La Patrulla Fronteriza no liberó a ningún inmigrante ilegal en el país en mayo, lo que supone una «caída espectacular» con respecto a los más de 62,000 inmigrantes ilegales que la Patrulla Fronteriza se vio «obligada a liberar a lo largo de la frontera suroeste» durante el mismo período de 2024, según informó la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) en un comunicado el 17 de junio.
La Patrulla Fronteriza solo encontró 8725 inmigrantes ilegales cruzando la frontera suroeste en mayo, frente a los 117,905 inmigrantes ilegales encontrados en mayo de 2024.
«Bajo el liderazgo de esta administración, la CBP recibió un apoyo histórico que dio lugar a otra disminución del 93 por ciento en los cruces ilegales a lo largo de la frontera suroeste este mes en comparación con el año pasado», declaró el comisionado en funciones de la CBP, Pete Flores.
«Las cifras fronterizas siguen registrando mínimos históricos, lo que refuerza el éxito sostenido de nuestros esfuerzos de aplicación de la ley para garantizar la seguridad de la patria y proteger a las comunidades estadounidenses».
El total de encuentros de la CBP en todo el país, incluidos los puertos de entrada, fue de una media de 952 al día en mayo, lo que supone «la segunda media diaria más baja de encuentros de la CBP en la historia», según la agencia.
Las incautaciones de drogas aumentaron en mayo, con un 19 por ciento más de cocaína y un 191 por ciento más de heroína incautada el mes pasado que en abril.
En una publicación del 18 de junio en la plataforma de redes sociales X, el zar de la frontera, Tom Homan, elogió a la administración Trump por reducir el número de inmigrantes ilegales liberados en Estados Unidos.
Dijo que la Patrulla Fronteriza solo encontró 95 extranjeros ilegales en toda la frontera sur en las últimas 24 horas, la «cifra más baja jamás registrada».
«Compárenlo con la Administración Biden, que superó los 10,000 al día», dijo.
«Para continuar con esta gran labor y hacerla más permanente, necesitamos que se apruebe el "Gran y Hermoso Proyecto de Ley" para poder terminar el trabajo, que incluye la mayor operación de deportación por la que votó el pueblo estadounidense. Dios bendiga a los hombres y mujeres de la CBP y [del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas]. El presidente Trump es el que cambia las reglas del juego».
El «Gran y Hermoso Proyecto de Ley», respaldado por los republicanos, incluye varias disposiciones para reforzar la seguridad fronteriza y fortalecer los procesos de inmigración.
Esto incluye USD 50 mil millones en fondos para renovar la construcción del muro fronterizo sur y USD 4 mil millones para contratar a 5000 nuevos funcionarios de aduanas y 3000 nuevos agentes de la Patrulla Fronteriza.
El proyecto de ley fue aprobado por un estrecho margen en la Cámara de Representantes, con 215 votos a favor y 214 en contra. Ahora debe ser aprobado por el Senado antes de que el presidente Donald Trump le dé su aprobación definitiva.
Lucha contra la inmigración ilegal
Desde que asumió el cargo, Trump tomó varias medidas para hacer frente a la crisis de la inmigración ilegal.El presidente firmó órdenes para poner fin a la captura y liberación de inmigrantes ilegales y al reasentamiento de refugiados, así como para construir un muro fronterizo. Declaró el estado de emergencia nacional, lo que permite al ejército y a la Guardia Nacional construir barreras y completar el muro a lo largo de la frontera de Estados Unidos con México.
El 11 de abril, Trump emitió un memorándum en el que autorizaba al ejército tomar el control de una franja de tierra a lo largo de la frontera sur para contrarrestar la inmigración ilegal.
«Nuestra frontera sur está siendo atacada por diversas amenazas», escribió Trump en el memorándum. «La complejidad de la situación actual requiere que nuestro ejército asuma un papel más directo en la seguridad de nuestra frontera sur que en el pasado reciente».
La medida del presidente para hacer frente a la inmigración ilegal encontró oposición. Desde principios de junio, Los Ángeles y otros lugares del sur de California son escenario de múltiples protestas contra las políticas de inmigración del gobierno. Algunas de estas protestas degeneraron en disturbios.
En una publicación del 16 de junio, el gobernador de California, Gavin Newsom, acusó a Trump de intentar provocar la violencia para ganar poder. La declaración de Newsom se produjo después de que Trump ordenara a los agentes de Inmigración y Aduanas que hicieran «todo lo que estuviera en sus manos» para llevar a cabo «el mayor programa de deportación masiva de la historia».
«Su plan es claro: incitar a la violencia y al caos en los estados demócratas, tener una excusa para militarizar nuestras ciudades, demonizar a sus oponentes, seguir infringiendo la ley y consolidar su poder», afirmó Newsom. «Es ilegal y no lo permitiremos».
El 17 de junio, el Pentágono anunció que desplegará hasta 700 militares en Florida, Luisiana y Texas para ayudar a los estados con la inmigración, en apoyo a la petición del presidente de ampliar la deportación masiva de inmigrantes ilegales.
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