El vacío interior: Por qué los grandes modelos lingüísticos no pueden pensar, y nunca lo harán
Los primeros intentos de inteligencia artificial (IA) fueron ridiculizados por dar respuestas seguras, erróneas y, a menudo, surrealistas, el equivalente intelectual a pedirle a un loro borracho que explique a Kant. Pero los sistemas modernos de IA basados en grandes modelos de lenguaje (LLM) son tan pulidos, elocuentes y extrañamente competentes a la hora de generar respuestas que muchas personas asumen que pueden saber y, lo que es mejor, que pueden razonar de forma independiente para llegar al conocimiento.