorker.

Agentes de policía investigan en el Museo de Arte Moderno de París, donde el 20 de mayo de 2010 fueron robadas cinco obras, entre ellas pinturas de Henri Matisse y Pablo Picasso. Las piezas nunca fueron recuperadas. (Bertrand Guay/AFP a través de Getty Images)

¿Qué pasará con los objetos?

Los expertos han descrito las obras de arte como "completamente invendibles" en su forma actual, lo que significa que pueden ser desmontadas y reconstruidas por completo para que sea menos arriesgado ponerlas en el mercado de joyas y metales.

"Lo ideal sería que los autores se dieran cuenta de la gravedad de su delito y de la dimensión en la que se han metido, y devolvieran los objetos, ya que las joyas son completamente invendibles", afirmó Alexandre Giquello, presidente de la casa de subastas Drouot.

"Es poco probable que estas joyas vuelvan a verse", afirmó Tobias Kormind, director general de 77 Diamonds. "Los equipos profesionales suelen desmontar y volver a tallar las piedras grandes y reconocibles para evadir la detección, borrando así su procedencia".

Se ha especulado con que las criptomonedas podrían haber desempeñado un papel en el delito. El detective privado británico John Eastham afirmó que los investigadores de delitos relacionados con el arte están observando un cambio radical del blanqueo basado en efectivo a la liquidez basada en criptomonedas cuando los bienes robados son difíciles de vender abiertamente.

"Cuando un robo implica un valor extraordinario, en particular en el caso de los objetos patrimoniales, la verdadera pregunta no es solo qué se ha robado, sino cómo se va a monetizar. No se puede entrar en un banco con millones en billetes o diamantes. Las criptomonedas ofrecen rapidez, anonimato y alcance internacional de una forma que el dinero en efectivo ya no puede ofrecer", afirmó Eastham en una declaración enviada por correo electrónico.

"Es muy probable que quien esté detrás del robo del Louvre ya tuviera un plan de salida digital, ya sea fundiendo los componentes y vendiéndolos a través de redes privadas, o utilizando NFT (tokens no fungibles) de alto valor o monedas estables para blanquear los fondos".

El presidente francés, Emmanuel Macron, prometió en una publicación en X recuperar las joyas y llevar a los autores ante la justicia. Macron calificó el robo como "un ataque a un patrimonio que apreciamos porque es nuestra historia".

Con información de Reuters y The Associated Press.