El Departamento de Estado anunció el 18 de junio nuevos requisitos de investigación, entre los que se incluye el examen de las redes sociales de todos los solicitantes de visas de estudiante.
"El Departamento de Estado se compromete a proteger a nuestra nación y a nuestros ciudadanos manteniendo los más altos estándares de seguridad nacional y pública a través de nuestro proceso de visas. Una visa estadounidense es un privilegio, no un derecho", afirmó el Departamento de Estado en un comunicado de prensa.
Aunque se reanudaron las entrevistas para visas de estudiante, que se suspendieron mientras el gobierno revisaba su política de visas, ahora se espera que los solicitantes configuren sus perfiles en las redes sociales como "públicos" para permitir su revisión por parte de los funcionarios diplomáticos estadounidenses. No hacerlo podría interpretarse como un intento de ocultar cierta actividad en línea.
El secretario de Estado Marco Rubio sugirió que las críticas hacia Estados Unidos o Israel podrían ser motivo para rechazar una solicitud de visado estudiantil.
"Cada concesión de visas es una decisión de seguridad nacional", afirmó el Departamento de Estado. "Estados Unidos debe estar alerta durante el proceso de expedición de visas para garantizar que quienes solicitan la admisión en Estados Unidos no tengan la intención de perjudicar a los estadounidenses ni a nuestros intereses nacionales y que todos los solicitantes demuestren de forma creíble que cumplen los requisitos para obtener la visa solicitada, incluida la intención de participar en actividades compatibles con las condiciones de su admisión".
Esta medida se produce aproximadamente tres semanas después de que un alto funcionario del Departamento de Estado confirmara a The Epoch Times que se ordenó a las embajadas estadounidenses en todo el mundo que suspendieran las entrevistas para la concesión de visados de estudiante, mientras la agencia trabaja para mejorar su proceso de selección.
En un cable interno firmado por Rubio y filtrado a los medios de comunicación el 27 de mayo, la agencia dijo que estaba considerando hacer obligatorio un estricto control de las redes sociales para todos los estudiantes extranjeros que soliciten estudiar en Estados Unidos.
El miércoles, antes del anuncio, The Epoch Times supo que las entrevistas para las visas de estudiante se habían reanudado con las nuevas normas en vigor.
Los funcionarios consulares también tienen instrucciones de revisar la actividad en las redes sociales en busca de indicios de que el solicitante pueda sentir desprecio por Estados Unidos y su gobierno, sus ciudadanos, su cultura, sus principios fundacionales o sus instituciones.
Estos cambios afectarán a todos los solicitantes de visados de estudiante (F), de formación profesional (M) y de intercambio (J) y tienen por objeto reforzar la seguridad nacional.
Cuando el Departamento de Estado suspendió las entrevistas para visados de estudiante a finales del mes pasado, la portavoz de la agencia, Tammy Bruce, dijo que la administración Trump se toma "muy en serio el proceso de investigación de las personas que entran en el país".
"Siempre hemos investigado a las personas que intentan entrar. Siempre hemos examinado las visas con seriedad" dijo. "Ya sean estudiantes, turistas que necesitan una visa o quienquiera que sean, los vamos a investigar".
Al día siguiente, Rubio anunció que Estados Unidos comenzaría a revocar las visas de los estudiantes chinos, incluidos aquellos con vínculos con el Partido Comunista Chino o que estudiaran en "campos críticos".
En una breve declaración, el Departamento de Estado confirmó que colaboraría con el Departamento de Seguridad Nacional para "revocar de forma agresiva" las visas, al tiempo que revisaría los criterios de concesión de visas para "mejorar el escrutinio de todas las futuras solicitudes de visa" procedentes de China y Hong Kong.
El Departamento de Estado acusa al régimen chino de vigilar a sus estudiantes en el extranjero y de movilizarlos a través de la Asociación de Estudiantes y Académicos Chinos. Algunas de las sucursales de ese grupo en Estados Unidos admitieron abiertamente que reciben instrucciones, apoyo o financiación de los consulados chinos.
Con información de Joseph Lord, Emel Akan y T.J. Muscaro.
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