La tasa de tabaquismo entre los adultos ha disminuido en las últimas seis décadas, pero solo una minoría de fumadores se somete a pruebas de detección de cáncer de pulmón, según dijo la Sociedad Americana contra el Cáncer (ACS) en un comunicado el 3 de noviembre.
"El tabaquismo entre los adultos estadounidenses se redujo del 42 % en 1965 al 11 % en 2023. Los investigadores también descubrieron que solo el 18.1 % de los adultos elegibles que fuman actualmente o han fumado anteriormente se sometieron a pruebas de detección de cáncer de pulmón en 2022, a pesar de que el tabaquismo es uno de los principales factores de riesgo de cáncer de pulmón", dice el comunicado.
"Las tasas de detección son más bajas en los estados del sur de EE. UU., donde la incidencia del cáncer de pulmón y los problemas de acceso a la atención sanitaria son mayores".
Más del 80 % de las muertes por cáncer de pulmón en el país se atribuyen al tabaco, según la ACS.
Las cifras forman parte del informe "Atlas del tabaco en EE. UU.", publicado por la ACS el lunes, que ofrece datos completos sobre el consumo de tabaco en todo Estados Unidos.
Según el informe, el 29 % de todas las muertes por cáncer en el país se atribuyen al consumo de cigarrillos. En 2019, se estima que se perdieron 2.2 millones de años de vida debido al cáncer relacionado con el tabaquismo entre los adultos de 25 a 79 años.
En 2020, el consumo de cigarrillos le costó a la economía estadounidense 436 700 millones de dólares, lo que supone aproximadamente el 2.1 % del PIB del país.
Aunque la exposición al humo de segunda mano ha disminuido, sigue siendo elevada en los espacios públicos y las viviendas de alquiler, según la ACS, que añade que las personas mayores y los niños son especialmente vulnerables a dicha exposición.
"El Atlas del Tabaco de EE. UU. es una poderosa herramienta que muestra no solo el impacto que el tabaco ha tenido en EE. UU., sino también los inmensos avances que se han logrado en materia de salud pública en las últimas décadas", dijo la Dra. Nigar Nargis, directora científica sénior de investigación sobre control del tabaco de la ACS.
"Desde el histórico informe del Cirujano General de los Estados Unidos sobre el tabaco de 1964, se han salvado millones de vidas gracias al control del tabaco, pero la magnitud de la epidemia exige nuestra atención y apoyo continuos".
El informe de 1964 consideraba que fumar cigarrillos era el responsable de un aumento del 70 % en la tasa de mortalidad de los fumadores en comparación con los no fumadores.
Según el informe del Cirujano General de 2024, la industria tabacalera ha diseñado y comercializado productos como los cigarrillos mentolados con el objetivo de ofrecer experiencias multisensoriales de sabor, lo que aumenta la probabilidad de adicción.
Se sugirió que la implementación de políticas que restrinjan la disponibilidad de cigarrillos mentolados podría reducir el inicio y la prevalencia del tabaquismo entre los adultos jóvenes y los adolescentes.
Mientras tanto, el Atlas del Tabaco de EE. UU. de la ACS destacó el problema del uso de cigarrillos electrónicos entre los jóvenes estadounidenses.
En 2024, se estima que 1.63 millones de jóvenes declararon consumir cigarrillos electrónicos, y el 90 % se decantaba por las variantes aromatizadas, según el informe.
"El consumo de cigarrillos electrónicos entre los jóvenes sigue siendo elevado a pesar de los descensos", dijo la ACS.
Según el informe, el consumo de tabaco entre los jóvenes aumentó rápidamente en 2018-2019, pero luego descendió rápidamente después de que la Administración de Alimentos y Medicamentos adoptara la ley T21.
La ley, firmada por el presidente Donald Trump en diciembre de 2019, aumentó la edad mínima federal para la venta de productos de tabaco de 18 a 21 años. Por lo tanto, se convirtió en ilegal que las empresas vendieran cualquier producto de tabaco, incluidos los cigarrillos electrónicos, a personas menores de 21 años.
El 1 de septiembre, la Comisión Make America Healthy Again, creada por Trump, pidió a la FDA que reforzara la aplicación de la ley sobre los productos de vapeo ilegales.
Más tarde ese mismo mes, el Departamento de Salud y Servicios Humanos lanzó su Guía de recursos sobre el vapeo juvenil para ayudar a los jóvenes a combatir la epidemia del vapeo entre los jóvenes.
"A pesar de la reciente disminución en su uso, los cigarrillos electrónicos siguen siendo el producto de tabaco más consumido entre los estudiantes de secundaria y bachillerato", dice la agencia.
"Hasta el 85 % de los dispositivos y cápsulas de cigarrillos electrónicos que se venden en los puntos de venta minoristas de EE. UU. son productos ilegales. Las fuerzas del orden federales han incautado millones de dispositivos no autorizados, pero las ventas ilegales persisten, lo que supone una amenaza para la salud de los jóvenes de todo el país".
