Las fuerzas rusas atacaron múltiples objetivos en toda Ucrania el 7 de septiembre, matando al menos a cuatro personas e incendiando un edificio gubernamental en Kiev, según informaron funcionarios ucranianos.
Según el presidente ucraniano Volodímir Zelenski, drones y misiles rusos atacaron múltiples objetivos en las regiones de Sumy y Chernihiv, y en las ciudades de Odesa, Kryvyi Rih y Zaporizhzhia.
"Estos asesinatos, ahora que la diplomacia real podría haber comenzado hace mucho tiempo, son un crimen deliberado y una prolongación de la guerra", escribió Zelenski en X, pidiendo a los aliados occidentales de Kiev que ayuden a reforzar las capacidades de defensa aérea de su país.
Keith Kellogg, enviado de Washington a Ucrania, dijo que el amplio ataque ruso parecía ser una escalada del conflicto que dura ya varios años.
"El ataque no fue una señal de que Rusia quiera poner fin a esta guerra por la vía diplomática", escribió Kellogg en X.
Yulia Svyrydenko, primera ministra de Ucrania, dijo que era la primera vez que un importante edificio gubernamental de Kiev era objeto de un ataque desde que Rusia lanzara su invasión inicial del este de Ucrania a principios de 2022.
Según la fuerza aérea ucraniana, el amplio ataque aéreo involucró 13 misiles y más de 800 drones, lo que lo convierte en el mayor bombardeo ruso con drones desde que comenzó el conflicto hace más de tres años.
Las defensas aéreas ucranianas derribaron con éxito cuatro misiles y aproximadamente 750 drones, según informó la fuerza aérea.
Timur Tkachenko, jefe de la administración militar de Kiev, dijo que dos personas murieron, entre ellas un niño pequeño, en el distrito de Darnytskyi de la capital, situado al este del río Dniéper.
En el distrito occidental de Sviatoshynskyi, en Kiev, un edificio de apartamentos de nueve pisos sufrió daños importantes, mientras que los restos de los drones que cayeron incendiaron otros tres edificios en otras partes de la ciudad, según informaron las autoridades locales.
El Ministerio del Interior de Ucrania afirmó que el ataque ruso, que duró varias horas, había dejado más de 20 heridos en toda la capital.
El Ministerio de Defensa ruso confirmó posteriormente que sus fuerzas habían llevado a cabo un "ataque masivo" con "armas de precisión" y drones contra lo que, según afirmó, eran instalaciones militares e industriales ucranianas.
En una declaración difundida por la agencia de noticias rusa TASS, se enumeraban los objetivos designados del ataque como "instalaciones ucranianas de producción, montaje, reparación, almacenamiento y lanzamiento de drones".
El Ministerio también afirmó que sus fuerzas habían atacado "bases aéreas en el centro, el sur y el este de Ucrania, incluidas las instalaciones industriales Kyiv-67 en el suburbio occidental de Kiev y la base logística STS-Group en el suburbio sur de Kiev".
"Todas las instalaciones designadas fueron destruidas", afirmó, y añadió que "ninguna otra instalación de Kiev fue atacada".

Infraestructuras en el punto de mira
En las últimas semanas, Rusia intensificó sus ataques contra infraestructuras ucranianas, normalmente utilizando misiles y drones.Kiev respondió con ataques casi diarios con drones contra objetivos en el oeste de Rusia, especialmente instalaciones energéticas, y en cuatro regiones —entre ellas Zaporizhzhia— que Moscú afirma haber anexionado a finales de 2022.
Ambas partes afirman que están utilizando armas de precisión contra objetivos exclusivamente militares con el fin de evitar víctimas civiles.
El 8 de septiembre, las autoridades instaladas por Rusia en Zaporizhzhia afirmaron que las fuerzas ucranianas habían llevado a cabo un ataque con drones a gran escala contra la central nuclear de Energodar, en la región, que las fuerzas rusas tomaron poco después de la invasión de 2022.
"Hoy, el enemigo ha lanzado numerosos UAV [vehículos aéreos no tripulados] contra Energodar", afirmó Maxim Pukhov, alcalde de la zona instalado por Moscú, en declaraciones citadas por TASS.
"El ataque continúa. No es seguro permanecer en espacios abiertos".
Un día antes, Kiev afirmó que su ejército había atacado un oleoducto clave en la región occidental rusa de Briansk, causando daños "generalizados".
The Epoch Times no ha podido verificar de forma independiente las afirmaciones de ninguna de las partes del conflicto.
Con información de Reuters.
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