La administración Trump ampliará pronto las iniciativas del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) en Portland y Chicago, según anunció la secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, en una reunión del Gabinete celebrada el jueves.
Esto incluirá la compra de edificios en ambas ciudades, en medio de una mayor presencia de las fuerzas del orden federales, dijo.
"Estamos comprando más edificios en Chicago para operar desde allí. No vamos a dar marcha atrás. De hecho, vamos a redoblar nuestros esfuerzos y estaremos presentes en más zonas de Chicago", dijo Noem, añadiendo que se desplegarán francotiradores y seguridad en esos edificios.
"El martes estuve en Portland y me reuní con el gobernador, el alcalde y el jefe de policía", dijo Noem en la reunión, y añadió que "les dije que si no satisfacían nuestras demandas de seguridad en las calles y no colaboraban con nosotros, traeríamos más fuerzas del orden federales".
Noem también dijo: "Si tenemos que hacerlo por las malas en Portland y Chicago, lo haremos", sin dar más detalles.
A principios de esta semana, un juez federal impidió temporalmente al gobierno de Trump desplegar unidades de la Guardia Nacional en Oregón, después de que el presidente Donald Trump movilizara tropas de California para Portland, tras haberle impedido el mismo juez utilizar la Guardia Nacional de Oregón el día anterior.
Por otra parte, el jueves un juez bloqueó el despliegue de tropas de la Guardia Nacional en el área de Chicago durante al menos dos semanas, al no encontrar pruebas sustanciales de que se esté gestando un "peligro de rebelión" en Illinois en medio de los esfuerzos por deportar a los inmigrantes ilegales de la ciudad.
El juez dijo que la administración violó la Décima Enmienda, que otorga ciertos poderes a los estados, y la Decimocuarta Enmienda, que garantiza el debido proceso y la igualdad de protección.
La demanda fue presentada el lunes por Chicago e Illinois, mientras miembros de la Guardia Nacional de Texas e Illinois se dirigían a un centro de la Reserva del Ejército de Estados Unidos en Elwood, al suroeste de Chicago. Los 500 efectivos están bajo el mando del Comando Norte de Estados Unidos y habían sido activados durante 60 días.
La oficina del gobernador de Illinois, JB Pritzker, dijo el X que la situación en Chicago no necesita las tropas de la Guardia Nacional, y añadió que "los valientes hombres y mujeres que sirven en nuestra Guardia Nacional no deben ser utilizados como instrumentos políticos".
En una publicación en Truth Social esta semana, Trump escribió que el alcalde de Chicago, Brandon Johnson, y Pritzker, ambos demócratas, "¡deberían estar en la cárcel por no proteger a los agentes del ICE!".
Mientras tanto, la gobernadora de Oregón, Tina Kotek, dijo el X: "En mis conversaciones directas con el presidente Trump y la secretaria Noem, he dejado muy claro que Portland y el estado de Oregón creen en el estado de derecho y pueden gestionar sus propias necesidades de seguridad pública local. No hay insurrección. No hay amenaza para la seguridad nacional".
Antes de enviar más agentes y tropas a Portland, Trump había descrito la ciudad más grande de Oregón en términos sombríos y había dicho que terroristas de izquierda se habían apoderado de partes de la ciudad.
"Todos los estadounidenses deben tener claro que nos enfrentamos a una grave amenaza terrorista de izquierda en nuestro país, radicales asociados con el grupo terrorista nacional Antifa, del que han oído hablar mucho últimamente", dijo Trump en la reunión del Gabinete del jueves. "En Portland, Oregón, los matones de Antifa han atacado repetidamente nuestras oficinas y han sitiado propiedades federales en un intento de impedir violentamente la aplicación de la ley federal".
Con información de Associated Press.
Únase a nuestro canal de Telegram para recibir las últimas noticias al instante haciendo clic aquí
