WASHINGTON—El 6 de junio, expertos y defensores pusieron de relieve la guerra invisible del régimen chino para manipular a Occidente y reprimir a los disidentes más allá de las fronteras de China.
El panel, organizado por The Epoch Times en el Capitolio de los Estados Unidos, se centró en la creciente represión de Beijing a la disidencia en los Estados Unidos, en particular contra el grupo religioso Falun Gong.
Esta práctica espiritual, que incluye ejercicios de meditación y enseña los principios de verdad, benevolencia y tolerancia, ha sido uno de los principales objetivos del régimen comunista chino desde que Beijing lanzara una amplia persecución hace 26 años. Millones de personas han sido encarceladas en prisiones chinas, donde han sufrido trabajos forzados y otras formas de tortura.
Incluso afuera de China, los practicantes de Falun Gong han sufrido presiones y acoso por parte del régimen a lo largo de los años. A finales de 2022 la campaña fue intensificada bajo la dirección del líder chino Xi Jinping, quien ordenó el uso de la desinformación y la persecución judicial para difamar y desacreditar a Falun Gong en Occidente, según informó The Epoch Times en 2024.
"Ataque en todos los frentes"
El régimen comunista está desplegando una guerra informativa y legal para atacar a Falun Gong y a las entidades afiliadas al grupo en los Estados Unidos, dijeron los panelistas.El objetivo, dijeron, es quebrantar la influencia de Falun Gong en la comunidad internacional y sus llamamientos para poner fin a los 26 años de persecución en China.
Yuan Hongbing, un jurista con contactos de alto nivel en el aparato estatal chino, reveló la campaña del régimen chino a The Epoch Times por primera vez en diciembre de 2024.
En su intervención virtual en el panel, Yuan desglosó los esfuerzos del régimen en "un objetivo central y dos directrices".
Yuan dijo que la campaña está enfocada para difamar al fundador de Falun Gong, Li Hongzhi, con el fin de socavar los cimientos del grupo espiritual. Y que el partido utiliza la guerra informativa y jurídica movilizando a los principales medios de comunicación occidentales, difundiendo desinformación y otras tácticas para reducir la influencia de Falun Gong.
El régimen "atacará en todos los frentes", dijo Yuan.
La directora ejecutiva de The Epoch Times, Janice Trey, describió la campaña como una "guerra silenciosa".
Al cooptar el sistema legal occidental, las agencias reguladoras y los medios de comunicación tradicionales de Occidente para remodelar la opinión global, dijo, el Partido Comunista Chino (PCCh) está desafiando directamente los cimientos de una sociedad democrática.
"Esta táctica amenaza la libertad de expresión, la libertad religiosa y la seguridad nacional", dijo Trey.

Tácticas variadas
Una alarma de incendio interrumpió el evento justo cuando el panelista Mark Yang, responsable de defensa del Centro de Información Falun Dafa, una organización sin ánimo de lucro, exponía cómo se estaba desarrollando la campaña del régimen en suelo estadounidense. La Policía del Capitolio de los Estados Unidos informó posteriormente a The Epoch Times que fue "un problema eléctrico que había sido solucionado".Durante el último año, el centro con sede en Nueva York documentó más de 100 casos de amenazas de violencia contra Shen Yun Performing Arts, una compañía fundada en Nueva York por practicantes de Falun Gong para mostrar la antigua cultura china a la vez que llama la atención sobre los abusos infligidos por el régimen a quienes persisten en su fe.
Algunas amenazas han sido dirigidas a los lugares donde se presentan los espectáculos de Shen Yun. Una falsa amenaza de bomba en el Kennedy Center en febrero obligó al recinto a realizar una evacuación horas antes del estreno del espectáculo.
"Esta escalada que estamos viendo ahora mismo es el resultado de una decisión tomada desde arriba", dijo Yang. "Por desgracia, estamos siendo testigos de cómo se están llevando a cabo estas tácticas en estos momentos", agregó.
Y citó a dos agentes chinos que intentaron utilizar el soborno para abrir una investigación del IRS en contra de Shen Yun y varias demandas medioambientales sin fundamento contra la sede de Shen Yun, presentadas por un estadounidense que por años ha tenido relaciones comerciales con China. Mientras tanto, el New York Times publicó una serie de artículos desprestiginado a Shen Yun. Esos artículos fueron amplificados a través de miles de cuentas falsas en las redes sociales occidentales.
Más de 1500 artistas de Shen Yun y sus familiares firmaron una petición para denunciar la descripción de la organización que hacen los artículos, describiéndola como "graves distorsiones y narrativas falsas" contra sus valores, su trabajo y su forma de vida.

Esta manipulación de las instituciones tradicionales de Occidente llamó la atención del panelista Eric Patterson, quien es el presidente de la Fundación en Memoria de las Víctimas del Comunismo.
«Lo sorprendente fue la cantidad de historias con un sesgo negativo hacia este grupo, cuando, que yo sepa, no ha habido una cobertura similar contra algún otro grupo internacional o grupo artístico en Estados Unidos", le dijo Patterson a The Epoch Times.
"Esto sugiere que medios como el New York Times y otros medios de comunicación estadounidenses deben ser extremadamente cuidadosos, y quizá simplemente han sido crédulos al dejarse manipular por el PCCh".
El régimen, en documentos internos filtrados, utiliza un lenguaje hostil para describir a Occidente, y "tenemos que tomárnoslo en serio", dijo Patterson.
"El pueblo chino no es nuestro enemigo, pero los líderes del Partido Comunista y sus numerosos órganos e instituciones dicen que son nuestros enemigos".

"Consideren las implicaciones"
Yang dijo que en el caso de Shen Yun el PCCh "ha demostrado su capacidad para utilizar como arma a los medios de comunicación estadounidenses, engañar a nuestras agencias gubernamentales y aprovecharse de nuestro sistema judicial"."Consideren las implicaciones", escribió en su discurso preparado, que fue interrumpido, "si el PCCh puede atacar eficazmente a un grupo, ¿qué le impide atacar a otras personas o instituciones que no le agradan?".
El compromiso de The Epoch Times para exponer los abusos del régimen comunista lo ha convertido en uno de los principales objetivos de Beijing desde su fundación en Estados Unidos en el año 2000. Poco después, las autoridades chinas arrestaron a decenas de personas en China involucradas en la publicación y condenaron a varias de ellas a penas de hasta 10 años de prisión.
En marzo, el Departamento de Justicia acusó formalmente a los hackers y a dos funcionarios del Ministerio de Seguridad Pública de China responsables de lanzar ciberataques contra The Epoch Times.
Ya sea Falun Gong u otros grupos que el régimen tratado de reprimir, "la razón por la que son el blanco principal es porque ellos defienden algo que el PCCh no puede controlar", dijo Patterson.
"Representan una estructura de autoridad, creencias y valores que están fuera del control del Partido Comunista, y eso es una amenaza".
Sherry Dong contribuyó a este informe.
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