El triunfo del líder derechista José Antonio Kast desató una ola de reacciones en América Latina. En México, su triunfo no pasó desapercibido por la presidenta, Claudia Sheinbaum.
"Felicitamos al pueblo chileno por una jornada electoral pacífica y democrática. También a José Antonio Kast, próximo presidente de Chile. Confío en que ambos gobiernos seguiremos trabajando por el bien de nuestros países y de la región", escribió la mandataria mexicana el 14 de diciembre en sus redes sociales.
Un día después, en su conferencia matutina del 15 de diciembre, Sheinbaum se refirió al resultado electoral chileno y lo enmarcó en un análisis regional.
"Creo que es un momento de reflexión para los movimientos progresistas en América Latina de por qué se dan estas circunstancias. Yo creo que esto no se va a dar en México, porque número uno hay mucho apoyo popular al gobierno, porque estamos cumpliendo", afirmó.
También señaló cómo un segundo punto, que su gobierno esta dando resultados como "la disminución de la pobreza, de las desigualdades". Además, dijo que en el movimiento de la Cuarta Transformación hay unidad, lo que no permitiría que un giro político sucediera.
La presidenta agregó que, más allá de afinidades ideológicas, su postura respeta la decisión ciudadana. "Evidentemente, nosotros queremos que haya más gobiernos cercanos al pueblo, pero que siempre se decida de manera democrática. En el caso de Chile fue una votación democrática, eligió el pueblo de Chile quién quiere que lo gobierne", dijo.
El triunfo de Kast generó reacciones inmediatas entre mandatarios de la región. El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, felicitó al presidente electo y al pueblo chileno por un proceso "democrático, transparente y ordenado", y expresó su disposición a trabajar con el nuevo gobierno para fortalecer las relaciones bilaterales, la integración regional y el mantenimiento de Sudamérica como zona de paz.
Desde Argentina, el presidente Javier Milei celebró el resultado con un mensaje enfático. Expresó "enorme alegría" por lo que calificó como un "aplastante triunfo" y señaló que se trata de "un paso más de nuestra región en defensa de la vida, la libertad y la propiedad privada", al tiempo que manifestó su intención de colaborar para que América Latina avance hacia "las ideas de la libertad".
El presidente de Paraguay, Santiago Peña, también se sumó a las felicitaciones y reconoció la "ejemplar jornada democrática", además de felicitar a Kast por su elección como presidente de Chile.
En Perú, el presidente José Jerí informó que sostuvo una conversación con Kast para felicitarlo por su "triunfo democrático" y dialogar sobre cooperación frente a la delincuencia transnacional, así como sobre el fortalecimiento de los vínculos bilaterales. Jerí adelantó que invitó al mandatario electo a organizar el Gabinete Binacional Perú–Chile en 2026.
La victoria también fue reconocida por Estados Unidos. El secretario de Estado, Marco Rubio, afirmó que la nueva administración chilena compartirá prioridades con Washington, como el fortalecimiento de la seguridad pública, el combate a la inmigración ilegal y la revitalización de la relación comercial.
Kast, candidato del Partido Republicano de Chile, ganó la presidencia tras una contundente victoria en la segunda vuelta frente a Jeannette Jara, candidata del Partido Comunista. Con más del 95 % de los votos escrutados, obtuvo más del 58 % de los sufragios, mientras que su rival alcanzó el 41 %.
El resultado marca un giro respecto a las elecciones de 2021, cuando Gabriel Boric derrotó a Kast en la segunda vuelta.
Durante la campaña, Kast centró sus promesas en una agenda de seguridad, control migratorio y recuperación económica, con planteamientos que se comparan con los del presidente estadounidense Donald Trump.
Kast prometió a los votantes chilenos que su administración tomaría medidas enérgicas contra la delincuencia, deportaría a cientos de miles de inmigrantes ilegales que residen en Chile y se enfocaría en restaurar la economía de la nación sudamericana.
La llegada de Kast a La Moneda se produce en un contexto de reacomodos políticos en América Latina, donde los resultados electorales recientes reabren el debate sobre el rumbo ideológico de la región y los equilibrios entre proyectos de izquierda y de derecha.
Con información de Joseph Lord
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