La actriz de "The Walking Dead", Kelley Mack, falleció este fin de semana a los 33 años, informó su familia a través de un comunicado.
"Con profunda tristeza anunciamos el fallecimiento de nuestra querida Kelley. Una luz tan brillante y ferviente ha pasado al más allá, donde todos debemos ir algún día", escribió Kathryn Klebenow este 5 de agosto, dando a conocer el lamentable fallecimiento de su hermana a través de sus redes sociales.
Su hermana dijo que la joven actriz y productora "falleció pacíficamente" el sábado 2 de agosto por la noche, mientras estaba acompañada por su madre Kristen y su tía Karen.
"Kelley ya se ha reunido con muchos de sus seres queridos en forma de mariposas. La extrañaremos profundamente, más de lo que las palabras pueden expresar", agregó.
"Ella querría que todos supieran cuánto los ama", expresó. "Y como su hermana, quiero que todos sepan lo valiente que fue esa dura mujer, especialmente cuando decidió dar el salto para reunirse con Dios. Estoy muy orgullosa de ella".
La famosa actriz dio vida al personaje llamado Addy en 5 episodios en la famosa serie "The Walking Dead" durante 2018–2019. Kelley también participó en 2021 en la película "Transmisiones siniestras" del 2021 interpretando a Alice. Y protagonizó "Mr. Manhattan" (2024), "Delicate Arch" (2024) y "Universal" (2025).
Kelley Mack, cuyo nombre real era Kelley Lynne Klebenow, nació en Cincinnati, Ohio, el 10 de julio de 1992 y falleció el pasado sábado en la misma ciudad, según un comunicado de la familia. Estudió Cinematografía en Dodge College of Film de la Universidad Chapman (2014) en Orange, California.
Mack informó en enero a través de sus redes sociales que antes del día de Acción de Gracias del año pasado le habían diagnosticado un raro tipo de cáncer tras semanas sintiendo malestares.
"En septiembre, me mudé a un nuevo departamento con mi novio, Logan. Durante el mes siguiente, tuve un dolor persistente en la parte baja de la espalda y pensé que se me había salido un disco. Unas semanas más tarde, empecé a sentir un picor neuropático en el cuádriceps derecho", relató la joven actriz en un posteo en Instagram el 3 de enero.
"Luego comenzaron los dolores punzantes en las piernas y la espalda, lo que me obligó a dormir en un sillón reclinable durante un mes porque me dolía mucho estar acostada", agregó. "La víspera de Acción de Gracias, me hicieron una resonancia magnética de urgencia en el hospital, que reveló una masa anómala en la médula espinal".
Mack dijo que finalmente fue diagnosticada con un glioma difuso de la línea media.
El glioma es un tumor en el sistema nervioso central (SNC), es decir, que tiene su origen en el cerebro o la médula espinal, según el Instituto Nacional de Cáncer. Tal tipo de glioma es un subtipo poco común de tumor glial, que se origina en las células gliales, células del cerebro y médula espinal.
Son tumores de grado IV, lo que significa que son cancerosos y de rápido crecimiento.
"Debido a la cirugía de biopsia en la médula espinal, he perdido el uso de la pierna derecha y la mayor parte de la izquierda, por lo que ahora me desplazo con un andador y una silla de ruedas", agregó en ese momento. "Esta experiencia me ha acercado a Dios, y me apoyo en él y confío en su plan para mí", añadió.
Su amiga Chelsea Lloyd, quien abrió una página para Kelley y sus familiares en la plataforma de salud CaringBridge, informó el 30 de julio a través de la plataforma que la actriz estaba recibiendo cuidados paliativos.
Se espera que se celebre un homenaje por su vida el próximo el 16 de agosto en Ohio. La familia también planea conmemorar la vida de Kelley en una fecha posterior en Los Ángeles para sus amigos y colegas que vivan ahí.
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