El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) defendió el lunes sus acciones después de que unos agentes esposaran brevemente a una empleada del representante Jerry Nadler (D-N.Y.) la semana pasada.
El DHS declaró en la red social X que agentes del Servicio de Protección Federal (FPS) visitaron la oficina de Nadler el 28 de mayo porque habían recibido informes de que había manifestantes presentes.
La oficina del congresista se encuentra en el mismo edificio que la Corte de Inmigración de Varick.
«Basándose en incidentes anteriores en una instalación cercana, los agentes del FPS estaban preocupados por la seguridad de los empleados federales de la oficina y se dirigieron al lugar para garantizar la seguridad y el bienestar de los presentes», afirmó el DHS.
«Al llegar, se permitió la entrada a los agentes, que se encontraron con cuatro personas».
Según el departamento, los agentes del FSP se identificaron y comunicaron su intención de realizar un control de seguridad cuando una persona se mostró «verbalmente agresiva» y bloqueó físicamente el acceso a la oficina del congresista.
«Los agentes detuvieron entonces a la persona en el pasillo con el fin de completar el control de seguridad», dijo el DHS, añadiendo que todos ellos fueron finalmente liberados sin más incidentes.
NTD, el medio de comunicación asociado a The Epoch Times, se puso en contacto con el DHS para obtener más detalles, pero no recibió respuesta antes de la publicación.
Nadler dijo que estaba conmocionado por el incidente y afirmó que su oficina había sido acusada injustamente de dar refugio a los alborotadores.
«Aunque no se practicó ninguna detención y la situación se calmó rápidamente, me alarma la táctica agresiva y dura que está empleando el DHS en la ciudad de Nueva York y en todo el país», escribió Nadler en un comunicado en X.
«La decisión de entrar en una oficina del Congreso y detener a un miembro del personal demuestra un desprecio profundamente preocupante por los límites legales adecuados. Si esto puede suceder en la oficina de un miembro del Congreso, le puede pasar a cualquiera, y está sucediendo».
NTD se puso en contacto con la oficina de Nadler para obtener más detalles, pero no recibió respuesta antes de la publicación.
El día del incidente, varios activistas protestaban frente a la Corte de Inmigración de Varick, en otra planta de la oficina de Nadler, en contra de la detención de inmigrantes ilegales por parte de agentes federales.
Nadler declaró a la CNN que «el DHS estaba molesto porque algunos miembros de mi personal estaban observando cómo detenían a inmigrantes que salían de una corte de inmigración en el mismo edificio, una planta más abajo».
El congresista afirmó que sus empleados fueron acusados de ayudar a los alborotadores, pero dijo que su oficina simplemente invitó a los defensores de los migrantes a subir a su oficina.
La situación se caldeó cuando aparecieron los agentes y exigieron entrar. Imágenes de los medios de comunicación muestran a un agente esposando a una empleada no identificada. Al mismo tiempo, otro agente intentó acceder a una zona del interior de la oficina.
Nadler afirmó que los agentes necesitaban una orden judicial para entrar en su oficina y no la tenían.
Prometió solicitar formalmente una investigación y una audiencia sobre el incidente al presidente del Comité Judicial de la Cámara de Representantes, Jim Jordan (R-Ohio), y también quiere que la secretaria del DHS, Kristi Noem, testifique sobre el asunto.
El último incidente se produce en un momento de escalada de tensiones entre los legisladores demócratas y las agencias federales, en medio de la actual campaña de la Administración Trump contra la inmigración ilegal.
El mes pasado, el representante LaMonica McIver (D-N.J.) fue acusado de agredir a agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) en el centro de detención de inmigrantes Delaney Hall, en Newark. Los demócratas también han expresado su preocupación por el hecho de que los agentes federales se dirijan a los juzgados para detener a inmigrantes ilegales sin el debido proceso.
Las autoridades federales de inmigración sostienen que actúan dentro de sus competencias y que se centran en aquellos que se encuentran en Estados Unidos de forma ilegal.
El ICE concluyó recientemente su mayor operación de control selectivo hasta la fecha, con la detención de casi 1500 inmigrantes ilegales en Massachusetts durante el mes de mayo.
De NTD News
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