El comediante y comentarista político Bill Maher compartió los detalles de una reciente cena privada con el presidente Donald Trump, ofreciendo una visión diferente del presidente a la que Maher suele expresar en su programa.
La cena, que Maher describiódurante el episodio del viernes de su programa semanal «Real Time With Bill Maher», fue organizada por el músico Kid Rock, amigo en común de ambos. Tuvo lugar aproximadamente dos semanas antes en la Casa Blanca y tenía como objetivo, dijo, fomentar el diálogo en lugar de la división.
Maher abrió el segmento desestimando las sugerencias de que la reunión fuera una cumbre política.
«No tengo poder, soy un comediante», dijo, enfatizando que la cena no tenía como objetivo negociar acuerdos, sino explorar puntos en común entre oponentes ideológicos.
«No, no fui a MAGA», dijo Maher a su audiencia, señalando que no hubo presión para hacerlo.
En cambio, dijo que se encontró con una versión del presidente que creía que era diferente de su personalidad pública.
«El tipo que conocí no es la persona que, la noche anterior, tuiteó un montón de cosas desagradables», dijo Maher. «Pero cuando llegué allí, ese tipo no vivía allí».
Antes de la reunión, Trump se dirigió a él en una publicación en las redes sociales, escribiendo: «Recibí una llamada de un tipo muy bueno, y amigo mío, Kid Rock, preguntándome si sería posible que me reuniera, en la Casa Blanca, con Bill Maher, un hombre que criticó injustificadamente cualquier cosa o a cualquier persona relacionada con TRUMP. Realmente no me gustó mucho la idea, y no me gusta mucho ahora pero pensé que sería interesante».
Añadió que Maher probablemente seguiría criticándolo públicamente, independientemente de lo que ocurriera en privado.
«Sin embargo, ¿quién sabe? ¿Quizás se demuestre que me equivoco? En cualquier caso, le estoy haciendo un favor a un amigo», escribió.
Maher sacó a relucir esa publicación en su diálogo, diciendo que le dijo al presidente que él se equivocó cuando dijo la noche anterior a la cena que criticó todo lo que el presidente hizo.
«No es cierto, revisen las grabaciones», dijo.
«¿Trasladar la embajada de Israel a Jerusalén? Me encantó. La frontera sí que necesitaba controlarse. Me alegro de que la policía esté recuperando la moral. El DEI (Departamento de Defensa) fue demasiado lejos. Los hombres biológicos no deberían practicar deportes femeninos. Europa debería pagar su defensa. Y, por supuesto, tiene sentido que los países árabes acojan a refugiados árabes, como el millón de sirios que acabaron en Alemania, cuando Arabia Saudí no acogió a ninguno».
Durante la cena, Maher dijo que la conversación versó desde asuntos políticos como el programa nuclear de Irán hasta la situación en Gaza. Maher dijo que el presidente fue sincero en sus preguntas y no se puso a la defensiva cuando fue desafiado.
Maher dijo que hubo muchos momentos en los que bromeó o contradijo al presidente, pero que él «lo tomó» y «no se enfadó ni me llamó lunático de izquierda».
Un momento destacado se produjo cuando Trump hizo referencia a una disputa legal pasada que involucraba a Maher, en la que el comediante dijo en broma que el padre del presidente era un orangután. Maher dijo que usó la broma para contrarrestar las afirmaciones de Trump sobre que el presidente Barack Obama no nació en Estados Unidos. Según se informa, el presidente respondió con una sonrisa.
Maher dijo que sus opiniones no cambiaron.
«Seré crítico con muchas de las cosas que está haciendo», dijo. «Pero también creo que ahora entiende que tengo un trabajo que hacer».
La conversación, según Maher, fue sincera e incluso divertida. En un momento dado, el presidente bromeó sobre el pelo del presidente Ronald Reagan diciendo que era su mejor cualidad, según Maher. Maher respondió que Reagan también ayudó a derrotar al comunismo.
«En la Casa Blanca no vive un loco», dijo Maher. «Allí vive una persona que interpreta mucho a un loco en la televisión».

Kid Rock retuiteó más tarde un comentario sobre la reunión que decía: «¡La comunicación es la clave para salvar a esta nación dividida!».
Trump no hizo ningún comentario público sobre la cena, desde que tuvo lugar.
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