Naveed Akram, de 24 años, presuntamente implicado en el atentado terrorista del 14 de diciembre contra una multitud judía, ha sido acusado formalmente por la policía tras salir del coma.
Naveed, junto con su padre de 50 años, Sajid Akram, fueron los responsables de uno de los peores atentados contra la comunidad judía desde el 7 de octubre de 2023 y del peor tiroteo masivo en Australia desde la masacre de Port Arthur en 1996.
El padre, Akram, murió en el lugar de los hechos, pero Naveed fue disparado por la policía y trasladado al hospital, donde permaneció en coma hasta el 17 de diciembre.
Akram ha sido acusado de 59 delitos, entre ellos cometer un acto terrorista, 15 cargos de asesinato, 40 cargos de causar lesiones o daños físicos graves con intención de matar, disparar un arma de fuego con la intención de causar daños físicos graves, exhibir públicamente un símbolo de una organización terrorista prohibida y colocar explosivos en un edificio o cerca de él con la intención de causar daños.
La policía alegará ante la corte que el hombre participó en conductas que causaron la muerte, lesiones graves y pusieron en peligro la vida de otras personas con el fin de promover una causa religiosa y sembrar el miedo en la comunidad.
El tiroteo masivo dirigido contra la celebración judía de Janucá se cobró la vida de 15 personas, de entre 10 y 87 años, y dejó muchos más heridos.
Según la policía, algunos de los fallecidos aún no han sido identificados oficialmente.
La policía dice que varios oficiales intercambiaron disparos con el hombre armado y que, como parte del incidente, un agente y un agente en prácticas también sufrieron heridas de bala.
Uno de los oficiales se encuentra en estado estable, mientras que el otro está en estado crítico pero estable.
Actualmente hay 20 pacientes que siguen recibiendo atención en varios hospitales de Sídney.
El comisario de policía de Nueva Gales del Sur (NSW), Mal Lanyon, declaró el suceso como incidente terrorista pocas horas después, y la investigación se remitió al Equipo Conjunto Antiterrorista de NSW (JCCT) en el marco de la Operación Arques.
Él permanece en el hospital bajo vigilancia policial para comparecer ante la Corte Local de Fianzas 7 a través de AVL el 17 de diciembre.
Cualquier persona que tenga información sobre actividades extremistas o posibles amenazas para la comunidad debe comunicarla, por muy insignificante que le parezca.
El número de la línea directa de seguridad nacional es el 1800 123 400.
















