Desde el inicio de la Operación Víbora del Pacífico, se han incautado más de 68 toneladas (150,000 libras) de cocaína en el océano Pacífico oriental, según un comunicado de la Guardia Costera de los Estados Unidos (USCG) del 9 de diciembre.
La Operación Víbora del Pacífico, que inició a principios de agosto, dirige las fuerzas armadas estadounidenses a la región del Pacífico oriental para combatir a los grupos criminales y los cárteles de drogas, con el fin de eliminar las actividades de tráfico de drogas y personas antes de que arriben a las costas estadounidenses.
Según la Guardia Costera, una dosis de 1.2 gramos de cocaína es suficiente para matar a una persona, y la cantidad total incautada equivale a más de 57 millones de dosis potencialmente letales.
"La Operación Víbora del Pacífico ha demostrado ser un arma crucial en la lucha contra los narcotraficantes extranjeros y los cárteles en América Latina y ha enviado un mensaje claro de que vamos a interrumpir, desmantelar y destruir sus mortíferas actividades comerciales dondequiera que las encontremos", dijo la secretaria del Departamento de Seguridad Nacional, Kristi Noem.
"Con la interrupción del flujo de estas drogas letales, la Guardia Costera ha salvado innumerables vidas estadounidenses y ha cumplido la promesa del presidente Trump de hacer que Estados Unidos vuelva a ser seguro y restablecer nuestro dominio marítimo", añadió.
El océano Pacífico oriental es un importante punto de tránsito de cargamentos de drogas procedentes de América del Sur y Central.
En el marco de la Operación Víbora del Pacífico, la Guardia Costera ha desplegado activos militares adicionales, como equipos tácticos y aeronaves, para interceptar y confiscar los envíos de drogas. Según la USCG, el 80 % de las incautaciones de drogas ilegales con destino a los Estados Unidos se producen en el mar.
En el marco de estas operaciones, se produjo una importante incautación de drogas el 2 de diciembre, cuando el buque Munro de la Guardia Costera confiscó más de 9 toneladas (20,000 libras) de cocaína en una sola redada.
Esta es la "mayor incautación en el mar" que ha realizado la Guardia Costera desde marzo de 2007.
En noviembre, la tripulación del buque James de la Guardia Costera realizó varias incautaciones durante varios días, que dejaron en su poder 9 toneladas (19,819 libras) de cocaína.
Dichas incautaciones de drogas suponen una pérdida de ingresos de más de 1100 millones de dólares para las organizaciones criminales.
"Al interrumpir el flujo de cocaína y otras drogas ilícitas a escala masiva, la Guardia Costera está cortando los ingresos que alimentan la capacidad de los narcoterroristas para producir y traficar fentanilo ilegal, lo que representa una amenaza para las comunidades estadounidenses", declaró la Guardia Costera de EE. UU. (USCG).
La administración Trump también ha realizado ataques militares mortales en el mar contra los narcotraficantes.
Uno de los ataques más recientes se realizó el 4 de diciembre contra un barco presuntamente dedicado al tráfico de drogas en el Pacífico oriental, después de que el secretario de Guerra, Pete Hegseth, ordenara un "ataque cinético letal" contra una embarcación, según el Comando Sur de los Estados Unidos (SOUTHCOM) en una publicación del 4 de diciembre en X.
Un ataque cinético es un ataque desde el espacio, que puede ser a través de un dron elevado o a través de un satélite. En el ataque cinético lo que causa la destrucción no es el proyectil, sino la enorme fuerza con la que se mueve y que se libera en el impacto.
"Los servicios de inteligencia confirmaron que la embarcación transportaba narcóticos ilícitos y transitaba por una ruta conocida de narcotráfico en el Pacífico oriental. Cuatro narcoterroristas varones a bordo de la embarcación resultaron muertos", añadió el SOUTHCOM.
Las operaciones han recibido críticas. El 4 de diciembre, el Congreso realizó reuniones clasificadas donde se debatió sobre un ataque perpetrado en septiembre en el sur del Caribe en el que murieron dos personas.
El representante Jim Himes (D-Conn.) dijo a los periodistas que uno de los vídeo que se mostraron durante la reunión a la que asistió fue "una de las cosas más inquietantes" que había visto durante su carrera en el servicio público.
"Se veía a dos personas en clara situación de peligro, sin ningún medio de transporte, con una embarcación destruida, que fueron asesinadas por Estados Unidos", dijo.
Hegseth, en su intervención en el Foro de Defensa Nacional Reagan en Simi Valley, California el 6 de diciembre, justificó los ataques contra las embarcaciones dedicadas al tráfico de drogas.
"Si trabajan para una organización terrorista designada y traen drogas a este país en un barco, los encontraremos y los hundiremos. Que no haya ninguna duda al respecto", dijo.
"El presidente Trump puede tomar y tomará medidas militares decisivas según lo considere oportuno para defender los intereses de nuestra nación. Que ningún país del mundo lo dude ni por un momento".
Hasta ahora, han muerto más de 80 presuntos traficantes en los ataques.
