Un hombre del condado de Napa fue acusado de asesinato el 22 de julio después de que las autoridades alegaran que conducía en estado de embriaguez cuando su hijo de 10 años murió en un accidente de tráfico en el norte de California.
La fiscal del distrito Allison Haley presentó numerosos cargos adicionales por delitos graves contra Aaron Brian Kennedy, de 35 años, de Angwin, entre ellos homicidio vehicular grave en estado de embriaguez, conducir bajo los efectos del alcohol (DUI) causando lesiones y conducir con un contenido de alcohol en sangre del 0.08 % causando lesiones con una condena previa.
La Patrulla de Carreteras de California (CHP) dijo que Kennedy conducía con su hijo alrededor de las 4:40 p. m. del 18 de julio cuando chocó de frente con un Nissan Sentra de 2013 cerca de Chiles Pope Valley Road y Barnett Road, en Pope Valley, a unos 130 kilómetros al norte de San Francisco, según el sitio web de noticias local KRON.
Las autoridades sospechan que Kennedy estaba bajo los efectos del alcohol en el momento de la colisión, según informó el medio de comunicación.
Kennedy fue trasladado en helicóptero a un hospital cercano tras sufrir heridas graves y fue detenido por sospecha de conducir bajo los efectos del alcohol, según informó la CHP.
El hijo de Kennedy, Aiden, resultó mortalmente herido en la colisión, según informó la oficina del fiscal del distrito. El otro conductor sufrió heridas leves.
Los fiscales de California pueden presentar cargos por homicidio en segundo grado en algunos accidentes mortales relacionados con la conducción bajo los efectos del alcohol, según una sentencia de la Corte Suprema de California de 1983. La sentencia permite presentar cargos por asesinato cuando la muerte de una persona es consecuencia de las acciones de un conductor ebrio en determinadas circunstancias, como cuando el conductor ha sido condenado anteriormente por conducir bajo los efectos del alcohol.
Otros cargos presentados contra Kennedy incluyen maltrato infantil; montaje, mantenimiento o colocación de una trampa explosiva; y un delito menor por conducir sin licencia.
Kennedy también se enfrenta a otras acusaciones graves que, si es declarado culpable, podrían agravar su condena. Tenía dos condenas previas por conducir bajo los efectos del alcohol en el momento del accidente; su hijo era menor de 14 años; el accidente causó lesiones a más de una víctima; hubo una víctima vulnerable y se produjeron actos de violencia, crueldad, saña o insensibilidad; el conductor se encontraba en una posición de confianza; y los delitos revelan un nivel de gravedad cada vez mayor con respecto a delitos anteriores.
Según la oficina del fiscal del distrito, Kennedy se está recuperando de sus lesiones en el hospital. Se encuentra detenido sin fianza.
La audiencia está prevista para el 25 de julio.
The Epoch Times no ha podido contactar con el abogado defensor de Kennedy para recabar sus comentarios.
Según las autoridades, el accidente sigue bajo investigación.
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