El 18 de mayo, una semana después de la tregua arancelaria de 90 días entre Estados Unidos y China, el régimen chino anunció derechos antidumping sobre un tipo de plástico de ingeniería, conocido como copolímero POM, procedente de Estados Unidos, la Unión Europea, Japón y Taiwán.
El Ministerio de Comercio de China afirmó que dichas entidades estaban vertiendo plástico, lo que causó un daño sustancial a la industria de copolímeros POM de China continental.
Los aranceles incluyen el 74.9 por ciento para las importaciones estadounidenses, el 34.5 por ciento para las importaciones de la Unión Europea, el 35.5 por ciento para las importaciones japonesas (con Asahi Kasei Corp con el 24.5 por ciento) y el 32.6 por ciento para las importaciones taiwanesas (con Formosa Plastics con el 4 por ciento y Polyplastics Taiwan con el 3.8 por ciento).
El régimen chino dijo que su investigación comenzó en mayo de 2024, luego de que la administración Biden impusiera aranceles a los vehículos eléctricos, baterías avanzadas, acero y otros productos chinos.
Días antes de la toma de posesión del presidente Donald Trump, el régimen chino impuso aranceles al plástico industrial importado.
En enero, el Ministerio de Comercio confirmó las actividades de dumping e introdujo medidas antidumping preliminares.
La competencia continúa tras la tregua comercial
Después de las conversaciones del 10 al 11 de mayo en Suiza, Estados Unidos y China acordaron una tregua comercial de 90 días, reduciendo los aranceles estadounidenses sobre los productos chinos del 145 por ciento al 30 por ciento y los aranceles de represalia chinos sobre los productos estadounidenses del 125 por ciento al 10 por ciento, facilitando las negociaciones para un acuerdo comercial más amplio.Los legisladores advierten que dicho acceso podría permitir el despliegue de armas contra Estados Unidos, reforzar las capacidades de vigilancia de China y socavar el dominio estadounidense en inteligencia artificial y otros sectores tecnológicos.
Dos días antes, el departamento alertó al público de no utilizar chips de IA fabricados en Estados Unidos para entrenar modelos de IA chinos o formar parte de transacciones destinadas a evadir los controles de exportación.
También la semana pasada, el líder chino Xi Jinping organizó una cumbre en Beijing con líderes de América Latina y el Caribe, durante la cual Colombia se unió a su Iniciativa de la Franja y la Ruta.
Colombia, un aliado tradicional de Estados Unidos, tomó esta decisión simbólicamente significativa un día después de la tregua comercial entre Estados Unidos y China.
Lanzada en 2013, China ha ampliado su presencia en América Latina a través de la Iniciativa de la Franja y la Ruta, en la que participan 21 países, incluidos Brasil, Chile y Perú, lo que refleja el esfuerzo estratégico de China para contrarrestar el dominio occidental, en particular el de Estados Unidos.
De NTD News
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