El presidente Donald Trump describió el 19 de octubre las principales demandas que tiene para China antes de una posible reunión con el líder del Partido Comunista Chino (PCCh), Xi Jinping, incluyendo las compras de soja y la limitación de las exportaciones de precursores de fentanilo.
Trump viajará a Corea del Sur para la cumbre de la APEC el 29 de octubre. Beijing aún no ha confirmado la asistencia de Xi.
Trump anunció inicialmente la reunión tras una conversación telefónica de dos horas con Xi el 19 de septiembre, pero afirmó que no había motivo para hacerlo después de que el PCCh tomara una medida descomunal y sin precedentes al anunciar una restricción masiva a las exportaciones de tierras raras. La administración Trump respondió con críticas y amenazas de aumento de aranceles y otras medidas, enviando el mensaje de que Beijing había empeorado su posición negociadora con esta medida.
El 19 de octubre, Trump señaló que China quiere reducir sus aranceles, sugiriendo nuevamente que el régimen chino está en una peor posición para negociar.
"Están pagando una cantidad increíble de dinero a Estados Unidos", dijo Trump a los periodistas en el Air Force One. "Probablemente no puedan pagar tanto, y me parece bien; podemos reducirlo, pero también tienen que hacer cosas por nosotros".
Los aranceles que la administración anunció en abril se han pausado para permitir las negociaciones entre los dos países; de lo contrario, China estaría pagando un arancel del 157 por ciento, según Trump.
China está pagando actualmente aranceles del 55 por ciento, que aumentarán al 155 por ciento "a menos que lleguemos a un acuerdo", dijo el presidente en una conferencia de prensa el 20 de octubre.
Trump señaló que se trataba de la suma de múltiples aranceles impuestos por diferentes razones, incluyendo un arancel del 20 % basado en la negativa de Beijing a frenar las exportaciones de precursores de fentanilo. Trump afirmó que cual reducción que busque el régimen chino dependerá de lo que acuerden.
"Quiero ayudar a China… pero ellos también tienen que darnos algo a cambio", dijo Trump el 19 de octubre a borde del Air Force One.
China va a comprar soja. Quiero que China deje de usar fentanilo. No quiero que nos jueguen el juego de las tierras raras.
Trump había amenazado con imponer aranceles adicionales del 100 por ciento a partir del 1 de noviembre (que entrarían en vigor justo después de su viaje a la APEC) y controles de exportación de "software crítico" en respuesta a los controles chinos a las exportaciones de tierras raras.
Trump confió en que China reanudaría las compras de soja.
"De lo contrario, no voy a hacer ningún trato", dijo.
Nuestros agricultores han sido boicoteados por China como punto de negociación. No quiero eso. Nuestros agricultores son excelentes.
China fue el mayor comprador de soja estadounidense, utilizada principalmente para la alimentación del ganado, pero no realizó compras este año. En cambio, recurrió a Brasil y Argentina para cumplir con su cuota, y Trump ha dicho que rescatará a los productores estadounidenses de soja con ingresos arancelarios.
El 19 de agosto, la Asociación Americana de la Soja escribió a Trump para informarle que las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China estaban perjudicando a la industria. Días después, un representante del régimen chino se reunió con representantes de la industria estadounidense de la soja en Washington e instó a los agricultores a presionar para reducir los aranceles a China, pero no se comprometió a realizar compras.
Trump dijo a los periodistas el 19 de octubre que quiere que China compre "al menos" tanta soja como antes del boicot.
La Asociación Americana de la Soja elaboró un informe que mostraba la dependencia de Estados Unidos de China para la compra de soja. Dado que China importa el 60 % de la soja mundial, otros mercados no pueden cubrir esa demanda. El segundo mayor importador de soja estadounidense es la Unión Europea, que compra menos de una quinta parte de lo que China compraría normalmente.
El giro de China hacia Brasil y Argentina se ha gestado durante años. Sus compras de soja estadounidense se desplomaron en 2018 durante la última guerra comercial con la primera administración Trump, y no han vuelo a alcanzar niveles récord.
Mientas tanto, Brasil incrementó drásticamente la producción de soja a partir de 2018, en respuesta al aumento de las compras chinas. El Departamento de Agricultura de Estados Unidos estima que Brasil produjo un 42 % más de soja que Estados Unidos en la campaña comercial 2024-2025. Argentina es actualmente el tercer mayor productor mundial, después de Estados Unidos.
Trump dijo el 20 de octubre que había sido invitado a China y que probablemente visitará el país a principios del próximo año.
"Creo que vamos a tener una muy buena relación con China", dijo. "Creo que vamos a terminar teniendo un acuerdo fantástico con China".
Únase a nuestro canal de Telegram para recibir las últimas noticias al instante haciendo click aquí