El músico de country Pat Green está de luto por la pérdida de su hermano menor y su cuñada, John y Julia, y dos de sus hijos, tras perder la vida en las graves inundaciones repentinas que azotaron el centro de Texas durante el fin de semana del 4 de julio.
La esposa del cantante de "Carry On", con quien llevaba 25 años casado, Kori, compartió la devastadora noticia en una publicación de Instagram el lunes, en la que escribió que la pareja está "desolada y esperando ansiosamente" que encuentren a sus familiares.
"Estamos muy agradecidos por el torrente de amor y preocupación", escribió. "Gracias por sus oraciones".
Green, que nació en San Antonio, también publicó un comunicado en Internet en el que agradecía a sus fans su cariño, sus oraciones y su compasión.
"Mi familia, como tantas otras, ha sufrido una pérdida desgarradora y profundamente personal", dijo el artista de 53 años en su publicación.
"Estamos de luto junto a innumerables tejanos cuyas vidas han quedado devastadas por esta tragedia. En estos momentos, pedimos respetuosamente privacidad y espacio para llorar nuestra pérdida, apoyarnos mutuamente y comenzar a procesar lo que le depara el futuro a nuestra familia".
Una bandera estadounidense ondea sobre la cinta de precaución en las orillas del río Guadalupe, en Kerrville, Texas, el 6 de julio de 2025. (Brandon Bell/Getty Images).Más de 100 personas fallecieron en varios condados de la región de Texas Hill Country tras las fuertes lluvias que provocaron la crecida del río Guadalupe en la madrugada del 4 de julio.
El hermano de Green y su familia vivían en Kerrville, una ciudad del condado de Kerr, que fue la más afectada por las inundaciones.
En una rueda de prensa celebrada el martes, las autoridades del condado de Kerr confirmaron que se habían recuperado 87 cadáveres, 56 adultos y 30 niños, en la zona.
Se espera que el número de víctimas mortales aumente a medida que continúan las operaciones de búsqueda y rescate.
La Agencia de Gestión de Emergencias de Tennessee, en coordinación con el Departamento de Bomberos de Memphis, anunció que desplegó un equipo de búsqueda canina en el condado de Kerr para ayudar en las labores de recuperación.
"Este es un momento en el que, como estado, necesitamos a Dios más que nunca", compartió el gobernador de Texas, Greg Abbott, en un comunicado.
"Lo que más escucho son las oraciones que se están enviando por aquellos que se encuentran en peligro".
Abbott señaló que se estaba llevando a cabo una "colaboración extraordinaria" para hacer frente a las consecuencias de las catastróficas inundaciones.
"Como parte de ello, voy a firmar una declaración de desastre para garantizar que los condados tengan acceso a todas las herramientas, estrategias y personal que el estado de Texas pueda proporcionarles, que serán ilimitados", escribió.
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