Poco después del lanzamiento de Shen Yun Performing Arts, al otro lado del mundo, los funcionarios del Partido Comunista Chino (PCCh) creyeron tener el plan perfecto para acabar con el grupo artístico estadounidense: inundarían el mercado con docenas de grupos competidores —60, para ser precisos— y eso sería el fin. Después de todo, ¿Quién no preferiría ver una actuación china respaldada oficialmente por el Estado en lugar de una organizada por un grupo de disidentes con sede en Nueva York que intentan revivir "5000 años de civilización china"?
Al final, resultó que muy poca gente.
Los grupos respaldados por el Estado apenas causaron sensación y son poco recordados. Mientras tanto, Shen Yun, que ahora se acerca a su vigésimo año, obtiene reconocimiento y llena teatros en todo el mundo cada temporada.
¿Qué hace que el PCCh esté tan desesperado por impedir que Shen Yun actúe o, en su defecto, impedir que el público asista? ¿Por qué Shen Yun alcanzó el reconocimiento mundial que tiene? ¿Están relacionadas estas cuestiones?
Atención al mayor temor del PCCh
El PCCh tiene a Shen Yun en el punto de mira desde los inicios del grupo. Eso significa que incluso antes de que el régimen conociera el contenido de sus espectáculos de dos horas de duración: las danzas étnicas y folclóricas que destacan algunas de las más de 50 minorías étnicas de China, pueblos como los mongoles y los tibetanos, cuyas culturas el régimen ha intentado borrar; o las canciones bel canto en chino con letras sobre el Creador, el cielo o el significado de la vida, en marcado contraste con la agenda atea que el PCCh impone a los chinos; o las danzas basadas en historias que pintan un vívido cuadro de héroes populares, emperadores y otras figuras prominentes de la historia china que el PCCh ha tratado de reescribir, el PCCh ya se oponía a Shen Yun.
Bailarines de Shen Yun interpretan una danza clásica china en el escenario. (Cortesía de Shen Yun Performing Arts.)Lo hizo por una única pero significativa razón: los artistas fundadores de Shen Yun practican Falun Gong.
Falun Gong, también conocido como Falun Dafa, es una práctica espiritual pacífica centrada en los principios de verdad, compasión y tolerancia. Fuera de China, se considera ampliamente como una religión.
Pero en China, donde las actividades religiosas fuera del control del Estado están penalizadas, los practicantes de Falun Gong se enfrentan a una violenta persecución desde 1999. Las organizaciones de derechos humanos y The Epoch Times han documentado casos de detenciones masivas, trabajos forzados, torturas, lavado de cerebro e incluso sustracción de órganos a practicantes vivos de Falun Gong por parte del régimen chino, y esa persecución continúa hoy en día sin cesar.
La práctica se presentó al público a principios de la década de 1990 y alcanzó una gran popularidad, hasta el punto de que, según estimaciones oficiales, el número de personas que practicaban Falun Gong oscilaba entre 70 y 100 millones a finales de la década. En 1999, la mayoría de la población de las ciudades chinas había visto a personas practicando los cinco ejercicios meditativos de Falun Gong en parques públicos, y la mayoría había oído hablar de esta práctica similar al qigong.
La persecución fue iniciada por el entonces líder del PCCh, Jiang Zemin, quien, según revelaron fuentes internas, sentía un odio irracional e incluso celos hacia Falun Gong. Pero la persecución también tenía como objetivo consolidar aferrarse al poder. Al igual que las violentas campañas de represión que el régimen comunista lanzaba cada década o dos —la masacre de la plaza de Tiananmen, la Revolución Cultural, el trato a los civiles durante la Gran Hambruna—, el dictador creía que, con la fuerza del Estado, podría "eliminar" a Falun Gong en poco tiempo.
Miembros de Shen Yun, tanto jóvenes como mayores, han compartido con The Epoch Times cómo les afectó directamente la persecución. Algunos sufrieron torturas y trabajos forzados a manos del PCCh por negarse a renunciar a Falun Gong. Otros arriesgaron sus vidas para escapar de China. A algunos les destrozaron a sus familias, con padres o abuelos secuestrados por el PCCh por su fe.
Practicantes de Falun Gong participan en una vigilia con velas en conmemoración de sus compañeros practicantes que fueron perseguidos hasta la muerte por el Partido Comunista Chino en China, en Washington, el 17 de julio de 2025. (Larry Dye/The Epoch Times)Hoy en día, Falun Gong se practica en más de 100 países de todo el mundo, y en 2005, un desertor del PCCh y antiguo espía testificó sobre lo mucho que esto quita el sueño a los altos cargos del PCCh.
Chen Yonglin estuvo destinado en el consulado chino en Australia desde 2001, donde se le encomendó la tarea de espiar a los practicantes de Falun Gong, cuya compasión acabó inspirando a Chen a denunciar estos esfuerzos de represión transnacional.
Falun Gong es una gran amenaza para el PCCh, dijo Chen, pero ellos describirían los esfuerzos como una batalla perdida porque las manifestaciones pacíficas continuaron y los practicantes se negaron a renunciar a Falun Gong.
Un periodista reclutado para los esfuerzos del PCCh por difamar a Falun Gong a nivel mundial dijo anteriormente a The Epoch Times que los funcionarios del PCCh involucrados sentían que habían "agotado todos los medios" excepto el asesinato, y después de más de 10 años de no poder detener a Shen Yun, la campaña se ha convertido en un golpe enorme para su confianza.
De la presión diplomática a las amenazas de bomba
La misión de revivir una civilización que se había perdido es lo suficientemente audaz por sí sola, pero ¿Qué sucede cuando esa civilización es una que un régimen autoritario con muchos recursos ha intentado borrar durante la mayor parte de un siglo?La incapacidad del PCCh para "eliminar" Falun Gong es algo que, según dijeron fuentes internas a The Epoch Times, atormenta a Xi Jinping, el actual líder del partido. Los funcionarios del PCCh en el extranjero se esfuerzan por evitar que Xi sea testigo de cualquier manifestación relacionada con Falun Gong o de anuncios relacionados con Shen Yun, pero la popularidad de Shen Yun y la libertad de manifestación en las sociedades democráticas lo convierten en un reto.
En 2022, varios denunciantes revelaron a The Epoch Times que Xi reunió a las agencias clave y les ordenó aumentar la represión de Falun Gong en el extranjero, centrando sus esfuerzos en Shen Yun, fundada por Falun Gong, debido a su visibilidad global.
Al frente de la última iniciativa se encuentra Chen Yixin, del Ministerio de Seguridad del Estado (MSS) de China, su agencia de espionaje, pero The Epoch Times ha documentado la participación de al menos 14 departamentos estatales. Entre ellos se encuentran el Ministerio de Asuntos Exteriores, el Ministerio de Cultura, el Departamento de Trabajo del Frente Unido dependiente del MSS, la Administración del Ciberespacio y la oficina 610, similar a la Gestapo, que Jiang creó para encabezar la persecución en 1999.
Los miembros de Shen Yun declararon al periódico que han sido objeto de acoso desde sus inicios, y compartieron numerosas pruebas, desde neumáticos pinchados hasta amenazas de muerte.
Hay casos físicos, como múltiples casos de manipulación de vehículos. En uno de ellos, un mecánico que evaluaba los neumáticos del autobús de la gira dijo que los pinchazos se hicieron para evadir la detección, pero para provocar una explosión a alta velocidad en una autopista que pudiera volcar el autobús que transportaba a docenas de artistas.
Los autobuses de gira de Shen Yun han sido durante mucho tiempo objeto de sabotajes. Recientemente se han intensificado las amenazas contra la compañía de artes escénicas que retrata "China antes del comunismo". (The Epoch Times)Los funcionarios chinos también han utilizado durante mucho tiempo la presión diplomática para intentar persuadir a los teatros o, en el caso de Europa, a los gobiernos, que a menudo gestionan los teatros nacionales, para que cancelen las representaciones de Shen Yun. Estos esfuerzos fueron bien documentados por los medios de comunicación locales como escándalos, y los funcionarios europeos han expresado su indignación por el hecho de que un régimen extranjero haya intentado dictarles lo que constituye el arte. En muchos casos, los funcionarios locales compartieron con los medios de comunicación la correspondencia de las embajadas chinas en la que se les pide que cancelen o boicoteen Shen Yun.
Pero también hubo casos en los que el régimen chino ha tenido éxito.
En 2019, el Teatro Real de Madrid cedió a la presión diplomática china, según reveló una investigación, cancelando las representaciones de Shen Yun sin avisar a los poseedores de entradas. Una organización sin ánimo de lucro llamó de incógnito a la embajada china en Madrid y grabó al embajador chino en España, Lu Fan, diciendo que había persuadido al teatro para que cancelara el espectáculo diciéndole al director general que no podía permitirse perder el mercado chino.
Hechos similares tuvieron lugar en Corea del Sur, donde los promotores locales de Shen Yun se enfrentaron a cancelaciones o rechazos rutinarios por parte de los teatros a lo largo de los años. En 2023, la embajada china en Seúl hizo una rara admisión pública de que informa a entidades coreanas como la cadena nacional KBS para que no permitan a Shen Yun actuar en su teatro.
Desde 2016, el régimen chino añadió las representaciones culturales y los teatros como una sub agenda de su estrategia de desarrollo económico global, la Iniciativa de la Franja y la Ruta de la Seda. Creó la Liga Internacional de Teatros de la Ruta de la Seda, que ahora es una alianza de 130 teatros e instituciones culturales de todo el mundo incentivada con previsiones de 24 millones de espectadores al año.
El régimen chino también participa en campañas de desinformación. Por ejemplo, señaló a la comunidad de la danza con afirmaciones de que la Academia de Danza de Beijing, gestionada por el Estado chino, inventó la danza clásica china, cuando en realidad se trata de una forma de arte muy antigua. Ha respaldado redes de bots en las redes sociales que amplifican las narrativas de propaganda negativa sobre Shen Yun.
Los últimos intentos de interferir con Shen Yun implican lo que parece ser una versión de swatting. En febrero, la Ópera Kennedy Certer de Washington fue evacuada la mañana en que Shen Yun iba a comenzar una serie de 12 funciones. Se hizo una falsa amenaza de bomba al teatro, siguiendo el patrón del año pasado de amenazas incendiarias dirigidas a los espectáculos de Shen Yun en todo el mundo. En varios casos, Shen Yun informó de que las fuerzas del orden habían confirmado que los mensajes procedían de China.
Shen Yun Performing Arts en el Kennedy Center Opera House de Washington el 24 de febrero de 2025. El teatro se vio obligado a evacuar antes de una de las representaciones de febrero debido a una amenaza de bomba del PCCh. (Lisa Fan/The Epoch Times)
¿Qué hay detrás del éxito de Shen Yun?
The Epoch Times lleva desde 2006 cubriendo las reacciones del público ante las presentaciones de Shen Yun, y esas respuestas han sido en general positivas, incluso profundas. Aplauden el arte y, a menudo, la devoción que ven en los artistas por preservar una cultura que en su día estuvo a punto de perderse.Shen Yun es la principal compañía de danza clásica china del mundo, y su actuación de dos horas incluye unas 15 escenas, como danzas basadas en historias, danzas étnicas y folclóricas, y canciones originales cantadas en el estilo tradicional bel canto en chino. Muchas características de su producción son únicas: un telón de fondo digital patentado que permite a los personajes moverse sin problemas entre la pantalla y el escenario, una orquesta en vivo que combina instrumentos chinos antiguos con una sinfonía occidental, y más sorpresas por descubrir. Con sede en Nueva York, su misión es revivir 5000 años de civilización china, que recientemente denominó "China antes del comunismo".
"Son escenas magníficas, coloridas, alegres y festivas que cuentan una historia y merecen ser vistas por el mayor número de personas posible", dijo Frédéric Étienne, director de la compañía, después de ver una representación en París la temporada pasada.
Preity Upala, actriz y ex Miss India Internacional, dijo que ver Shen Yun la temporada pasada la sorprendió aún más que cuando lo vio por primera vez hace 10 años.
"Cuando vienes a un espectáculo como este, creo que nos recuerda quiénes somos, por qué hemos venido aquí, que todos estamos conectados, interconectados... No es solo que vengan a tener una experiencia hermosa. En realidad, se van sintiéndose plenos, positivos, llenos de esperanza", afirmó.
Preity Upala, actriz y ex Miss India Internacional, disfrutó de Shen Yun Performing Arts en el Dolby Theatre de Hollywood, California, el 3 de mayo de 2025. (NTD)El exvicepresidente argentino Carlos Ruckauf, una figura destacada en la historia política del país, dijo que Shen Yun le pareció "verdaderamente notable".
"La actuación es espectacular, y su resistencia al comunismo es igualmente encomiable", dijo.
Tampoco es raro que los miembros del público digan que nunca supieron que China tuvo alguna vez toda la cultura y las costumbres que se muestran en la actuación, incluso los miembros del público que pasaron la mayor parte de su vida en China.
Los chinos son minoría entre el público de Shen Yun, y algunos incluso declararon a The Epoch Times que acudieron por curiosidad a ver un espectáculo tan estrictamente prohibido en China. Sus respuestas también son en general positivas.
Un joven apellidado Chen viajó desde China a Taiwán para ver una actuación y dijo que le pareció como si le hubieran lanzado una cuerda para sacarlo del caos en el que estaba sumido. Compartió su opinión sobre cómo reaccionaría el pueblo chino en general al ver Shen Yun:
"Haría que todos reexaminaran la historia que nos enseñaron bajo el régimen del Partido Comunista Chino: la versión falsa de la historia. A medida que la gente se enfrente a la verdadera historia china y redescubra las virtudes de las tradiciones, reflexionará sobre sus comportamientos pasados e intentará cambiar en consecuencia. Esto llevará a la nación a una nueva era", dijo.
En el gran esquema de las cosas, el PCCh es una parte minúscula de la historia. El año pasado, espectadores de todo el mundo compartieron que les parecían absurdos los intentos del PCCh de disuadir a la gente de ver el espectáculo y que esa sensación se acentuó aún más después de ver la presentación.
"Sentí que estaba presenciando la destilación de 5000 años de cultura china", dijo Rick Fisher, miembro senior de un grupo de expertos, autor y experto en China, después de ver Shen Yun en el Kennedy Center unos días después de la falsa amenaza de bomba. "Es un mensaje muy positivo, un mensaje positivo de una China que puede vivir en paz con el mundo, en lugar del Partido Comunista Chino, que está en guerra con el mundo".
"A diferencia del Partido Comunista Chino, la producción de Shen Yun representa una visión positiva de la cultura china en el mundo, una visión en la que China es amable y piadosa y busca crear el bien", afirmó. "El Partido Comunista Chino no puede convivir con esa visión".
Rick Fisher, miembro senior del Centro Internacional de Evaluación y Estrategia, habla durante una manifestación de Falun Dafa en la que se pide el fin de los 26 años de persecución del Partido Comunista Chino a Falun Gong en China, en el National Mall de Washington, el 17 de julio de 2025. (Madalina Kilroy/The Epoch Times)
