La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) advirtió en un nuevo informe que el crecimiento económico mundial se está debilitando, citando el aumento de las barreras comerciales y la mayor incertidumbre política.
El informe de la OCDE del 3 de junio recorta drásticamente sus previsiones para 2025.
«La economía mundial pasó de un periodo de crecimiento resistente y descenso de la inflación a una senda más incierta», afirmó en un comunicado el secretario general de la OCDE, Mathias Cormann. «Nuestras últimas perspectivas económicas muestran que la incertidumbre política actual está debilitando el comercio y la inversión, disminuyendo la confianza de los consumidores y las empresas y frenando las perspectivas de crecimiento».
La organización intergubernamental con sede en París, integrada por 38 países miembros, en su mayoría con economías de altos ingresos, prevé que el PIB mundial crecerá solo un 2.9 por ciento en 2025 y 2026, frente al 3.3 por ciento del año pasado.
El grupo prevé que la desaceleración sea más pronunciada en Estados Unidos, donde se prevé que el crecimiento caiga al 1.6 por ciento en 2025, casi la mitad del ritmo del año pasado.
El informe atribuye gran parte de la recesión prevista a la escalada de las tensiones comerciales, en particular a los recientes aranceles estadounidenses que elevaron las tasas efectivas sobre las importaciones a su nivel más alto desde 1938. La OCDE estima que estos aumentos, junto con las medidas de represalia de China y otros países, tienen ahora un impacto en el comercio equivalente a más del 2 por ciento del PIB mundial.
«Los gobiernos deben colaborar entre sí para abordar de forma positiva y constructiva cualquier problema del sistema comercial mundial a través del diálogo, manteniendo los mercados abiertos y preservando los beneficios económicos del comercio mundial basado en normas para la competencia, la innovación, la productividad, la eficiencia y, en última instancia, el crecimiento», añadió Cormann.
Respuesta de la Administración Trump
La Casa Blanca respondió al informe en una declaración enviada por correo electrónico a The Epoch Times, calificándolo de otro ejemplo de «una lista cada vez mayor de pronósticos apocalípticos que no se ajustan a la realidad».«Los datos son claros: la inversión en equipamiento empresarial real aumentó casi un 25 por ciento en el primer trimestre de 2025; la renta personal disponible real creció un sólido 0.7 por ciento intermensual en abril; y la Reserva Federal de Atlanta estima ahora que el crecimiento del PIB en el segundo trimestre se acelerará hasta el 4.6 por ciento», afirmó el portavoz de la Casa Blanca, Kush Desai, en el comunicado.
«El crecimiento mundial no tiene por qué depender de que otros países se aprovechen de Estados Unidos con políticas comerciales desleales que socavan las industrias y a los trabajadores estadounidenses».
El presidente Donald Trump también defendió su política comercial en un par de publicaciones recientes en su cuenta de Truth Social.
El 2 de junio, escribió: «Si se permite a otros países utilizar aranceles contra nosotros y no se nos permite contrarrestarlos de forma rápida y ágil con aranceles contra ellos, nuestro país no tiene ni la más mínima posibilidad de sobrevivir económicamente».
En otra publicación el martes por la mañana, añadió: «¡Gracias a los aranceles, nuestra economía está en AUGE!».
El informe de la OCDE señala que Estados Unidos aumentó el arancel efectivo medio sobre los productos importados del 2 por ciento en 2024 al 15.4 por ciento a mediados de mayo. China respondió con un aumento de 10 puntos sobre las importaciones estadounidenses. Los nuevos gravámenes también se aplican a productos de Canadá, México y otros socios comerciales, lo que, según el informe, añade complejidad y costos a las cadenas de suministro mundiales.
El informe sostiene que los aranceles elevaron los precios para los consumidores y los insumos para las empresas. La organización advirtió que la inflación podría aumentar aún más en los países que imponen aranceles y que ahora se prevé que se retrasará el cumplimiento de los objetivos de los bancos centrales.
Para los países del G-20, se prevé que la inflación general disminuya del 6.2 por ciento del año pasado al 3.6 por ciento en 2025 y al 3.2 por ciento en 2026. Según las estimaciones de la OCDE, se espera que Estados Unidos se desmarque de esta tendencia, con una inflación anual que aumentará hasta situarse justo por debajo del 4 por ciento el próximo año y se mantendrá por encima del objetivo en 2026.
Más allá del comercio, la OCDE citó el aumento de la deuda pública, el endurecimiento de las condiciones financieras y la inestabilidad geopolítica como riesgos adicionales. Según el informe, los gobiernos deben restablecer la disciplina fiscal, dejando margen para futuras crisis.
El informe insta a los responsables políticos a eliminar las nuevas barreras comerciales y a profundizar la cooperación internacional para reactivar el crecimiento. También exhorta a los países a impulsar la inversión, en particular en vivienda e infraestructura digital, y a proseguir las reformas estructurales destinadas a mejorar la productividad.
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