Los agentes federales de inmigración del sur de California tienen ahora prohibido hacerse pasar por policías locales o utilizar otras tácticas engañosas para llevar a cabo arrestos domiciliarios, en virtud de un acuerdo judicial aprobado esta semana en una demanda colectiva que impugnaba las prácticas del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE).
Los arrestos de inmigración se han disparado en todo el país. En estados como Colorado, Wyoming y Virginia, las cifras se han multiplicado por cinco. Carolina del Sur, Ohio, Michigan, Nevada… todos reportan aumentos récord. Con nuevas leyes, 100,000 camas de detención, bases militares en la frontera y centros de deportación directa, la administración Trump está cumpliendo su promesa de deportaciones masivas.
El director interino del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) anunció medidas severas contra las empresas que contratan a inmigrantes ilegales y afirmó que los agentes detendrán a cualquier persona que se encuentre en el país de forma ilegal, independientemente de si tiene antecedentes penales.
Los ataques contra agentes del ICE se disparan un 700% mientras avanza la mayor operación de deportación en la historia de Estados Unidos.
Desde el inicio del segundo mandato de Trump, los agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) se han enfrentado a una mayor oposición en las calles. En algunos casos, esta oposición cruzó la línea de la libertad de expresión y ha derivado en violencia física.
El senador John Fetterman (D-Pa.) expresó esta semana su apoyo al Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), calificando de "inapropiadas e indignantes" las demandas para desmantelar la agencia.
El Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) anunció este martes el arresto en Florida de un criminal venezolano, quien además es un integrante del Tren de Aragua.
Agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) arrestaron el martes al candidato a la alcaldía de Nueva York, Brad Lander, "por agredir a las fuerzas del orden y obstaculizar la labor de un agente federal", según un comunicado del Departamento de Seguridad Nacional (DHS).
Las redadas han provocado fuertes protestas en ciudades como Los Ángeles, Chicago y Nueva York, donde miles de personas han salido a las calles.