El CEO de Pfizer declaró el 3 de septiembre que el presidente Donald Trump debería recibir el Premio Nobel de la Paz por la operación que ayudó a distribuir vacunas contra COVID-19 a los pocos meses del inicio de la pandemia.
Albert Bourla afirmó en un comunicado que la Operación Warp Speed y el desarrollo de las vacunas contra COVID-19 por parte de Pfizer y Moderna "constituyen un gran logro en materia de salud pública" que consiguió bajo el liderazgo de Trump durante su primer mandato.
"Este liderazgo estadounidense también ha proporcionado una nueva plataforma que puede impulsar una innovación significativa en la investigación del cáncer", dijo Bourla. "Un logro de este tipo sería normalmente digno del Premio Nobel de la Paz, dado su importante impacto".
El senador Bill Cassidy (R-La.), médico y presidente del Comité de Salud del Senado, también dijo el miércoles que Trump merece el Premio Nobel por la Operación Warp Speed.
El Premio Nobel de la Paz se concede a personas que lograron éxitos en una de estas cuatro áreas: "control de armas y desarme, negociación de la paz, democracia y derechos humanos y trabajo destinado a crear un mundo mejor organizado y más pacífico", según la página web del premio.
Bourla respondió después de que Trump dijera recientemente que "es muy importante que las empresas farmacéuticas justifiquen el éxito de sus diversos medicamentos contra COVID". Dijo que Pfizer y otras empresas le mostraron información "extraordinaria, pero nunca parecen mostrar esos resultados al público", e instó a las partes a hacer pública la información.
Trump, quien promocionó repetidamente lo que ha descrito como el éxito de la operación, también escribió: "Espero que la Operación Warp Speed haya sido tan 'brillante' como muchos dicen. Si no es así, todos queremos saberlo y por qué".
"La petición de transparencia del presidente Trump es bienvenida", dijo Bourla.
Se negó a revelar ninguna información nueva. En su lugar, señaló un enlace en el sitio web de Pfizer que contiene estudios y otros datos sobre las vacunas contra la COVID-19.
Según Bourla, Pfizer añadirá más información y estudios a finales de septiembre. El funcionario dijo que Pfizer pronto compartirá datos sobre su vacuna actualizada contra COVID-19, que se dirige a la cepa LP.8.1.
"Defendemos la integridad de nuestros datos, seguimos comprometidos con compartir abiertamente la información de nuestros ensayos en curso y continuaremos manteniendo la confianza de los pacientes, las autoridades sanitarias y el público", dijo.
El portavoz de la Casa Blanca, Kush Desai, declaró en un correo electrónico a The Epoch Times: "Como ha dejado claro el presidente Trump, el único principio rector de la toma de decisiones en materia de salud en esta Administración es la ciencia de referencia" y añadió que los funcionarios federales de salud "seguirán adoptando un enfoque basado en la evidencia para evaluar los tratamientos farmacéuticos y hacer que Estados Unidos vuelva a estar sano".
Moderna, que también fabricó una vacuna contra COVID-19 con financiación de la Operación Warp Speed durante el primer mandato de Trump, no ha respondido a una consulta y no ha respondido públicamente a la declaración de Trump.
Los reguladores federales recientemente restringieron la autorización de las vacunas contra COVID-19 de Pfizer, Moderna y Novavax, señalando que los ensayos clínicos que respaldaron las autorizaciones iniciales se realizaron hace años y haciendo hincapié en que, para las personas más jóvenes y sanas, se necesitan nuevos ensayos.
Trump también destacó la agitación en los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, cuyo director despidió recientemente. Tras el despido, varios altos funcionarios dimitieron, alegando desacuerdos con el secretario de Salud, Robert F. Kennedy Jr. y con un panel que asesora a los CDC sobre vacunas, compuesto por personas seleccionadas por Kennedy tras destituir a los miembros anteriores.
Pfizer y otros que mostraron datos a Trump, en lugar de publicar la información, "pasan a la siguiente 'caza' y dejan que todos se destrocen entre sí, incluidos Bobby Kennedy Jr. y los CDC, tratando de averiguar el éxito o el fracaso del trabajo de las empresas farmacéuticas contra COVID", dijo Trump.
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