El presidente Donald Trump dijo el 30 de noviembre que planea rendir un homenaje a los dos miembros de la Guardia Nacional que resultaron heridos en un tiroteo en Washington la semana pasada, e invitó a los padres a la Casa Blanca.
Los miembros de la Guardia Nacional de Virginia Occidental Sarah Beckstrom y Andrew Wolfe resultaron heridos con impacto de bala el 26 de noviembre en lo que, según las autoridades, fue una emboscada perpetrada por un ciudadano afgano cerca de la Casa Blanca. Beckstrom falleció el 27 de noviembre a causa de sus heridas, mientras que Wolfe sigue en estado crítico.
En declaraciones a los periodistas a bordo del Air Force One, Trump dijo que habló con los padres de Beckstrom y los invitó, junto con los padres de Wolfe, a la Casa Blanca.
"Lo único que puedo decir es que estaban devastados", dijo Trump a los periodistas. "Les dije: 'Cuando estén preparados, porque es algo muy duro, vengan a la Casa Blanca. Vamos a rendir homenaje a Sarah. Y lo mismo con Andrew, esté recuperado o no, vamos a rendirle un homenaje'".
El gobernador de Virginia Occidental, Patrick Morrisey, emitió un comunicado en el que pidió a los habitantes de Virginia Occidental que ofrezcan "un minuto de silencio o de oración en todo el estado" el 28 de noviembre para honrar tanto a Beckstrom como a Wolfe.
"Estos dos héroes de Virginia Occidental estaban prestando servicio a nuestro país y protegiendo la capital de nuestra nación cuando los atacaron maliciosamente", dijo Morrisey en un comunicado. "Su valentía y compromiso con el deber representan lo mejor de nuestro estado".
El gobernador también ordenó que se ondearan las banderas a media asta en reconocimiento al fallecimiento de Beckstrom, según su oficina. Morrisey dijo que deseaba mostrar la gratitud, el respeto y el apoyo del estado a las familias de ambos miembros de la Guardia Nacional "durante este momento doloroso y desgarrador".
"El pueblo de Virginia Occidental se mantiene unido en la condena de este acto cobarde y malvado", dijo. "Honramos al sargento primero Wolfe por su valentía y honramos a la soldado Beckstrom por su sacrificio definitivo al servicio de su estado y su nación".
Las autoridades acusaron al sospechoso, identificado como Rahmanullah Lakanwal, ciudadano afgano de 29 años, de asesinato en primer grado, dos cargos de agresión con intención de matar mientras estaba armado y tres cargos de posesión de un arma de fuego durante un delito violento. La fiscal general Pam Bondi dijo a Fox News el 27 de noviembre que el Gobierno tiene previsto presentar cargos por terrorismo contra él.
La secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, dijo NBC News el 30 de noviembre que el sospechoso pudo haberse radicalizado tras entrar a Estados Unidos.
"Creemos que fue a través de conexiones en su comunidad y estado de origen, y seguiremos hablando con quienes interactuaron con él, con sus familiares, con quienes hablan con ellos", dijo Noem.
Lakanwal entró a Estados Unidos en septiembre de 2021 a través de la Operación Allies Welcome, un programa de reasentamiento de la era Biden que se puso en marcha tras la salida de Estados Unidos de Afganistán.
Las autoridades afirman que Lakanwal trabajó con varias entidades del Gobierno estadounidense, incluida la CIA, durante la guerra de Afganistán.
Con información de Jacob Burg.
















