La gobernadora de Michigan Gretchen Whitmer ofreció apoyo parcial a los aranceles el 9 de abril. Más tarde se reunió con el presidente Donald Trump y se ganó los elogios del comandante en jefe.
“Entiendo la motivación detrás de los aranceles, y aquí es donde el presidente Trump y yo estamos de acuerdo: necesitamos fabricar más cosas en Estados Unidos", dijo Whitmer a una multitud en Washington.
Más tarde describió los aranceles como "una herramienta contundente", pero también dijo que Estados Unidos debería "imponer aranceles a la tecnología que realmente queremos fabricar en Estados Unidos o en industrias en las que ya tenemos una ventaja competitiva considerable".
También dijo que los aranceles están perjudicando a Michigan, en particular a sus empresas automovilísticas.
Trump impuso aranceles recíprocos contra muchos países. El miércoles, dijo que iba a hacer una pausa de 90 días en los aranceles recíprocos que entraron en vigor ese mismo día, pero que iba a aumentar los aranceles para China. Otros aranceles siguen vigentes.
El presidente dice que los aranceles sirven para traer de vuelta los negocios y conservarlos en Estados Unidos.
Después del discurso, Whitmer viajó a la Casa Blanca, donde estuvo en el Despacho Oval tras una reunión con Trump mientras él firmaba órdenes ejecutivas, incluidas dos que iniciaron investigaciones sobre exfuncionarios del gobierno.
"Nos sentimos honrados de tener a Gretchen Whitmer de Michigan, el gran estado de Michigan, y ella ha estado, realmente ha hecho un excelente trabajo, es una muy buena persona", dijo Trump.
Un portavoz de Whitmer declaró a los medios en una declaración que la gobernadora se sorprendió de que la “llevaran a la Oficina Oval” para las firmas, durante las cuales el presidente hizo comentarios. “Su presencia no es una aprobación de las acciones tomadas ni de las declaraciones hechas en ese evento,” dijo el portavoz.
Trump y Whitmer se criticaron frecuentemente durante el primer mandato del presidente.
Trump dijo a los periodistas que él y Whitmer hablaron sobre la carpa asiática y cómo esta especie invasora ha afectado a los Grandes Lagos, así como sobre mantener la Base de la Guardia Nacional Aérea de Selfridge "próspera". El presidente de la Cámara de Representantes del Estado, Matt Hall, republicano, también estuvo presente.
El acercamiento a Whitmer, una potencial aspirante presidencial del 2028 que por límites de mandato no puede servir un tercer período como gobernadora, contrasta con el de otros gobernadores del Partido Demócrata, quienes se negaron en gran medida a relacionarse con Trump salvo mediante demandas que cuestionaron las políticas de su administración.
"Si no estás en la mesa, estás en el menú", dijo Whitmer a Gretchen Carlson, expresentadora de Fox News, en una charla posterior al discurso. "Mi juramento al pueblo de Michigan es seguir apareciendo, incluso cuando eso signifique que me van a dar una paliza".
Refiriéndose a la descripción que hizo Whitmer de los aranceles como "el martillo arancelario", el gobernador de Colorado, Jared Polis, demócrata, escribió en la plataforma de redes sociales X después del discurso que el martillo "termina golpeando tu propia mano en lugar del clavo".
Añadió: "Los aranceles son malos en extremo porque provocan precios más altos y destruyen la manufactura estadounidense. El comercio es inherentemente bueno porque ambas partes salen mejor de una transacción consensuada”.
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