La representante LaMonica McIver (D-N.J.), quien enfrenta cargos por presuntamente agredir a dos oficiales federales en el centro de detención de ICE en Nueva Jersey, compareció por primera vez ante la corte el 21 de mayo y fue puesta en libertad con restricciones de viaje.
McIver asistió a la audiencia de forma virtual desde Washington. La audiencia, que duró 15 minutos, fue transmitida en vivo desde la corte federal en Newark, Nueva Jersey.
La congresista, que cumple su primer mandato, habló brevemente durante el proceso, respondiendo principalmente a las preguntas de la juez magistrada federal Stacey Adams sobre si entendía los cargos en su contra y sus derechos como acusada. No se le pidió que se declarara culpable o inocente.
Adams fijó condiciones de fianza que permiten a McIver viajar por asuntos oficiales del Congreso. Su equipo legal argumentó que también debería autorizársele viajar por vacaciones.
"No existe ninguna posibilidad de que la congresista represente un riesgo de fuga", dijo su abogado, Paul Fishman, ex fiscal federal de Nueva Jersey durante la administración Obama.
Como parte de su liberación, se ordenó a McIver entregar todas las armas de fuego que pudiera poseer. Su próxima comparecencia ante la corte está programada para el 11 de junio, y deberá asistir de forma presencial.
McIver enfrenta dos cargos por agredir, resistirse u obstruir a ciertos funcionarios o empleados federales. El fiscal Stephen Demanovich, quien también asistió de forma virtual a la audiencia del miércoles, señaló que cada cargo conlleva una pena máxima de ocho años de prisión.
Los cargos se derivan de un altercado ocurrido el 9 de mayo frente a un centro de detención del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) en Newark.
Según una denuncia federal presentada el 19 de mayo, McIver acompañaba a sus colegas demócratas de Nueva Jersey, las representantes Bonnie Watson Coleman y Rob Menendez, para realizar una "inspección de supervisión del Congreso", cuando supuestamente intentó impedir el arresto del alcalde de Newark, Ras Baraka, a quien oficiales federales bloquearon el acceso a la delegación.
Citando declaraciones de testigos, videos de vigilancia y grabaciones de cámaras corporales, los fiscales alegan que McIver "golpeó con el antebrazo" a un oficial especial de Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI) e intentó inmovilizarlo al "agarrarlo con fuerza". También la acusan de empujar a un agente del ICE y de usar "ambos antebrazos para golpearlo con fuerza".
Baraka fue acusado inicialmente de allanamiento, pero los fiscales retiraron el cargo posteriormente.
En una entrevista con MSNBC el miércoles, McIver calificó los cargos en su contra como "absurdos" y describió el proceso judicial como una "intimidación política".
"La confusión y el caos que se ven fueron causados por los agentes del ICE y del Departamento de Seguridad Nacional", afirmó. "Ellos crearon esta situación innecesaria al arrestar al alcalde, y luego, como pueden ver, retiraron los cargos".
El presidente Donald Trump se pronunció el martes, afirmando que McIver estuvo "fuera de control" durante el altercado.
"Ella empujó a agentes federales y perdió el control", afirmó el mandatario. "Los días de esa conducta indisciplinada se acabaron en este país. Aquí habrá ley y orden".
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