WASHINGTON— La Casa Blanca calificó de "desafortunado" el ataque perpetrado por Israel el 9 de septiembre en Doha, capital de Catar, contra líderes de Hamás, afirmando que no contribuían a los objetivos ni de Israel ni de Estados Unidos.
En una rueda de prensa, la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, afirmó que el presidente Donald Trump había hablado con el emir de Catar, jeque Tamim bin Hamad Al-Thani, y con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, tras el ataque.
"Esta mañana, el Ejército de Estados Unidos notificó a la Administración Trump que, dado que Israel estaba atacando a Hamás, que lamentablemente se encontraba en una zona de Doha, la capital de Catar, bombardeando unilateralmente dentro de Catar, una nación soberana y aliada cercana de Estados Unidos que está trabajando muy duro y asumiendo valientemente riesgos con nosotros para negociar la paz, no contribuye a los objetivos de Israel ni de Estados Unidos".
"Sin embargo, eliminar a Hamás, que se ha beneficiado del sufrimiento de los habitantes de Gaza, es un objetivo loable", añadió.
Leavitt señaló que Trump "ordenó inmediatamente" al enviado especial estadounidense Steve Witkoff que informara a los cataríes antes del ataque.
Leavitt añadió que el presidente "se siente muy mal por la ubicación de este ataque", dado que Catar es un aliado cercano y amigo de Estados Unidos.
"Las FDI y la ISA [Agencia de Seguridad de Israel] llevaron a cabo un ataque preciso contra los altos mandos de la organización terrorista Hamás", dijeron las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) en un comunicado en X, sin confirmar la ubicación.
La oficina de Netanyahu emitió un comunicado sobre el ataque a través de su cuenta de X personal, diciendo: "La acción de hoy contra los principales jefes terroristas de Hamás fue una operación israelí totalmente independiente. Israel la inició, Israel la llevó a cabo e Israel asume toda la responsabilidad".
Catar , junto con Egipto, ha estado mediando entre Hamás e Israel como parte de los esfuerzos para poner fin a la guerra en Gaza.
Durante su llamada con el emir de Catar , Trump les aseguró "que algo así no volverá a suceder en su territorio".
"El presidente Trump quiere que se libere a todos los rehenes en Gaza y se devuelvan los cuerpos de los fallecidos, y que esta guerra termine ahora", dijo Leavitt. "El presidente Trump cree que este desafortunado incidente podría servir como una oportunidad para la paz".
La embajada de Estados Unidos en Doha emitió una orden de permanecer en el lugar para todas sus instalaciones y ha instado a los ciudadanos estadounidenses en el país a hacer lo mismo, así como a seguir su cuenta de X para obtener información actualizada.
Las Fuerzas de Defensa de Israel afirmaron que se tomaron medidas antes del ataque para "mitigar los daños a la población civil".
El ataque a la capital qatarí se produce un día después de que seis personas murieran y al menos otra docena resultaran heridas en un ataque con armas de fuego en Jerusalén.
Con información de Guy Birchall
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