Wendy Thomas sabía que la mayor redada policial de la historia de Minnesota se centraba en su vecino, Vance Luther Boelter, sospechoso de un crimen que conmocionó a Minnesota y a todo el país.
«Creí que se había ido hacía mucho», dijo Thomas mientras la policía buscaba a Boelter, el hombre acusado de emboscar a dos legisladores estatales en sus casas de las afueras de Minneapolis.
La representante estatal Melissa Hortman y su marido, Mark, murieron por disparos. El senador estatal John Hoffman y su esposa, Yvette, sobrevivieron a múltiples heridas de bala en la madrugada del 14 de junio.
Una pista de Thomas llevó a la policía hasta Boelter, cerca de su casa, aunque ella dudó de sus propios ojos en la tenue luz del atardecer del 15 de junio.
Thomas, de 43 años, proporcionó a The Epoch Times una descripción detallada de los acontecimientos que se desarrollaron antes de la detención de Boelter en la noche del 15 de junio.
Ella y otras personas también proporcionaron más información sobre el sospechoso y sus posibles motivos, al igual que las declaraciones de la policía, los registros públicos y los vídeos en los que aparecen las propias palabras de Boelter.
Antes de avisar a la policía, Thomas estaba en su camioneta cerca de su casa. Vio a una persona vestida con ropa oscura arrastrándose por la hierba alta de su barrio rural en Green Isle, Minnesota.
Al principio pensó que el individuo vestido de oscuro era uno de los policías que registraban la zona en busca de Boelter.
Pero Thomas se dio cuenta de que no tenía sentido que un agente estuviera allí solo, sin refuerzos ni vehículos policiales cerca. Dijo que «pasó junto a él» y luego vio a la persona esconderse en una alcantarilla. No sabía si el hombre la vio. Su preocupación aumentó.
Thomas vio un coche patrulla, aparentemente parte de la persecución. Agitó los brazos para llamar la atención del agente y le transmitió lo que vio.
Su mente se aceleró. Thomas temía estar «haciendo perder el tiempo a todo el mundo».
Los agujeros de bala marcan la puerta principal del senador del estado de Minnesota John Hoffman, que resultó herido junto a su esposa, Yvette, en un ataque que, según la policía, fue perpetrado por Vance Luther Boelter, en Champlin, Minnesota, el 14 de junio de 2025. (Tim Evans/Reuters)Pronto, los agentes rodearon la zona y sacaron a Boelter. Los agentes dijeron que se arrastró hacia ellos para rendirse, aproximadamente a una milla de distancia de la casa de su familia. El sospechoso, de 57 años, se enfrenta a múltiples cargos federales y estatales, entre ellos asesinato y tentativa de asesinato.
Thomas tuvo un contacto limitado con los Boelter, que vivían a pocas puertas de su casa. Describió a la familia como «muy cristiana».
«Vinieron a una fiesta que dimos el año pasado», dijo. «Fueron muy agradecidos y respetuosos».
Thomas no detectó nada extraño.
En cuanto a por qué Boelter se acercó tanto a la casa de su familia, sabiendo que la policía le seguía la pista, Thomas dijo que ella y otro vecino creen que «quería morir en su casa».
Cuando Boelter compareció ante la Corte federal de St. Paul, Minnesota, el 16 de junio, dijo al juez que no podía permitirse un abogado. Los registros judiciales muestran que una defensora pública federal, Katherian Roe, es la abogada principal que lo representa. The Epoch Times solicitó comentarios a Roe y a un segundo abogado. La próxima audiencia de Boelter en la Corte federal está prevista para el 27 de junio.
También se enfrenta a cargos estatales, pero el sitio web de la Corte de Minnesota indica que ese caso está «inactivo» mientras se tramita el caso federal.
Una foto distribuida el 15 de junio de 2025 muestra a Vance Luther Boelter, de 57 años, sospechoso de matar a tiros a una legisladora del estado de Minnesota y a su marido, bajo custodia en un lugar no revelado. (Oficina del Sheriff del Condado de Ramsey a través de Facebook/Handout vía Reuters)
El sospechoso fundó una empresa de seguridad
El sospechoso y su familia vivían en una casa de 350 metros cuadrados, comprada en 2023 por más de USD medio millón.Boelter también vivía a tiempo parcial con compañeros de piso en el norte de Minneapolis, un arreglo que pudo ser por conveniencia de Boelter, ya que la casa familiar se encuentra a una hora en coche de la ciudad, según Thomas. Vivir en una segunda ubicación cerca de la ciudad es una práctica habitual entre los residentes de Green Isle, añadió.
Según su perfil de LinkedIn, trabajaba principalmente en la gestión de empresas de alimentación y bebidas.
Boelter declaró que obtuvo un doctorado en 2016 en la Cardinal Stritch University, una universidad católica privada ya desaparecida de Wisconsin. Boelter y su esposa fundaron Revoformation Ministries, una organización sin ánimo de lucro. Se mudaron a Minnesota hace unos 15 años.
Su último trabajo conocido, aparte de sus propios negocios, fue en Metro First Call, una empresa de servicios funerarios.
El propietario, Tim Koch, dijo a The Epoch Times que Boelter trabajó para la empresa —que ofrece servicios de transporte, embalsamamiento y cremación— durante casi dos años y se marchó voluntariamente en febrero.
Koch dijo que sería «irresponsable» decir más, aparte de ofrecer sus condolencias a las familias de las víctimas del tiroteo.
Boelter también creó Praetorian Security Services.
«Tenga la seguridad de que su hogar estará protegido mientras esté en casa o fuera», reza una versión archivada de la página web de la empresa, en la que se promociona una flota de vehículos tipo policial equipados con sirenas y luces intermitentes.
Ese es el tipo de vehículo que Boelter condujo hasta el lugar de los hechos, según las autoridades.
Antes del tiroteo, Boelter supuestamente envió un mensaje de texto a dos compañeros de piso, diciéndoles que los quería y que podría acabar muerto.
Según un registro judicial, también escribió un mensaje a su familia después de los hechos en el que decía: «Papá fue a la guerra anoche... No quiero decir más porque no quiero implicar a nadie».
Un vecino inspecciona las huellas de los neumáticos de los vehículos policiales en el jardín delantero de una residencia relacionada con Vance Luther Boelter, de 57 años, en Minneapolis, el 14 de junio de 2025. (Tim Evans/Reuters)
Incidentes «escalofriantes» en cuatro suburbios
Joe Thompson, fiscal federal interino del distrito de Minnesota, dijo a los periodistas que los presuntos delitos de Boelter «son materia de pesadillas».Una declaración jurada de 20 páginas del FBI revela lo que Thompson calificó como detalles «escalofriantes» de los acontecimientos ocurridos en cuatro suburbios de Minneapolis durante la madrugada del 14 de junio.
En primer lugar, el sospechoso se dirigió presuntamente a la casa de los Hoffman en Champlin, conduciendo un todoterreno negro equipado con luces de emergencia y una matrícula falsa en la que se leía «POLICÍA».
El hombre enmascarado con silicona dijo a la familia que era policía y los cegó con una linterna, según la declaración jurada. Cuando los Hoffman se dieron cuenta de que se hacía pasar por un agente, el hombre armado abrió fuego. La hija adulta de los Hoffman llamó a la policía.
Condujo hasta un segundo suburbio, Maple Grove y llamó al timbre a las 2:24 a. m., pero su objetivo, otro legislador estatal, estaba de vacaciones y no se encontraba en casa, según los registros judiciales.
La tercera parada del sospechoso fue en New Hope, según la policía. Allí, sus planes se vieron frustrados. Se encontró con la policía, que estaba realizando un control de bienestar en la casa de un funcionario cuyo nombre no se reveló, tras el tiroteo de los Hoffman, según la declaración jurada.
Finalmente, las autoridades alegan que Boelter se dirigió a la casa de Hortman en Brooklyn Park alrededor de las 3:30 a. m.
Cuando llegó la policía, vio al sospechoso de pie cerca de la puerta principal.
«Momentos después, Boelter disparó varias veces contra la casa», reza un comunicado del Departamento de Justicia.
Al parecer, avanzó y entró en la casa, disparando. Las cámaras de los salpicaderos de los coches de policía captaron los disparos que alcanzaron a los Hoffman y a su golden retriever. El perro de servicio entrenado, llamado Gilbert, resultó «gravemente herido» y murió más tarde, según informó la organización sin ánimo de lucro Helping Paws en Facebook.
El sospechoso corrió por la casa y escapó a pie, dejando atrás el todoterreno.
(Ilustración de The Epoch Times/Maptiler)
Se muestran imágenes de las armas encontradas en un vehículo presuntamente relacionado con Vance Boelter, mientras la Fiscalía de los Estados Unidos anuncia sus planes de imputar a Boelter numerosos cargos federales por la muerte de la representante demócrata Melissa Hortman y su marido, Mark, en Minneapolis el 16 de junio de 2025. (Tim Evans/Reuters)
Rastro de pruebas
Ese vehículo estaba registrado a nombre de Boelter y su esposa. Contenía cinco armas de fuego, junto con cuadernos llenos de notas manuscritas en las que figuraban «más de 45 funcionarios públicos estatales y federales de Minnesota», entre ellos Hortman, según documentos judiciales.A pocas manzanas de allí, los investigadores encontraron otras pruebas, entre ellas una pistola semiautomática Beretta 92 de 9 mm desmontada. Boelter la compró hace 25 años.
Utilizando los datos del teléfono móvil, los investigadores localizaron a la esposa de Boelter, Jenny. Ella accedió a que registraran su teléfono y su vehículo. Además de mensajes de texto de su marido, los agentes encontraron dos pistolas, USD 10 mil en efectivo y los pasaportes de ella y de los hijos de Boelter, que se encontraban en el coche.
Thomas dijo que duda que la esposa de Boelter hubiera huido, basándose en su personalidad. Describió a Jenny Boelter como «tranquila», «monótona» y «supercristiana».
Los investigadores localizaron a un testigo que dijo a la policía que Boelter, a quien acababa de conocer, le compró una bicicleta eléctrica alrededor de las 7 de la mañana del 14 de junio en una parada de autobús al norte de Minneapolis.
Boelter también acordó comprar el sedán Buick del hombre, según el testigo. Los dos hombres se dirigieron a Robbinsdale, Minnesota, donde Boelter supuestamente retiró USD 2.2 mil de un cajero automático, vaciando su cuenta. Las cámaras lo captaron con un sombrero de vaquero.
Aproximadamente a las 2:30 de la madrugada del 15 de junio, los agentes recibieron un aviso sobre una persona que circulaba en una bicicleta eléctrica a unos tres kilómetros al este de la casa de Boelter en Green Isle.
Los agentes encontraron el Buick recién comprado abandonado en una autopista cerca del lugar donde se vio la bicicleta eléctrica.
Después de utilizar un dron para asegurarse de que el coche no tuviera trampas explosivas, los investigadores registraron el Buick. Encontraron un sombrero de vaquero y una confesión manuscrita dirigida al FBI. Boelter admitió ser «el tirador fugitivo» de los dos tiroteos de Minnesota, según la declaración jurada del FBI.
La policía se reúne en la escena del crimen mientras busca a un sospechoso que se hizo pasar por un agente de policía y disparó a dos legisladores del estado de Minnesota y a sus esposas en sus casas, en Champlin, Minnesota, el 14 de junio de 2025, en una imagen fija de un vídeo. (KTSP, afiliada de ABC, a través de Reuters)
Creencias religiosas y «vida moral»
Unos años antes de ser acusado de asesinato y tentativa de asesinato, Boelter predicaba desde púlpitos extranjeros sobre el valor de la vida de cada persona, según muestran grabaciones en video.En 2021, dijo a una congregación en la República Democrática del Congo que se dedicaba a Dios y a las enseñanzas cristianas y que vivía «una vida moral», sin beber alcohol, fumar ni decir palabrotas.
Boelter se arrodilló durante su sermón, demostrando cómo agradecía a Dios por convertirlo en «una persona que se preocupaba primero por los demás».
Dijo que llamó a sus hijas Gracia, Fé, Esperanza y Alegría por motivos religiosos. Su único hijo se llama David Emerson Boelter, en homenaje a un amigo de Minnesota que fue uno de los 16 misioneros asesinados a machetazos en Zimbabue en 1987.
Boelter dijo que no sentía rencor hacia los asesinos de su amigo porque «si hubieran conocido a Jesús, no lo habrían hecho».
Describió sentir tal alegría por Cristo que le daban ganas de bailar. Para expresar esa emoción, Boelter saltó sobre un pie, luego sobre el otro, girando y exclamando alabanzas en voz alta mientras los asistentes al sermón lo vitoreaban.
En 2023, Boelter regresó al mismo lugar como pastor invitado. Dijo a la audiencia que le preocupaba que muchas iglesias estadounidenses «no saben que el aborto es un error».
«Cada uno de ustedes [es] un regalo de Dios», dijo a los feligreses.
El «crimen espectacular» ofrece pistas
Cuando se le preguntó sobre el contraste entre las creencias que profesaba Boelter sobre la santidad de la vida y sus presuntos actos asesinos, el psiquiatra forense Dr. Michael Welner dijo que una persona así puede llegar a «sentirse cómoda con la violencia homicida, justificada por sus propias creencias personales».Welner, que imparte clases en la Facultad de Medicina Mt. Sinai, afirmó que existe un denominador común entre los sospechosos acusados de «crímenes espectaculares», aquellos que sin duda atraen una gran publicidad.
«[Estos presuntos autores] ven el asesinato de «alguien» como una cura para ser 'nadie'», declaró a The Epoch Times.
Boelter sobrevivió ileso, según Welner y ahora está cosechando «los frutos de su espectáculo»: la notoriedad para sí mismo y para su causa ideológica, sea cual sea.
Welner, presidente de The Forensic Panel, un grupo de científicos que colabora con las cortes, afirmó que es necesario seguir investigando «para desentrañar los aspectos racionales o irracionales» de la motivación de Boelter.
Flores y mensajes escritos a mano en un memorial frente al Capitolio del estado de Minnesota en honor a la asambleísta demócrata Melissa Hortman y su esposo, Mark, después de que fueran asesinados a tiros en St. Paul, Minnesota, el 15 de junio de 2025. (Tim Evans/Reuters)El gobernador de Minnesota, Tim Walz, calificó la muerte de la representante estatal, compañera demócrata, como «un asesinato por motivos políticos». El senador estatal herido también es demócrata.
Las fuerzas del orden no revelaron un motivo específico. Sin embargo, las pruebas indican que Boelter tenía como objetivo a funcionarios públicos afiliados al Partido Demócrata, según una declaración jurada del FBI.
La afiliación política de Boelter no figura en los registros públicos de Minnesota, pero Walz y un anterior gobernador demócrata nombraron a Boelter miembro de una junta de desarrollo laboral, en la que también participaba el senador herido.
Drew Evans, superintendente de la Oficina de Detención Criminal de Minnesota, dijo que para determinar el motivo de los ataques será necesario investigar más a fondo.
«A menudo queremos respuestas fáciles para problemas complejos», dijo a los periodistas poco después del tiroteo. «Esas respuestas llegarán cuando completemos el panorama completo de nuestra investigación».
Con información de Associated Press.
Únase a nuestro canal de Telegram para recibir las últimas noticias al instante haciendo clic aquí
